#MALOS El Origen | COMPLETA

21. Bajo Tierra

-Desde que abrió los ojos, no ha dicho una sola palabra.

-Descuida, Jeff. Gracias por llamar.

Stefano está atado a una silla en medio de una sala dentro de los Túneles que se alzan bajo tierra en Iconic Valley. Él tiene conocimiento de esta red de cuevas que conectan toda la ciudad con una construcción monstruosa llena de secretos y actos perversos, aunque nunca estuvo en persona dentro de una.

Mucho menos resultó arrastrado por un montón de matones, incriminándolo de algo que nunca hizo.

Lo que en verdad, termina por aturdirlo aún más es asumir que su padre está metido en esto...

-Stef.

Cuando cruza la puerta que el guardián permite, se encuentra a su hijo rehén de algo que si tuvo o no que ver, está por verse aunque él no duda de la buena de voluntad del chico.

El padre de Stefano es similar a él, tanto en la actual contextura física como en sus ojos azules y el cabello negro que se ve obstruido por algunas canas cuales se entrevén a la luz de la lámpara amarilla que ilumina parte de la habitación.

-Papá, diles que me saquen de acá-le suelta evidenciando su desdén-, no he hecho nada de lo que me preguntan-se excusa.

-Lo sé.

-Según dicen, han robado en La Base de Datos. Yo sólo me acerqué al bosque en cuanto oí los golpes.

-Sí, hijo. Tu buena voluntad hacia el triángulo invertido es una fidelidad que jamás podría en duda pero ¿por qué no se lo has explicado a ellos por ti mismo?

-Porque me golpearon, me durmieron y ataron a esta silla como si hubiese faltado a La Sangre. Y todo eso fue antes siquiera de que me pregunten si tuve o no que ver en su pequeño incidente.

-Lo sé-su padre suspira-. Sé que no tuviste nada que ver... Ya han encontrado a uno de los sujetos que tuvo que ver con el robo.

-¿Glorious?-pregunta Stef con un hilo de voz y un flechazo de culpa. Piensa en Ky y ruega ahora más que nunca que el tatuaje en el brazo de la chica no tenga nada que ver con los hechos que la incriminan.

-Sí-afirma su padre-. Se trata de alguien de su bando. No sé adónde pueda llevarnos esta guerra...

-Por favor, sácame de acá-le corta en seco.

-Lo haré, hijo. Pero recuerda que si vuelven a atraparte en algo que genere cualquier tipo de sospechas, no serán tan comprensivos. No como lo fueron ahora contigo.

Y no se refiere a unos simples golpes.

Stef entiende. Sabe qué puede venir luego.

Sabe también las consecuencias de que Kylie esté involucrada de alguna manera, aún sin saberlo...

Lo cual traería graves consecuencias.

-Papá-murmura Stefano con su voz ronca-: Yo nunca traicionaría a Bad Boys.

-Eso lo sé aunque me deja mucho más tranquilo escuchar que lo constates.

Su padre se coloca detrás del chico y afirma una mano cual cierra en un gesto de calidez sobre su hombro.

-Nuestra familia siempre ha tenido en claro de qué lado estar, Stef. Así que no tienes que preocuparte por eso.

No tiene que preocuparse.

Aunque sí lo hace.

Se preocupa y con razones.

En el rincón más oscuro de la retorcida cabeza del chico, sabe que no puede dejar de pensar en alguien.

En una persona.

En una chica que le preocupa mucho más que cualquier acto de lealtad a cualquier bando de sangre o de mierda. Incluso le preocupa ahora mismo, mucho más que su familia.

Stefano no puede dejar de pensar en Kylie y eso lo convierte en un traidor.

Un golpe lo saca de su estado de sopor y cuando levanta la mirada, percibe que la puerta se abre de un empujón en seco.

Entra el doctor Jeff, famoso en el triángulo invertido por sus experimentos sin límites por la crueldad o la ética.

-Doctor-le saluda el señor Guilty.

Stefano se limita a mirarlo con suspicacia.

-Es un gusto poder encontrarlos aquí. Fray, ya puedes desatarlo-le ordena a uno de los guardias y vuelve al padre de Stef-: Me resulta un honor enorme poder informarle que tenemos al ladronzuelo.

-Eso lo sabemos, Doctor. De todas formas le agradezco que se tome la molestia de venir a decírnoslo en persona.

-Su nombre es Ethan y estamos rastreando sus vínculos familiares para darles un escarmiento.

-¿Un escarmiento?-pregunta Stefano mientras saca uno de sus tatuados brazos del enrede de sogas. En verdad, no puede dejar de pensar en lo que pasaría con Kylie de ser atrapada en algún imprevisto con ellos o que ponga en jaque la paciencia de Los Jefes.

-Sí-Jeff saca su móvil desde un bolsillo de la chaqueta y busca algo. Luego lo gira y le muestra una foto al chico, luego a su padre: se trata del ojo de un animal negro por completo a tal punto de tener manchas alrededor. Podría ser un caballo o similar-. Tengo algunas pruebas que continuar y ya sabes que las pruebas en animales no son de mis preferencias.

-Prefieres a los humanos-suelta Stefano con apenas un hilo de voz. Se hace una idea de lo que se refiere Jeff con "pruebas". El ojo del caballo está colapsado de tinta negra.

-No estaría demás encontrarnos con la familia de Ethan ya que ha violado el pacto de alianza con Glorious.

El padre de Stefano se mantiene inmutable.

-Y estaba pensando-concluye Jeff-, que alguien de su familia podría ser un justo conejillo de indias. ¿Tendrá esposa? ¿Hijos? ¿Una hija, quizás?

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