- Chau, Bry... recuerda: cualquier cosa me mandas una carta- Blaine me miraba con tristeza. Nadie me había explicado nada, y él dijo no poder.
- Cariño, cuídate- mi madre me abrazó, y me acomodó la falda.
- Sí mamá, claro mamá, no te preocupes... Adios, los quiero...- miré a mi alrededor y no entendía nada.- Cómo se supone que voy a ir? La plataforma no está aquí...
- Está entre las columnas 9 y 10, tienes que atravesarlas y listo...- mi padre miró a su alrededor y me dijo que podía hacerlo ahora que ningún muggle veía.
Crucé la pared y me dirigí al tren. De camino al tren vi a una cantidad de pelirrojos. Había un chico que no tenía oreja, otro un poco más bajo que estaba abrazado a una sangre impura, una chica pelirroja estaba abrazada a... Potter? Lo saludaría.
- Hola, Harry, cierto?- éste me miró.
- Sí...- dijo dudando- quién eres?
- Soy Briar, pero díganme Bry- dije extendiendo mi mano.
- Soy Harry, aunque eso ya lo sabes...- dijo tomando mi mano.
- Yo soy Ron- me dijo el pelirrojo más bajo mientras tomaba mi mano.
- Yo soy Ginny- la chica pelirroja me abrazó.
- Hermione- y me abrazó la sangre impura, normalmente suelo alejarme de ellos, pero en este caso sería muy poco educado.
- Yo soy la señora Weasley- y me abrazó la madre de todos los pelirrojos-, dime Molly, querida.- yo le sonreí.
- George- dijo el último de los pelirrojos sonriendo coqueto.
Luego de todas las presentaciones nos fuimos al tren, no sin antes despedirnos de Molly y George. Yo me senté en la misma cabina que Harry, Ginny, Ron y Hermione. Al rato llegaron dos chicos más. Una era una chica de cabellera blanca, era muy rara, pero amable. Cuando hablaba se le perdía la mirada y parecía ausente. El otro era un chico, su novio supuse. Éste era castaño y parecía un poco olvidadizo, pero simpático. Todos me cayeron bien, pero eran muy felices, sonrientes y efusivos. Llegaba un momento en que resultaba insoportable.
- Dónde se habrá metido?- dijo una voz muy familiar.
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La Heredera de Salazar
FanfictionUna obligación. Una decisión. Una vida. Todo son mentiras, nada es lo que parece, nada es lo que ella creía. No tiene vos ni voto en una vida que ya fue planificada, la suya. Ella es la Heredera. Algo increíble. Algo valioso. Algo peligroso. Algo q...