Amor rápido [Sonic y Tu]

Capítulo 17 ~La disculpa~

Me desperté al día siguiente con mi ropa puesta, los ojos hinchados y marcas de la sábana en mi cara. Decidí que mi aspecto no era presentable, así que me di una ducha. Me puse una remera que Cream me había dado y lancé mi camiseta deportiva a la lavadora.
Miré el reloj ¿7:30am? Abrí la ventana y en efecto, apenas amanecía.
Corrí a la casa de Sonic. Esperé, escuché el claro sonido del microondas. Suspiré y llamé a la puerta. Se abrió enseguida.

- ¡Tn! -Sonic abrió mucho los ojos y echó una mirada sobre su hombro-. No... Te esperaba...
- Descuida. Solo quiero disculparme por lo de anoche.
- ¡Ah! -se ruborizó y me invitó a pasar-. Yo también lo siento. Estuve pensando y creo que no te diste cuenta...
- ...de que Tails observaba. Sí, no me había percatado.

Él frunció el ceño.

- No era Tails.
- Espera... Repite eso.
- Tails nunca arrastraría así su X-Tornado. Además nunca lo golpearía ni lo rallaría con los arbustos. Ese no era Tails, era un robot imitador de Eggman.

Abrí la boca impresionada. En parte porque el modelo era sumamente real; debió escanear al zorro. Y en parte porque Sonic se había dado cuenta de eso.

- No lo hubiera notado...
- Una vez que pasas un tiempo junto a Tails te das cuenta de esas cosas. Además ayer por la tarde fui a verlo y su X-Tornado tenía una fuga de aceite. De ningún modo podría volar en esas condiciones -negó con la cabeza-. Cuando apareció anoche algo me sonaba extraño, pero la manera en que lo empujó luego terminó de convencerme.

Me mordí la cara interior de la mejilla. Había sido una completa idiota.
Sonic vio mi expresión de culpa y su rostro se suavizó.

- No es tu culpa. Debí decirte pero... Estoy casi seguro de que el robot grababa todo lo que hacíamos.
- No debí hablarte así.
- Es cierto que me dolió pero... Cuando pensé mejor las cosas noté que tenías razón al hablarme así.

Cerró la puerta detrás mío y me arrinconó en la pared con el rubor coloreando su rostro.

- Tenías razón Tn...

Me tomó la cintura para que yo no siguiera retrocediendo. Su mano derecha descendió hasta la parte baja de mis caderas y...

- ¡Sonic! Necesito ayuda con... -la puerta se abrió-. ¿Pero qué hacen?

Sonic trastabilló y puso dos metros entre nosotros.

- ¡Knuckles! Hay algo llamado "golpear la puerta" y sirve para avisar que has llegado -el erizo se frotó la nuca confundido y miró al echidna para que le explicase.
- Lo siento. Hola Tn, madrugaste.
- Yo... Qué... Sí, claro, vine a... Sonic y yo tuvimos un...
- Como sea, necesito unos turbusores de potencia para Tails.
- ¿Turbusores de potencia? ¿Los potenciadores de turbo?
- ¡Exactamente eso! Dice que te los dio a ti ayer y los necesita.
- Un segundo Knuckles.

Cuando Sonic decía "Un segundo" era literal. Llegó con la caja en las manos.

- Estos son los que me dio ayer.
- Muy bien -Knuckles tomó la caja-. Por cierto Tn, ¿no que el sábado es tu cumpleaños?
- ¿¡QUÉ?! -gritó Sonic tan fuerte que los humanos debieron escucharlo.

Apreté los labios, Knuckles se fue sin notar el escándalo que había producido.

- Pues sí... Pero no era para que todo el mundo...
- ¿¡QUÉ?! -ahora el erizo me miró a mí.
- Uhm... Es que... Yo no quería que te preocuparas.
- ¡Pero Tn! ¡Tu cumpleaños!
- Pero no necesito que me den nada.
- ¡Pero yo...! Tú... Tengo que...
- Precisamente por eso no te lo dije. No quiero que me regales nada. Solo tu presencia y dedicación es suficiente y más valiosa para mí que todos los regalos que puedas darme.

Suspiró y negando con la cabeza se dio vuelta.

- Da igual... Veré que hacer. ¿Desayunaste?
- No...

Eso fue suficiente para tener frente a mí un plato de huevos revueltos que devoré con gusto.

- Y... ¿Te gustó el paseo de anoche? -levantó una ceja y puso su barbilla sobre sus manos.
- ¿A qué va la pregunta?
- Parecías conforme con la salida.
- Claro. Fue hermoso.
- ¿Ah sí? ¿Te gustó algo en especial?
- ¿Me estás interrogando?

Rió y trajo una lampara de escritorio, alumbrándome la cara.

- Señorita, yo hago las preguntas aquí -dijo con una chistosa voz gruesa.
- ¡Oh oh! ¡Lo admito! -dije dramática poniendo una mano en mi rostro-. ¡Yo me he comido todo el desayuno!

Reímos a carcajadas, paramos, y al ver nuestras caras volvimos a reír.

- JAJAJA ¡VAMOS TN! ¡DI LA VERDAD! ¡También te comiste los chocolates de Tails! JAJAJA
- Jajaja ¡Nunca! ¡Los únicos que he comido son los míos! -me lancé al suelo simulando lloriquear.
- ¡Deja de fingir! ¡Se que fuiste tú! -Sonic se puso en cuatro patas y dejó su cara justo arriba de la mía.

Mi flequillo hizo cosquillas a su nariz y produjo una mueca de su parte.
Estornudó y me reí por lo tierno que se veía.
Alguna parte de mi cerebro dijo que no me fuera de ahí, yo quería quedarme con él.
Me sentía en casa con él.

- ¿Tengo algo en la cara? -preguntó alejándose-. ¿Por qué me ves así?
- No trates de ganarte a la sospechosa, detective.

Se volvió a acercar.

- Creo que es el mejor método para sonsacar información. Mi encanto es mi mejor arma -sonrió con sorna.
- Yo opino igual -levanté una mano y le acaricié detrás de una oreja suavemente. Se ruborizó como quería-. Podrías desarmar a cualquier chica ¿no?
- ¿Eso crees?
- Mmm... Creo que hay alguien a quien no puedes conquistar solamente con tu encanto...
- ¿Ah sí?
- Segurísima, principalmente porque se más de ella que cualquiera.
- ¿Y se puede saber quién es? -se acomodó a mi lado apoyándose en sus codos y casi pegó nuestras narices.
- Claro. A mí...
- ¿No puedo?
- No puedes. No lo lograste con tus encantos. Y a mi barriga, para ella necesitas comida.

Terminamos ambos boca arriba mirando el cielo raso riendo entrecortadamente.

- Eeeehhhhh....

Tails estaba mirando la escena desde la puerta de la cocina.

- Chicos... ¿Seeee encuentran... Bien?

Nos incorporamos torpemente y me alisé las púas.

- ¡Tails! ¿Eres tú? -preguntó Sonic sin acercarse mucho.
- ¿Quién más?
- Dime... ¿Ayer por la noche volaste tu X-Tornado?
- ¡No! Tú mismo viste que tenía una fuga de aceite, estuve arreglándola y venía a avisarte que el avión está listo.
- Sí eres Tails -el erizo corrió y abrazó a su amigo.
- ¿Me perdí de algo?

En pocas palabras, y omitiendo el hecho del beso, le explicamos lo sucedido la noche pasada.

- Ese canalla... Como sea. ¿A qué se debeeee... Esteee... Que rieran como maníacos en el suelo?
- Uhm nada nada -contestó Sonic-. Es que jugábamos a los detectives.

Noté que el erizo me giñó el ojo y asentí para no dar más explicaciones.

- Jugaban a los detectives. Claro -miró a Sonic con las cejas levantadas y al no obtener respuesta negó con la cabeza-. No importa.

Hablamos un poco más y Tails se fue, diciendo que buscaríamos la esmeralda por la tarde.
Cuando se fue me acerqué a Sonic.

- Gracias por el desayuno detective...
- No es nada ladrona -sonrió de una forma extraña y me tomó las muñecas-. Quien sabe la próxima vez pueda... Encadenarte.
- ¿Qué?
- Ya sabes...
- ¿Te refieres a apresarme? -entrecerré los ojos.
- Pueeees... Sí... Creo...
- Oh nada -bajé la vista-. Creí que hablabas de otra cosa...

Me mordí el labio y lo saludé con un beso discreto en la mejilla. Él inhaló profundamente cuando mis labios rozaron su cara.

- Voy a prepararme para la salida -dije mientras me alejaba-. Nos vemos esta tarde.
- Podría acostumbrarme -dijo y me giñó un ojo-. Y siempre que quieras compañía, mi puerta estará abierta... No literalmente claro, por favor no hagas como Knuckles. Y si no estoy solo ve al taller de Tails.
- Gracias.

Salí rápidamente y me empecé a reír por lo bajo. Lo había incomodado.

Pov Sonic

¡Claro que me había incomodado!

- Soy un estúpido... -me pasé las manos por la cara-. No se hacer indirectas... Hoy por la tarde tendré una oportunidad.
>>No, esta Amy. No podré quedarme a solas con Amy mirando. No no no. Tendrá que ser después -hablaba solo dando vueltas por la habitación-. Pero luego sería muy tarde... Mañana. Tengo un tiempo libre.
>>Mañana será, solo necesito encontrar una forma no tan directa para no asustarla y... A ella le gustan los lugares bonitos.

Una idea revoloteó en mi cabeza. La montaña White Finger era un lugar bonito y no era difícil acceder.
Claro que allí estaba cerca una base de Eggman en White Acrópolis pero era poco probable que el Cabeza de Huevo fuera a la montaña.
Decidí que allí sería un buen sitio para decirle lo que siento y ¿por qué no? Intentar ganármela.

• Flashback •

- Podrías desarmar a cualquier chica ¿no? -sus suaves dedos me hicieron cosquillas y me provocaron un ligero deseo.
- ¿Eso crees?
- Mmm... Creo que hay alguien a quien no puedes conquistar solamente con tu encanto... -se me hacía difícil escuchar todo lo que decía, mi cerebro ciertamente no estaba pensando en la conversación mientras su mano acariciaba mi oreja.
- ¿Ah sí?
- Segurísima, principalmente porque se más de ella que cualquiera.
- ¿Y se puede saber quién es? -me acomodé más cerca, para no ver nada más que su hermosa cara.
- Claro. A mí...
- ¿No puedo? -el tono fue de incredulidad, pero además de frustración.
- No puedes. No lo lograste con tus encantos...

• Fin del Flashback •

Dijo "No lo lograste con tus encantos..." No dijo "No lo lograste", así que me quedaba una oportunidad.
Además si no la había conquistado aún, podría hacerlo luego. Todos tienen alguna debilidad... Y creo que ella encontró la mía.