Sangre Joven.

- Día 20 - Parte 10.

BellSan4

Luna también desapareció.

-Gael- resonó la voz de Cor entre la tensión- Acércate.

El chico lo miró extrañado y tal y como dijo, se aproximó a su amigo.

-Tu también deberías irte Cor. No estás en condiciones.

-Cierra la boca.

Le calló. Agarró con dificultad el muñón del joven y con una de las pocas fuerzas que tenía, creó una burbuja negra alrededor de su cuerpo.

-¡NO!.

Gael se intentó deshacer de él, pero no podía.

-¡COR!-

El chico cayó al suelo entre un charco de sangre, mientras escupía por la boca. Gael lo sujetó con el brazo que le habían arrebatado, ahora en su sitio de nuevo.

-¡¿Eres idiota?! ¡¿Es que quieres matarte?!- Gael gritaba enfurecido.

-Mírame bien. Ya no hay salvación para mí, tú lo sabes mejor que nadie. No puedes salvarme, nadie puede. Déjame morir con orgullo, sigue mi plan, pelea junto a mí, compañero.

Cor levantó su mano derecha con dificultad en un puño. Gael opesó lo que su amigo le decía, debía cumplir su petición. Le chocó el puñi.

-Vamos a patear a esas bestías.

Gael y Cor se encontraraban los primeros, delante de todos los cambiados. Vieron como cientos de los soldados de la organización avanzaban hacia ellos siguiendo a los predilectos del Comandante quien los lideraba a todos.

Dejaron que se acercaran; ninguno de los cambiados retrocedió. A unos pasos de ellos el Comandante se detuvo, todos se detuvieron.

-Vaya, vaya... La que habéis formado... Y todavía creeís que podeis ganar.-Rió

-No lo creemos. Ganaremos.-Le desafió Gael.

-Ja....- Al Comandante se le cambió la cara, su gesto se volvió serio.-Aniquiladlos.

Todos los osldados dieron un paso hacia delante. Gael alzó un brazo, usando todas sus fuerzas en su poder. La luz que emergió de su mano cegó a todos los miembros de OR.EX.CAM. Cor alzó la vista, mirándolo, Gael también lo miró.

-Gracias, mejor amigo- Le dedicó una sonrisa. Entonces él alzó su brazo también.

El grito ensordecedor de Cor se escuchó en todo el patio. La mayor esfera que pudo crear surgió entre todo el escuadrón de guardias. Cor se mantenía en pie gracias al fuerte agarre de Gael.

"Ahora viviré dentro de tí"

Las palabras de Cor resonaron fuertes en el corazón de Gael entre el manto que surgió al crear el círculo negro. En un abrir y cerrar de ojos, tan rápido como había surgido la burbuja, se desvaneció, a la vez que el cuerpo de Cor se desplomaba en el suelo sin vida.

Gael se arrodilló junto al cuerpo de su amigo.

-Te prometo que jamás te olvidaré mientras viva.

Respiró hondo, alzándose con la mirada llena de ira.

"No dejaré a ninguno con vida"

El humo que se había levantado se dispersó, revelando las cuatro figuras supervivientes. El terreno había desaparecido junto con parte del edificio. Ahora era el turno del enemigo.

La guerra final había comenzado.