Sangre Joven.

- Día 11- Parte 5.

(Aria, Alex)

Silecsis

Álex se puso la camiseta (por fin) y comentó "estarás hambrienta."

No hizo falta contestar, pues mis tripas lo hicieron por mí.

- ¡jajajaja! – empezó a reírse Álex.

- No tiene gracia...

- Bueno, bueno. Dentro de nada será el toque de queda. Si nos ven por ahí tendremos problemas más serios de los que podíamos haber tenido antes.

- Bueno, pues corramos hacia las afueras.

- Perdón, ¿pero tan veloz eres? No nos daría tiempo. Por culpa de los guardias nos hemos alejado un trecho importante – respondió él.

- ¿ Y qué hacemos entonces?

- ¿Te dan asco los bichos?

Pensé que se refería a sí mismo, en plan "pues hoy dormirás con uno" o algo así.

- Oh cariño – empecé sarcásticamente- tu no eres un bicho, "insoportable" es la palabra que buscas.

Álex me miró con cara de " Jah... que gracia"

– bueno, pues como veo que no, le hago saber a la señorita que hoy dormirá en una alcantarilla subterránea con ellos.

Empecé a sonreír por la contestación, pero tras ver la cara de Álex me percaté de que no era broma.

- ¿Qué?

- Lo siento, no sé de otro lugar dónde puedas dormir tranquila.

- ¿Y tú?

- ¿Yo? Pues hay una encantadora ancianita de nombre Isabel a la que le encantan los animales y estará impaciente, esperando a que Nico se presente por su casa y luego se acueste plácidamente a los pies de su cama.

- Serás....

- Anda, deja de quejarte que sabes que no te voy a dejar sola. Sígueme.

Álex y yo caminamos un rato y, aunque hubiese deseado que lo de la alcantarilla fuera mentira, no lo era.

Álex levantó la pesada tapa del asfalto mientras decía: Escóndete aquí, rápido.
Empecé a bajar esas sucias escaleras y él se trasformó en Nico. – haz el favor de guardar mi ropa – Y acto seguido me fue pasando con su hocico las prendas.

- ¡Pero si llevas calzoncillos de Mickey Mousse!-Comenté para burlarme un poco de él

- ¡¡¡Cállate!!! - respondió avergonzado. Seria un gato, pero juraría que se le veía el pelaje un poco rojo – no puedo robar gran cosa limpia siendo un gato...

- Bueno, ¿y... te has parado a pensar cómo vas a cerrar la tapa siendo gato?

Hubo unos segundos de silencio. Vi en su cara gatuna como se daba cuenta de tal error.

- Anda.. Pues... Es verdad... ¡Tu mira hacia otro lado hasta que yo te avise!

- ¿Te vas a hacer humano estando desnudo?

- No me queda otra opción...

Al revisar numerables veces que la calle estaba desierta, sin rastro de humano por la zona Álex cerró la alcantarilla en su forma humana. Luego se volvió a transformar en gato y fue a por algo de comida.

Al irse, pensamientos que había logrado apartar de mí resurgieron en mi cabeza.

- no debí separarme de ellos... ¿estarán preocupados?... – dije mirando por el pequeño orificio de la alcantarilla.