Viviendo con The Vamps 3: Independence Day

Capítulo 83

Narra Bradley:
James me da la carta y la guardo en mi maleta.

-Dásela y dile que lo siento.

-Uh, eso no suena nada bien.

-Es lo mejor para todos.

-¿Eso crees?

-Sí.

-Lo siento James.

- De verdad, no le des vueltas que todo irá bien. ¿Connor sabe que te vas?

-Sí, me ha dicho que él irá en unas semanas, que le pase fotos y que espera que lo pasemos bien.

-¿Te llevo al aeropuerto?

-Si me haces el favor me vendría genial.

-Pues vamos, cojo a Ronan y nos vamos.

-Gracias por traerme.- digo saliendo del coche.

-De nada y por favor, dile que lo siento muchísimo.

Narra Summer:
Llevo un par de días bastante nerviosa, básicamente porque Bradley le había contado que venía y tenía muchas ganas de verle.
Finn está en casa y yo me he venido sola a esperarle.

El vuelo a los Ángeles llega en quince minutos, así que me siento en el suelo y me pongo los auriculares para pasar el tiempo.

Por fin llega el vuelo y la gente comienza a salir.

-¡Bradley!.- chillo cuando le veo aparecer por la terminal del aeropuerto.

-¡Summer!.- me saluda con la mano y viene corriendo a abrazarme.

Se abraza a mí con fuerza y nos quedamos en silencio los dos.

Me mira de arriba a abajo y sonríe.

-¿Cómo estás?

-Genial, y tú.

-Muy bien.

-Vamos, que te llevo a mi casa.

-Puedo quedarme en un hotel si quieres.

-Ni sé te ocurra. Encima que vienes no vas a pagarte un hotel.

-Pues muchas gracias.

-No me las des, tengo que dártelas yo por haber venido a mi auxilio Bradley.

-Es lo que haría cualquier amigo.

-Otros no se han dignado ni en coger el teléfono.

-Sobre estoy tengo que darte algo cuando lleguemos a tú casa.

-¿El qué?,- pregunto nerviosa.

-No es grave Summer.

-Por esa cara sí es grave.

Llegamos a casa, Finn no está así que le enseño a Brad la casa y nos sentamos en el sofá.

-No sé si debería darte esto ya, pero creo que va a ser lo mejor.

Me da un sobre y me mira serio.

-Léela cuando tú quieras y no le des vueltas.

Lo guardo en mi bolsillo y miro a Brad de reojo.

-Léela ya, que lo estás deseando.

Saco la carta de golpe y comienzo a leerla.

Querida Summer:
Lo primero de todo: lo siento.
¿por qué lo siento te preguntarás?
Por todo.

¿Con qué me refiero a todo? Pues al hecho de haber jugado contigo todo este tiempo, sé que en parte ambos hemos tenido la culpa.
Hemos estado tirando de la cuerda durante mucho tiempo y creo que ya es hora de que ambos soltemos los extremos que nos unen.
Sé que te dije que iba a estar aquí esperándote y me encantaría poder hacerlo pero al enterarme de lo de Tristan me he sentido realmente mal, he hecho todo lo posible para protegerte y para qué estés bien y aún así no ha servido para nada.
No sé qué razones habréis tenido para alargar lo que supuestamente sólo iba a ser una conversación pero me sentí mal, como si lo que yo te ofrezco nunca sea suficiente.