Hidden ⭐

Capitulo 20

- Lo único que tengo que hacer es encontrar una conexión con Elssa, después ella abrirá el canal y yo lo mantendré así.- Marcus esta tratanto de explicarnos la manera más sencilla para hablar con Elssa, yo dije que era mas fácil si simplemente llamaba por teléfono, pero Marcus insistió así que aquí estamos.
- ¿Seguro que funciona?- Pregunta Ian.
- Pues si no lo hace usaré mi celular.- Respondo, estoy sentaba cruzada de piernas en el sofá de la sala, Verónica esta junto a mi, nada contenta, interrumpieron las horas que tengo para entrenar con ella.
- Como sea, deja que me concentre.- Todos guardamos silencio mientras Marcus comienza a resitar algo en un idioma que no comprendo, luego le salen chispas doradas de las manos y se abre un especie de espejo en nuestras narices y del otro lado aparece el rostro familiar de Elssa.
- No tan seguido se abre un portal, ¿para qué me necesitan?- Voy a comenzar a hablar, pero luego veo el fondo de la habitación en la que esta.
- Estas en el... ¿baño?
- Iba a tomar una ducha, tienen suerte de que aun no estuviera desnuda.
- Okay, ¿podemos terminar esto rápido?, quería lanzar dagas con fuego.
- Verónica, esto es importante, compórtate por favor.- Interviene Ian al comentario de Verónica.
- Elssa, necesito pedirte un favor.- Continuo, antes de que me interrumpan.
- ¿Qué favor, pequeña?
- Dime como puedo encontrar a Nora Lewis.- Elssa se queda petrificada, no esperaba que le pidiera eso, ni siquiera yo tenía en mis planes buscar a la mujer que me dió la vida para luego abandonarme por razones que aún no entiendo.
- ¿Cuáles son tus motivos?, y que sean buenos Alana.- ¿Motivos?
- Necesito escuchar mi historia Elssa, necesito saber quién soy, y para eso necesito saber quién fue mi padre y quién es mi madre.- Lo piensa un momento y después me responde.
- ¿Y si no te digo lo que quieres saber?
- Buscaré a alguien más que lo sepa, y no me detendré hasta tener lo que necesito, aunque... Tu me ahorrarías el tiempo que no tengo.
- Tu madre esta en una dimensión paralela a la nuestra, esta en un instituto que forma a los guardianes para un futuro, la entrada esta restringida para ustedes.
- No me pueden prohibir la entrada, soy un Supremo.- «Mala idea y mal momento para ser vanidosa Alana.»
- A ellos no les importará eso, cualquiera que no este invitado a entrar es un intruso, y tienen ordenes de darle muerte.
- ¿Cómo sabes todo eso?- No tiene sentido que ella sepa todo eso, me refiero, es una bruja, no uno de nosotros.
- De la misma forma en la que Nora sabe que todo acerca de ti.- ¡Ha mantenido la relación con mi madre!
- ¿Cómo se llama la dimensión?
- Tu sabed cual es, la dibujaste.
- ¿De qué... - La colección se pierde por completo, Marcus ya no pudo mantenerla por más tiempo.
- Trae tus dibujos Alana, hay que encontrar esa dimensión.- Dice Ian aun más tenso que hace varios días.
- Ian, ¿no escuchaste?, si ponemos un pie ahí van a matarnos.- Ahora es Marcus quien habla.
- El tiene razón, además tu amada Alana solo lleva unos días de entrenamiento.- Verónica apoya a Marcus, y una parte de mi también quiere hacerlo.
- Bueno, veremos si esos días han dado resultados, ¿qué piensas tu Alana?- Me pregunta directamente Ian.
- Iré a revisar los dibujos mas recientes que he hecho, si no lo encontramos ahí buscaré en los de meses atrás, pero necesitaré ayuda.
- Otra misión suicida.- Dice para si misma Verónica, luego se levanta y me acompaña a mi habitación para comenzar a buscar.

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Después de varios blocks de dibujo, encontramos el correcto, es el de un edificio común y corriente, con unos árboles alrededor y una fuente al frente, fue de los primero que hice cuando llegue aquí, ¿cómo supe que era él?, bueno tiene las marcas que yo tengo en mi cuerpo, eso lo hace peculiar.
- ¿Podrás abrir un portal que nos deje directamente en la entrada Marcus?- Pregunta Verónica, ahora tomando con mas seriedad el asunto.
- Sí claro, ese no es un problema, es mi trabajo, mejor preocupense por que no nos maten.- Responde el algo molessto.
- Un momento, ¿qué no se supone que son inmortales?- Pregunto porque según yo eso entendí.
- Sí, no puede matarnos una enfermedad, el tiempo, una bala ni siquiera una bomba nuclear, pero... El metal sagrado eso, eso es otra cosa.- Me responde Marcus.
- Los soldados tiene espadas forjadas con metal sagrado, le llaman así porque tiene la llama sagrada, que puede matar cualquier cosa, pero está es especialmente para acabar con guardianes.- Explica Verónica antes de que pregunte.
- Bueno, una vez aclarado esto iré a prepararme, supongo que Ian querrá salir hoy por la noche.- Marcus abandona mi habitación dejándome sola con Verónica.
- Duerme, al menos un rato, vendré antes de irnos, debo darte el atuendo adecuado.- Todo lo que dijo verónica lo escuche, pero lo ignore, estoy más ocupada observando como las hojas del árbol cerca a mi ventana comienzan a obtener un color dorado aun más intenso, el otoño ya esta en su punto, a fines de semana las hojas comenzaran a caerse.
- ¿Todo bien?
- Sí, bien, tienes razón debo dormir un rato.- Le respondo a Verónica luego me dirijo a mi cama y me quedo profundamente dormida.

«- Averiguas tremendamente rápido Alana.- La misma chica con la que hable la ultima vez, esta de nuevo presente, en el mismo lugar y con el mismo ambiente a nuestro alrededor, pero ahora se ve más... Perturbada y demacrada.
- ¿Qué fue lo que te sucedió?- Escucho mi propia voz asombrada, no se veía así la última vez.
- No eres la única que tiene el tiempo en su contra.- Responde encogiendo los hombros como si no tuviera importancia.
- Tu no me buscaste porque quisieras ayudarme, lo hisiste porque quieres que yo te ayude a ti.- Ahora todo tiene sentido.
- Cierto, aunque también quiero ayudarte... Si tu me ayudas a mí, créeme mi ayuda te parecerá una gran ventaja.
- ¿Y como puedo ayudarte según tú?
- Sigue buscando, aun hay mucho por descubrir, no puedo hablar contigo si tu no entiendes nada de lo que digo.- Antes de que pueda decir algo, desaparece y yo habro los ojos»