Van pasando los días, y según las chicas y los chicos tengo que ir saliendo a la calle un poco más, así que hoy Ali y yo decidimos ir a por los libros de texto, en compañía de James.
-Si, tenemos una reserva a nombre de Summer Reynolds y de Ali Todd.- le digo a la dependienta.
Saca el encargo y mira una nota.
-¿Queréis también los que están a nombre de Jackson Harries?
Yo me quedo en silencio y empiezo a temblar un poco, Ali me agarra la mano y James comienza a hablar:
-Jackson Harries falleció hace poco.
-Lo siento, ha sido un comentario desafortunado.
-No importa.- le digo, mientras le doy a Ali el dinero de mis libros.- Necesito salir.
James me acompaña fuera, me pongo a llorar y él me abraza.
-Esto es una mierda.- le digo en un susurro.- No puedo seguir así.
-Si puedes, vas a salir adelante cariño.
-No lo sé James, cada vez lo veo más negro.
Volvemos a casa, Ali y yo preparamos la comida mientras James pone la mesa.
-Se está portando muy bien contigo.- me susurra Ali.
-Lo sé.
-No es tan malo como parece.
-Depende de las circunstancias.
-Se está portando como un verdadero amigo.
-Lo sé.
-No como Connor.
-Si Connor no viene a estar conmigo es porque desde lo que pasó con Rodrigo la última vez no puede estar aquí.
Hace unos días Connor vino a visitarme y Rodrigo está a aquí con Ali, no paró de mandarle indirectas y al final casi tuvieron una pelea.
Ali se queda en silencio.
-Sé qué le quieres muchísimo, pero no podemos estar siempre igual, tiene que aprender a tolerar la presencia de Connor.
Después de la comida Ali se va con Rodrigo y James me invita a irme a su casa, así que acepto.
-Ponte cómoda.- me dice James sonriendo.- Yo voy un momento al baño y a avisar a Connor.
Me quedo sentada en el sofá y Tristan aparece por detrás algo sorprendido.
-Hola, ¿qué haces aquí?.- dice sentándose a mi lado.
-Me he venido un rato, James no quiere que esté sola.
-Normal, en tú estado.
-Estoy bien Tristan.
-¿Te apetece un té?
-No demasiado.
-Pues a mi si, vente a la cocina.
James sigue arriba, me quedo sentada en la encimera mientras observo a Tristan.
-¿Tienes frío? Sé nos ha estropeado la calefacción.
-Un poco, pero tranquilo, estoy bien.
-Ahora mismo vengo, controla el agua hasta que hierva.- dice mientras se va corriendo.
Poco después vuelve a la cocina con una sudadera entre sus brazos, me la pone y sonríe.
-¿Te acuerdas de esta sudadera?
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Viviendo con The Vamps 3: Independence Day
FanfictionCuando Summer se mudó a Madrid todo cambió, pero su mundo, dejó de estar patas arriba por unos meses. Desde el otro lado del mundo las cosas se ven de una manera muy diferente a como se veían en Londres, pero pueden resumirse de una manera muy senci...