Capítulo Treinta y Uno: Niebla.
Nos detuvimos a mitad de camino, no podía seguir corriendo y estaba segura GaYoh preguntaría, pero lo segundo no ocurrió. GaYoh solo estaba ahí, mirándome mientras yo intentaba buscar un poco más de aire.
—¿Estás bien? —preguntó a los segundos después.
—Podría estar mejor —respondí comenzando a caminar.
Miré a para todos lados y solo vi pasar a algunos de mis compañeros de escuela. No podía ir simplemente ahí, necesitaba tiempo para poder conversar con GaYoh, por más que necesitara buenas calificaciones, en este momento era lo último en lo que podría pensar.
—Ven acompáñame —dije a GaYoh retomando nuestra corrida.
Entramos en la escuela, pero en ningún momento tocamos las instalaciones, a cambio guié a GaYoh al único lugar más alejado que se me podría ocurrir. El bosque de Requiem. Ahora que lo pensaba, aquel nombre también había estado en mis recuerdos, quizás este mismo lugar conectaba a ese otro fuera del parámetro en algún otro mundo.
Miré al cielo pensando que de allí podrían provenir todas las cosas extrañas que ahora conocía. Ángeles, Demonios, Drawing y quizás cuantos otros seres que ni siquiera imaginaba.
—¿Segura estás bien? Desde que despertaste pareces otra persona, _____ -—comentó GaYoh de pronto.
—Si y desde que desperté todos hacen parecer como si nada ha ocurrido. Algo cambió en mí y no se siente bien ignorarlo —tape mi pecho con una mano, ahí se sentía como si algo nuevo estuviera creciendo. —Necesito confiar en alguien, porque ahora siento que todos ocultan cosas, y en ti, solo en ti he podido ver un poco de verdad hasta ahora —dije un poco confundida con mis propias palabras.
—¿Qué quieres que te diga? —preguntó GaYoh sentándose en el banco en que alguna vez conocí a Kwang Min.
—Lo que sabes, todo, si es posible —me senté a su lado esperando a que alguna respuesta acorde por fin se formara.
—Pues la verdad, yo no sé mucho —confesó GaYoh. —Los líderes y los comandos de cada legión de demonios son los que más saben, yo solo vine para cuidarte como lo prometí.
—¿Qué son los comandos, que son las legiones de demonios? Quizás no sabes nada de lo que ocurre normalmente, pero puedes orientarme. Puede que haya recordado, pero hay muchas cosas que parece que fueran mentira o no tienen pies ni cabeza —confesé atrapando mi cabeza en mis manos.
Tenía tantas ideas, tantas preguntas y ninguna tenía respuesta, eso me podría llevar a estar loca muy pronto.
—De acuerdo, ¿Recuerdas cuando Young Min y yo te hablamos de los Demonios Puros y los Demonios Especializados? —asentí ante su pregunta. —Bueno ambos son legiones de Demonios, dirigidos por un comando, Kwang Min dirige a los Demonios Puros, Young Min a los especializados.
—Ellos son los que pueden orientarme un poco mejor, ¿Eso es lo que quieres decir?
—Pues, sí —asintió también un poco confundida. —Es raro estar hablando sobre esto —se rió, pero pareció más una risa nerviosa que una real.
—¿Qué son los afluentes? —pregunte recordando a mi padre.
—¿Afluentes? —GaYoh pareció meditar un poco más la respuesta, miró hacia el cielo y luego al bosque otra vez. —Según la leyenda, los puntos en que los ángeles dorados se dejaron caer se convirtieron en afluentes, portales que podían mantener la energía de este mundo con el otro en estabilidad —terminó el recuerdo girando su rostro hacia mí. —Pero es solo una leyenda, no estoy segura de que los afluentes existan de verdad.
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Drawing
FanfictionTodo parecía tan normal. Un chico guapo a mi escuela. Yo, la chica rara mirándolo desde lejos hasta que... Mis dibujos comenzaron a cambiar... * Historia de Fantasía, Misterio y suspenso. Protagonizada por los JoTwins miembros de Boyfriend. Escritor...