Acelero la velocidad de la motocicleta y provoco una nube de polvo al frente de mí, la cual atravieso con los ojos cerrados y una pequeña sonrisa en mis labios. Doy un par de vueltas y luego me detengo frente a los chicos entrenadores, me quito mi casco de seguridad y Valentina corre hacia mí y me lanza una botella de agua.
— ¡Perfecto! —Grita ella —Eres el mejor de todos los nuevos por aquí.
—Pues llevo un montón de semanas, todo sacrificio tiene sus recompensas.
—Es una lástima Jersey que no tengas una motocicleta propia —dice Valentina mientras baja la mirada —Pero de todos modos, sé que mañana es tu cumpleaños... así que...
—Dime por favor que no me compraste algo —agrego incómodo pero a la vez feliz —No tenías que hacerlo —suelto con una pequeña carcajada.
—Si pues necesité hacerlo —dice ella mientras juntos caminamos a sentarnos en los camerinos donde guardo mis cosas —No es la gran cosa, pero espero que te guste —Valentina abre uno de sus casilleros y me entrega una caja de colores del tamaño de mi cabeza, de inmediato me doy cuenta que es lo que me ha regalado: un casco de seguridad. Lo abro y veo uno de esos pero también un par de guantes sin los dedos, lentes negros y por raro que sea, también hay gel para el cabello.
— ¿Por qué hay gel para el pelo aquí? —digo riendo.
—Eres un chico malo —dice Valentina mientras toma un poco de gel y lo unta en mi cabello sin mi permiso —Tienes... que verte genial cuando... regreses por tu novio.
—Si pues, mi plan de comprarme una motocicleta se fue a la basura hace un par de días y no quiero regresar de la forma normal.
—Jersey no seas bobo, ¿Sabes porque te he dado todos estos regalos? —Yo niego con la cabeza mientras Valentina juega con su cabello rubio —Sé que eres lo suficientemente capaz para lograr todo lo que te propongas, ¡Dios! Cuando llegaste aquí y me dijiste lo de tu enfermedad, lo de Ian y además el accidente que sufriste, pensé 'Este chico tiene entusiasmo, pero no será suficiente; hay mucha historia detrás y le tendrá miedo a la velocidad de la motocicleta'.
— ¿Pensaste todo eso apenas me viste? —pregunto mientras saco mi mochila y comienzo a guardar todas mis cosas.
—Si —agrega ella bajando la mirada —Pero me sorprendiste, y algún día tendrás tu propia motocicleta, eso lo juro.
—Eso espero... —digo mientras me muerdo mi labio inferior y cierro la puerta de mi casillero para poder irme a casa ya que es algo tarde para seguir aquí.
Camino con Valentina hasta la salida del lugar, mis pies se vuelven a llenar de polvo y lodo pero no me importa, mi amiga se despide de mí con un beso en la mejilla y luego me abandona para irse a su casa.
En silencio doy pasos lentos hasta llegar a mi casa, tomo mi teléfono mientras abro la puerta y veo a Franco con un montón de papeles en la mesa y algunos destacadores de texto color amarillo y rosado.
—Hey —le digo mientras camino hacia él.
—Hola —agrega él algo frustrado.
— ¿Sucede algo?
—Solo odio este Colegio, es todo —dice él mientras niega con la cabeza y ordena el desastre que tiene con todos sus apuntes —Papá debe estar por llegar.
—Lo sé, por eso vengo llegando justo ahora; sabes que no le gusta que esté mucho rato por las calles.
—Como si estuvieras haciendo algo malo —responde Franco con sarcasmo y rodeando la mirada, yo río en silencio algo avergonzado ya que las clases de motocicletas son a escondidas y mi Padre tiene razón al sospechar que hago algo que no debería. Pero ni modos, ¿Qué más puedo hacer? No quiero estar presionando letras en mi notebook y violando cables USB toda la vida como él planea.
ESTÁS LEYENDO
Sobre La Motocicleta
Ficção AdolescenteEl Padre de Jersey jamás les ha prestado mucha atención a sus dos hijos. Y Jersey solo acepta aquello, principalmente porque no tiene la valentía suficiente para subirle su tono de voz ni a su Padre o a su fastidioso hermano. Jersey se podría decir...