La Heredera de Salazar

La fría verdad simboliza un final...

Briar P.O.V:

No solo me ocultó las cosas, me mintió indirectamente. Me hiso creer que tenía opinión, que podría elegir qué hacer con mi vida, cuando en verdad estoy casada desde antes de nacer. Probablemente que cuando se enteró de que estaba embarazada decidió algo así:”Oh, tendré una hija… La casaremos con el nuevo miembro de la familia Malfoy!”… 

Tal vez crean que estoy exagerando, y probablemente lo estoy haciendo… pero no es fácil tragarse una noticia así… y sin antes un buen vaso de agua.

-Vale, Madre- marque esa palabra con toda la mordacidad posible- (si es que no me mentiste también con eso). Algo más que me quieras decir? Oh si, déjame adivinar…

Se me había ocurrido, no sé por qué, pero tenía la leve impresión de que era real. 

-En verdad tu hiciste que Madam Maxime me expulsara, no?- agregué.

-Cariño… tienes razón. Y debo decirte algo más…- mi madre habló cautamente, tenía miedo a que me enfadara….

Por qué no me había pasado otro de esos episodios de enfadarme y levitar? Mi lado veela se estaba perdiendo? Pero era obvio que no, tenía una sospecha, pero me daba miedo afirmarla.

-Tienes razón, es por mi culpa que ya no levitas. Encontré una nueva forma de hacerme presente en ti, y digamos que me parece mucho más cómoda… Siempre que no estés con Draco…- la voz rastrera se hiso oír, hace varias semanas que no le oía, y eso me hiso estremecer.

-Con Draco? Qué tiene que ver él?

-Briar… Briar… Creí que eras más inteligente pequeña Marvolo…

-Marvolo? Te equivocas! 

-Es obvio que no lo hago, Briar Cecilly Marvolo. Si no me crees, pregunta a tu madre.

Salí del trance en que me encontraba, la voz se esfumó, pero sentía la presencia en el fondo de mi mente. La voz no me atormentaba, porque yo le dejaba entrar.

-Madre, mi nombre real?- le exigí con tono de pregunta.

-Disculpa?- mi madre parecía sorprendida.

Blaine se había detenido a una distancia de pasos bastante prudente, pero se había comenzado a alejar. Por su parte, Draco, estaba recostado contra un árbol, por una vez no lucía aburrido.

-Que me digas mi nombre completo!- le grité.

-Briar…- dudó, pero al ver mi mueca de desaprobación, comprobó que no le creía- Briar Cecilly Marvolo…

Le iba a escupir miles de blasfemias, entre ellas que quería me diera en adopción. No podía creer como mi propia madre, mi sangre, podía mentirme sobre algo como mi nombre! Por alguna razón “Marvolo” me resultaba familiar, por quién me lo habría puesto?

En ese momento, el carruaje de Beauxbatoms aterrizó un poco más arriba de donde nos encontrábamos. Y en el lago negro estaba, como no, el barco de los alumnos de Durmstrang. Blaine se puso pálido, eso era extraño, porque si el barco estaba aquí significaba que Patrick igual! Oh, no! Si Patrick estaba aquí y mi madre los veía juntos las preguntas iban a salir a flote, y todos sabrían el secreto de mi primo…

-Blaine!- para cuando despejé mis pensamientos Blaine ya estaba desmallado en el pasto.

-Madre tranquila, yo me encargo de él. Draco ayúdame a llevarlo a la enfermería- vi que Malfoy iba a dudar, razón por la que agregué un simple-. Ahora!

A tropezones lo entramos al castillo, todo estaba atiborrado de alumnos que se dirigían al comedor para ver al cáliz de fuego en acción. Zabini se topó con nosotros a mitad del pasillo, y se ofreció a ayudar a Draco por mí. Asentí y les dije que debía hacer algo.