Sangre Joven.

- Día 15 - Parte 3.

Silecsis

Después de haber caminado un buen rato, las piernas de Luna empezaron a ceder por llevar a Gael a cuestas en forma Dragón.

- Creo... que deberíamos parar un rato Tessa.- Dijo Álex.

- ¿Pero si no llevamos ni tres horas de camino?- dijo ella.

Álex se acercó a Tessa y en un susurro le respondió- Hoy Luna no ha probado a penas bocado. Está preocupada por Gael. No deberíamos seguir con ella tan baja de fuerzas. Descansemos un rato y ahora llevo yo a Gael.-

Tessa asintió y pararon a descansar. Con la ayuda de Álex, Luna puso a Gael en el suelo colocándole la gabardina como almohada mientras Tessa vigilaba un poco los alrededores. Tras esto, se acercó a ellos.

- Chicos, he visto un pequeño estanque cerca. Si queréis id a bañaros, de paso rellenad las botellas. Yo cuido a Gael.- comentó Tessa.

Álex y Luna decidieron ir al estanque. Luna lo seguió desde atrás mientras él seguía las indicaciones que Tessa le dijo.

- Mira, Luna, aquí es.- Dijo Álex .

Luna miraba al suelo y asintió. Se sentía avergonzada. "¿Por qué me siento así? No soy capaz de mirarlo..." pensaba mientras jugaba con los pliegues de su ropa. De repente, agua caía encima de ella. Cuando levantó la cabeza, vio a Álex con los pantalones remangados dentro del estanque. Le había echado agua.

-¡Deja de pesar!- dijo Álex .

Luna lo miraba. No sabía qué hacer. Entonces Álex salió y se paró delante de ella.

-¿Te ha comido la lengua el gato?

- No...

Su corazón se aceleraba cada vez que Álex estaba junto a ella.

- ¿Prefieres estar tranquila? ¿Tumbarte en la hierba?

- Si... supongo.

Álex no sabía que hacer para animarla. Así que se tumbó en la hierba y Luna hizo lo mismo.

- Me puedes contar lo que quieras, lo sabes ¿no?- dijo Álex. Y continuó- Ya sé que no soy tu familia, pero no sé... no quiero que te pese lo de Gael, Luna.

- No... no me pesa.

- ¿Entonces?¿Qué te pasa?

Luna lo miró y vio como la observaba atentamente. Ella se sonrojó y le dio la espalda. Álex se quedo pensativo, pero no tardó mucho en hacerle cosquillas. Él quería que ella riera.

- ¡Ah! ¡Pua!- Gritaba Luna entre carcajadas.- ¡Para!

- No hasta que me digas que te pasa.- respondió Álex .

Luna se levantó y empezó a correr mientras reía. Álex la seguía intentando hacerle más cosquillas. Se sentía bien al verla sonreír y reír en esa situación. Entonces, Álex la agarró y ésta se tropezó, cayendo los dos al suelo.

- ¿Estás bien?- preguntó.

Luna quien cerró los ojos con la caída se sorprendió, pues al abrirlos vio que Álex estaba encima de ella esperando una respuesta. Al percatarse de la situación, él se apartó. No fue consciente de la rapidez con la que latía el corazón de Luna.

- S...Sí...- dijo ella con un hilillo de voz.

Álex volvió a tumbarse en la hierba. Despreocupado, se dedicó a mirar al cielo.

- Á-Álex...

- Dime-

- ¿Qué crees que siente Gael por Aria?