Abrazando A Mi Luz Oscura

17. La Guardiana Del Martillo

Retrocedamos unas horas, justo cuando Heimerdinger dice que tiene un regalo para Lulu.

-No pensé que encontrar mermelada de moras fuera tan difícil.- Veigar caminaba con un frasco en una mano, la lanzaba y la volvía a cachar.

Se oyó que una puerta se cerró violentamente, giró para ver que causó el ruido. Lulu estaba delante de una casa corriendo apresuradamente, ella paró en seco al sentir su presencia, ambos hicieron contacto visual.

-¿Qué haces aquí?- el mago la veía fastidiado.

-Voy a probar mi nuevo cetro.- lo decía muy alegre alzándolo.

Veamos...

El mago sonrió maliciosamente, la hechicera se sorprendió pero pudo notar el brillo intenso de su mirada, ambos sabían que seguía. La yordle le dedicó una sonrisa desafiante.

-¡Muestra lo que tienes, "hechicera"!- Acentuaba moviendo sus dedos, chasqueó para hacer desaparecer el frasco y empezó a cargar su cetro.

-¡Esto no te va a gustar!- la pequeña lo señaló con su cetro y tomando posición de ataque.

-¡Vamos por él Pix!-

Ambos lanzaron varias veces un poco de energía con su cetro, la de Lulu eran brillos rosados y el de Veigar eran destellos blancos, chocaban las energías dispersándose.

Para romper la posición Veigar encerró a Lulu dentro de cuatro pilares.

¡Velocito!

Al tratar de salir de ahí algo la detuvo y quedó paralizada, el mago carcajeó y le apuntó con su cetro.

-Eres demasiado fácil de vencer.-

Se escuchó que algo caía de los cielos, era un meteorito de materia oscura.

-¡Tremendo!- Lulu repeló el meteorito haciendo que lo que había cerca de ella saltara y ella en cambio creció de tamaño, Veigar cayó cerca de un árbol soltando su cetro.

¡Prim!

Aprovechó que el mago tratara de incorporarse para aventarle a Pix, volviendo a quedar en el suelo. La pequeña empezó a reír.

-¡Lo lamentarás!- gritaba enojado Veigar.

-Pero si sólo estamos jugando. ¿No?- la yordle no paraba de reír.

El yordle tomó su centro para lanzarle otro hechizo. Lulu había recuperado su tamaño original.

Plum

De ambos lados ellas le lanzaron algo de brillo aturdiéndolo, Lulu empezó a mofar como una desquiciada junto con Pix. Pero, no oían que algo caía del cielo.

En medio de sus carcajadas a la yordle le cayó materia oscura en la cabeza tirándola de una, haciendo que Veigar se burlara.

Finalmente ambos quedaron en el suelo, se miraron el uno al otro, el maestro del mal reía muy diferente a como Lulu había visto en anteriores ocasiones, ella también rió.

Para Pix la escena era rara, no entendía como hace un segundo estaban atacándose y ahora reían juntos.

¿Qué clase de "no amigos" es este?

Después de todo, fue un juego para Lulu.

Veigar dejó de reír, respingó, se dió cuenta que acababa de reír con alguien que apenas conocía, ella ahora lo había visto triste y alegre, no debía de permitirlo; antes de poder decir algo, Lulu se levantó y tomó su cetro.