▶Consecuencias◀ [PaperHat]

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Al llegar a su recamara, soltó un suspiro y se dejó caer sobre la cama, cayendo en un profundo sueño.

Al día siguiente, el científico se había despertado un tanto cansado. Se levantó de su cama y salió de su habitación, vistiendo solo su camisa y unos bóxer.

Se dirigió hacia la cocina, quería tomar un café antes de ponerse a  trabajar en su laboratorio.

Mientras encendía la cafetera.
No se dio cuenta de que... Dicha chica lagartija se hallaba detrás suyo, hasta que ésta soltó un grito cerca del de bolsa, asustándolo.

—¡DEMENCIA!

—¡¡¡HAHAHAHAHA!!! ¡¡DEBISTE VER TU CARA!! —reía la fémina a carcajadas, sosteniéndose su estómago.

—Apenas ni son las 10 y ya empiezas con tus juegos... —volvió su vista hacia la cafetera.

—Ohh~ Vamos cabeza de bolsa, no me digas que tu mal humor te lo pego el jefe~ —comentó de manera burlona la chica.

—¡¿Q-Qué?! —volteó a ver a la chica, con un pequeño rubor que no se notaba gracias a la bolsa que usaba en la cabeza.

—Oh vamos Flug, no te hagas él tonto~ —se sentó en la pequeña mesa que había ahí—Sabes bien de que hablo~.

—¿Pero qué dices? No sé a qué te refieres... —sirvió su café en una de las tazas, para después buscar el azúcar.

—Oh claro que si~

—Que no...

—¿Oh si? Entonces esto refrescaría la memoria "Ahh! Flug mas! Ngh ahh!" o tal vez~ "Ngh~ jefecito...me vengo..." —decía la chica, para después burlarse del científico. El cual estaba más que rojo.

—¡¡DEMENCIA!! ¡¿PERO QUÉ--?! ¡¿CÓMO?! —exclamaba avergonzado el de bolsa.

—Bueno~ anoche seguía despierta y estaba jugando con 505 a las escondidas, y~ pase por la habitación del jefe, y escuché TODO —explicaba la chica con emoción, remarcando la palabra final.

—Ohh... —Sí... Se moría de vergüenza. Si su jefe se enteraba de que la chica sabía... Estaba muerto—¡N-No hables de lo que escuchaste anoche, ¿ok?! —le advirtió.

La chica solo río

—No prometo nada, doctorsito~ ¡Hahaha! —sin más se fue de ahí, soltando varias risas.

Flug no sabía si confiar en ella... Ya estaba pensando en crear un rayo borra memoria... Y obvio lo agregará a su lista de cosas por hacer.

Volteó hacía donde estaba su taza y la tomó, comenzando a beber de ésta, necesitaba estar bien despierto para ese día.

Se fue a su laboratorio con la taza en mano y pensó en su itinerario de ese día; esperaría a que 505 hiciera la comida, como todos los días, trabajaría, Black Hat le gritaría un poco, Demencia lo molestaría un rato más.

Y en la noche en vez de usar ese poco preciado tiempo que tenía para sí, iría a la habitación de su jefe, claro, sí éste estaba de humor y Demencia no le decía que los había oído, para que no muriera.

Entró a su zona de trabajo y se dispuso a crear uno de los varios prototipos con los que su jefe le saturaba a pedidos, estaban escritos en papelitos pegados a la pizarra de corcho.

Cuando ya estaba creando un modelo en sus planos, la puerta del laboratorio abrió de repente, asustándolo. Y tan rápido como abrió se cerró, el joven de la bolsa escuchaba perfectamente los pasos de las botas de plataforma del mayor.