Soltero y comprometida

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Briar P.O.V

-Bien, bien, bien… qué es todo este revuelo?- dijo Horace mientras caminaba hacia la multitud que nos rodeaba.

-Pero por qué me besaste?- dije luego de empujar a Draco.

-Estás de broma? 

-No, es obvio que no estoy de broma, Draqui…-sonreí, el chico tenía una cara de embobado…-Y dime, por qué me besaste? 

-Porque me gusta...

Ah, quién lo diría? Estoy a punto de ganar la apuesta que hice con el rubio. Y Zabini que decía que esto saldría mal…

-Porque me gusta verte la cara de pasmo luego de que te bese. Sí, esa misma cara, la que pone Astoria cuando la saludo- respondió todo arrogante el rubio.

-Ah, yo no…Mi cara no… El… Tú eres el que…- por alguna razón no podía finalizar ni una oración, no podía conseguir que palabras con sentido salieran de mi boca.

-Ah, quién lo diría, dejé sin palabras a Cristalstairs- respondió con sorna el rubio.

-Eres un maldito arrogante, Malfoy.

-Así te gusto, Cristalstairs.

Me di la vuelta echa una furia y me largué a donde Zabini, al que pude divisar debido a sus estruendosas carcajadas. Estaba mirando en dirección a las puertas del gran comedor, observando a April caminando con decisión.

-Eh, dime, por qué te gusta una leona?- le pregunté, sobresaltándolo.

-No me gusta, solo quiero conquistarla…- dijo sonriendo coqueto.

-Y dime Romeo, cómo te está yendo?

-No muy bien, estoy soltero! Yo, el gran Blaise Zabini, S-O-L-t-E-R-O!- chilló conmocionado.

-Ya, ya, Ligia también y no está tan desesperada- dije haciendo énfasis en el “tan”, para remarcar que si está desesperada, pero no a tal punto.

-Si es por eso Astoria también está sola, pero eso es de esperarse- hizo una mueca de desagrado-. Bueno, y… qué tal la apuesta?

Me quedé pensativa, no sabía qué hacer con eso. Por un lado yo le quería ganar, en vista de que así era la única forma de pincharle el ego. Por otro lado temía que si seguíamos con este jueguito yo terminara encontrándole cierto atractivo al rubio. Y en último lugar yo no podía hablar con Zabini, porque es su mejor amigo y confidente, así que eso sería fraternizar con el enemigo.

-No puedo hablar contigo sobre nada de mis planes. Eres el mejor amigo del enemigo, lo que te vuelve una extensión del enemigo- sonreí cínica.

-Bien, así que… Dónde crees que va a quedar nuestro querido Blaine?

-Supongo que Gryffindor, es muy valiente, ha vivido muchas cosas… Debería de disculparme con él, le dije cosas muy crueles- hice una mueca de disgusto.

-Estabas fuera de ti, él lo entenderá, te enteraste de tu compromiso… te enteraste de que te tienes que casar apenas cumplas los dieciocho, eso es terrible.

-Cómo carajo sabes eso? Ni yo lo sabía! Es que todos los que me rodean saben más de mí que yo misma!?

Las lágrimas rebosaban de mis ojos, salí corriendo hacia el jardín y me interné en algún lugar del bosque. Estaba en verdad rebosante de furia, todos sabían de mi vida, menos yo. Todos sabían que me iba a casar, menos yo. Todos sabían que tengo prometido, probablemente también sepan quién es, y yo ni idea de las cosas… es en verdad frustrante, vivo rodeada de mentiras…

Sentí unos brazos que me rodeaban, y me acariciaban la espalda, haciendo constantes círculos tranquilizadores. No me había dado cuenta de que estaba sentada en la hierba hasta que esa persona me rodeó con sus brazos. El olor a bosque y miel invadió mis fosas nasales, calmándome del todo.

-Tranquila, tranquila- me susurraba al oído-. Respira, todo saldrá bien.

El sonido melodioso de esa suave voz intentado calmarme me generaba ganas de dormir. El agotamiento invadió mis sentidos, demasiadas emociones para un solo día. Sentí que los brazos me empezaban a soltar, cuando un sollozo escapó de mis labios. Así que me giró y el color de sus ojos me absorbió por completo, haciendo que me sintiera perdida en un mar de color. Un mar cautivador.

-Ya estás tranquila? Debo soltarte para poder sentarme, no llores, sí?- asentí en contestación al dueño de ese hermoso mar.

Cuando terminó de sentarse y acomodar su capa me sonrió. En verdad que tener a alguien conmigo en un momento de bajas defensas era bueno. 

Nos sumimos en un silencio, no un silencio incómodo, sino más bien, un silencio acogedor. Le sonreí de nuevo, aunque no me vio. Tenía la vista fija en los árboles del bosque, sumido en sus pensamientos. 

-Ya estás mejor?- me preguntó.

-Si, ya me calmé… Si te hago una pregunta me contestas?

-Si.

-Quién es mi prometido?

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Hehe, hola amores, cumplí lo que les dije... como veo que les encanta comentar esta vez les dire +300, en verdad es para verlas sufrir y porque preciso tiempo para escribir :) Bien, quién creeis que es la persona? Y como bien dije, el capitulo tiene una sorpresa, saben que Bry se casa al cumplir los diesiocho, por ahora le falta poco más de un año, pero entonces que? 

La Heredera de SalazarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora