Say I Love You.

Capitulo 10, tercera parte.

En la puerta del refrigerador, pegado con un imán, encontré una nota de mi padre:

"Tuve que salir fuera de la ciudad.
Estuve esperando a que llegaras de la escuela, para decírtelo.
En el cajón de mi buró que esta a lado de mi cama,
puedes encontrar algo de dinero.
No estoy seguro de cuando regresare, espero que no sea mucho tiempo.

-S.H."

Extrañamente, saber que no vería a papá en un par de días me alegro. Por ahora, no deseaba verlo. Me di una ducha, me puse mi pijama y me acosté en mi cama. Las luces de mi habitación apagadas. La lluvia golpeando contra mi ventana, unos relámpagos a lo lejos. Puse mi mano sobre mi frente.

¿Estaba equivocado? ¿En verdad era tan egoísta? ¿En qué momento me convertí en tsundere? Tantas preguntas aparecían en mi cabeza, preguntas que no tenían respuesta, preguntas que necesitaba responder. Y de repente, los ojos de Daniel y Sebastian aparecieron en mi cabeza, el recuerdo de ambos chicos. Sin darme cuenta me quede dormido.

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-Te... Yo creo que te amo.

-Yo también, creo que te amo, Sebastian.

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Abrí los ojos de par en par. El sol brillaba a través de la ventana. Mi beso con Daniel se veía tan lejano, a pesar de que había sido ayer. Me puse de pie y fui al baño.
Apenas salí, escuche el timbre. ¿Quién podría ser?

Baje las escaleras, abrí la puerta. Frente a mi, estaba Fanny. Cerré la puerta en su cara. Y me dirigí a la cocina.

-Oye! ¿No te ha dicho tu papá que es de mala educación cerrarle la puerta en la cara a las personas?

Demonios. No le había puesto el seguro a la puerta. Me alcanzo en al cocina, había puesto un sartén en la estufa. Ella se sentó en la mesa.

***

Prepare huevos fritos con tocino y jugo de naranja. Por lo menos, pude disfrutar del silencio mientras preparaba el desayuno. Me senté en la mesa.

-No quiero ser grosero, pero ¿qué haces aquí?

-Te hice una promesa, ¿no?

-Eso no fue lo que te pregunte Fanny...

-Vamos a hacer un plan para que Daniel sea tuyo

-Pero yo no pedí tu ayuda

-Y yo no pedí tu opinión, así que callate y escucha... Esto es lo que haremos