Respire profundo y quite la tapa.
Lo primero que vieron mis ojos fue un sobre amarillento por el tiempo. No tenía nada escrito.
Lo tome y saque el trozo de papel que había en su interior. Era una carta. Una carta escrita por mi tía para mamá.
No quise leerla, sentí que traicionaría a mamá si lo hacia. Así que la puse en un lado.
Había una fotografía, tenía una inscripción en la parte de atrás
«Benjamin y papá
España, 2003»
—¿España?
Mire la fotografía detenidamente.
No había duda de que ese era papá, ese horrible hombre.
Benjamin
Sabía que papá había tenido un hijo en España. Lo sabía.
¿Era coincidencia que se llamara Benjamín?
¿Era mí Benjamín?
Eso no podía ser posible, no creo que ese señor fuera tan estúpido como para traer a su hijo aquí e inscribirlo en el mismo instituto...
Había un par de cartas más entre mamá y mi tía.
Una de mi padre, la única carta que leí.
Decía que no volvería de España, que había encontrado otra mujer y que tenía un hijo al que sí amaba.
Ojalá hubiera cumplido su promesa y no hubiera vuelto jamás.
Encontré más fotos de Benjamín con papá, un par de cartas más, y en el fondo, un par de fotografías. Al igual que las otras, también tenían una inscripción.
«Daniel y Benjamin»
Y ahí estaba yo, junto al Benjamín de las fotos con papá...
Había otra foto, estaba pegada con cinta, obviamente alguien la había roto, le di la vuelta.
Un Daniel de 7 años de edad, junto a Benjamin, un tierno beso en los labios...
Era la foto de la que hablaba Denisse...
Sería mucha coincidencia que ese Benjamín fuera mi Benjamín, sentí un leve dolor en el pecho. Me deje caer sobre la cama.
La cabeza me daba vueltas. Y lágrimas rodaron por mis mejillas. Todo era tan confunso, tan extraño...
Estaba solo, me sentía solo...
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Say I Love You.
Teen FictionDebido a las influencias de su madre, Daniel va a parar al instituto Vinci, una escuela exclusiva para chicas. Pero estar rodeado de chicas todo el tiempo no es el paraíso como muchos creerían, o al menos, no lo es para Daniel. Ya que, se entera de...
