Sangre Joven.

- Día 14 - Parte 3. Gael.

Silecsis

Gael fue a inspeccionar el Oeste y Sur de la susodicha casa. Primero se dirigió al Oeste, donde inspeccionó y no vio nada raro. Luego, mientras se dirigía al Norte, escuchó un ruido extraño, como si de un disparo se tratase.

Gael se paró en seco. Ese disparo hizo que su cabeza se encontrase vacía, en blanco, sin ningún pensamiento. Ninguno, excepto la imagen de Aria.

- ¡Aria!- dijo comenzando a correr como nunca antes había corrido-

En cuanto llegó se encontró con Álex abrazándola.- Aria... Álex ¿qué haces?- dijo Gael.

Álex miraba a Gael y en la cabeza de éste último solo existía la palabra "suéltala"

 -N-Nada- dijo Álex.

 -He oído un ruido y pensé que te habría pasado algo... digo os habría pasado algo- esbozó a hablar Gael continuando en su cabeza "imbécil, casi la cagas, bueno, creo que no se ha notado mucho... Creo que lo conseguí arreglar."

- No, no, estamos bien. Tranquilo- respondió Aria con una sonrisa.

 -¿Habéis inspeccionado ya?

- Sí, ¿y tú?

- No... voy a volver, no vaya a ser que tengamos visita inesperada- dijo Gael yéndose de la escena. No quería que se diera cuentan de que le molestó el abrazo entre ellos.

Mientras Gael se dirigía al Norte, vio en el suelo un trozo de tela rosa, un rosa como el de la blusa de Tessa. Él lo reconoció y volvió al refugio. Cuando llegó se encontró a Álex y Luna a los pies de un árbol, a Cor en la cocina y a Aria dando vueltas intranquila.

En cuanto Aria lo vio se fue hacia él.

- Oye, no me dio tiempo a preguntarte, ese ruido que oíste... ¿se sabe de qué era?

- La verdad es que no lo sé.- comentaba mientras echaba un vistazo a los alrededores. -Oye, ¿Y Tessa?

- La dejaste en el piso superior- dijo Cor.

Gael se fue corriendo hacia las escaleras dejándome atrás.

Me empecé a molestar, ¿por qué tiene que ir corriendo Gael a buscarla?

En cuanto bajó, empezó a gritar. - ¡Tessa no está!- con un trozo de tela en la mano. Se podía ver la desesperación en sus ojos aunque yo no podía entender por que sentía tanta preocupación.- ésto es de ella, es un trozo de su blusa, estoy seguro.

Álex y Luna se percataron del escándalo y decidieron acercarse. Entones, Álex, quien hacía un esfuerzo porque no se notara que había llorado, dijo: ¿Se la han llevado?

- No lo sé-

- ¡Hay que encontrarla! No puede estar muy lejos- Cor estaba extrañamente alterado. Llevaba actuando raro desde que Tessa llegó.

- Tranquilicémonos- dije, interrumpiendo a Cor.

- ¿Tranquilos? Esas bestias nos están buscando.

- Bueno... ninguno pensó en eso antes de dividirnos. Pero tranquilízate, vamos a encontrarla - esta vez me acerqué lentamente a Cor.

- ¡Pero yo debí protegerla!- gritó Cor, perdiendo completamente los nervios mientras zarandeaba sus puños hacia abajo de desesperación.

Cor no había expresado ningún tipo de emoción hasta el momento. Fue la primera vez que vi que le podían sus sentimientos. ¿Podía ser que....?

Mientras sus últimas palabras resonaban en las cabezas, articulé la pregunta que se veía en los ojos de todos.

- Cor...¿te gusta Tessa?