Venganza

Cap 4

Me quede parada al ver a Vero mi amiga del alma mi confidente mi todo, mi cuerpo temblaba y ya no era por el reencuentro si no por lo poco que me acordaba de anoche ella no podía ser la del beso era mi amiga a ella no le iban las chicas o si pero a mi tampoco por lo menos hasta ayer dios mio que me estaba pasando me estaba confundiendo sacudi la cabeza en el momento que Vero se abrazo a mi sacandome de mis pensamientos.

Pasamos unos minutos así abrazadas hechaba de menos un abrazo sincero y más los de ella, nos separamos las dos teníamos las mejillas mojadas por nuestras lágrimas, puso sus manos en mis mejillas mientras me mirava.

-No sabes cuanto te he echado de menos Elsa, he pensado tanto en ti.

-yo también Vero me has hecho tanta falta.

-Siéntate te prepararé un café te hará falta y una pastilla.

Me senté como me dijo mientras servía una taza de café para cada una me tendió una pastilla y un vaso de agua y se sentó a mi lado, me bebí la pastilla y luego las dos bebimos un sorbo del café.

-Te acuerdas de algo?

-No demasiado, bebí mucho verdad?

-Yo diría que bastante.

-Vero yo no soy de esas.

-Lo se cariño. Quieres hablar?

Dude un momento per era mi amiga y yo necesitaba desahogarme le conté algo por encima sin llegar a entrar en detalles escabrosos.

-Pille a mi novio con otra.

-Dios joder será cabron!

-No es la primera vez que me es infiel.

-Que vas hacer Elsa?

-Hecharlo de mi vida Vero estoy harta.

-Haces bien ojalá mi amiga hiciera lo mismo es igual que el tuyo.

-Vero puedo hacerte una pregunta?

-Claro cariño.

-Hice algo mal anoche.

-A que te refieres?

Agache la cabeza temía que preguntarle si la había besado tenia que quitarme el peso de encima.

-Ayer te bese?

-Jajajajaj!!

-Lo hice?

-No Elsa a mi no besaste a mi amiga.

-Dios mio!

-Tranquila entiende que era el alcohol. Pero Elsa te gustan las chicas?

-Noooooo!!

-Y entonces?

-No se no lo entiendo pero no puedo quitármelo de la cabeza disculpame con ella?

-No te preocupes Elsa.

Después de un rato de conversación quedo todo aclarado comimos nos dimos los teléfonos yo tenía que marcharme arreglar el asunto con Pedro, Vero quería venir conmigo pero yo preferiría que no tenia que arreglarlo sola.

Me despedi de ella con la promesa de llamarla antes de finalizar el día, cogi un taxi debajo de su casa le di la dirección de mi apartamento.

Media hora es lo que tarde en llegar baje en la misma puerta le pague lo que me pidió.

En la misma puerta de la escalera mi cuerpo empezó a temblar mi corazón a galopar, solo esperara no encontrarlo, no quería verlo escuchar sus mentiras y volver a caer en sus redes.