Episodio 6: Sad But True.

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Desperté al sentir que Dave se levantó de la cama. El teléfono estaba sonando. Miré mi reloj; eran las siete de la mañana.

Si, si, claro, nosotros estaremos ahí a esa hora...— se escuchaba la voz del pelirrojo con entusiasmo.— Gracias.

Colgó el teléfono y se dirigió corriendo hacia la habitación.

— ¡Cariño, despierta! — me gritó y se aventó a la cama, poniéndose sobre mí, sentado en mi abdomen.

— ¿Qué pasa? — dije no muy animado sin abrir lo ojos.

— ¡Nos aceptaron, Kirk, estamos dentro! — me tomó de lo hombros y me agitó.

Abrí los ojos de inmediato.

— ¿Qué quieres decir con eso? — le pregunté con los ojos bien abiertos.

— James dijo que nos quería a ambos — dijo con una amplia sonrisa.

— Pero, ¿cómo es posible?

— Dijo que nos explicaría luego, debemos ir a su casa a las dos — terminó de hablar y se inclinó sobre mi para besarme.

Se quedo en mi pecho por mucho tiempo a pesar de que la posición era muy incomoda ya que él era más grande que yo.

Dave era un hombre muy cariñoso cuando su pasado no le atormentaba. Dave podría ser capaz de todo por una sola persona.

[...]

Salíamos del departamento con nuestras guitarras en la espalda. Frente a las escaleras del edificio, había un par de chicas que al mirarme, comenzaron a reír mientras susurraban algo. Pude identificarlas enseguida por su cabello rubio y el sonido distintivo de sus risas. No pude evitar sonrojarme mientras me colocaba los anteojos para disimular un poco mi vergüenza.

Caminamos tranquilamente hacia la casa de Metallica. No quedaba muy lejos de nuestro apartamento. Honestamente no me agradaba ir. Mi persona se tensaba y todo eso pasaba por Dave; sabía al llegar a esa casa, yo no debía mirar a ninguno de los presentes. Básicamente era mantenerme con la cabeza baja todo el tiempo. Él no me lo había indicado pero yo sabía que debía hacerlo para evitar incidentes como el del día anterior.

Al llegar a la casa, James nos recibió de manera muy gentil. Sabía que ellos eran buenas personas pero no trataba de conversar mucho con ellos porque, además de lo ocurrido con Dave, era realmente difícil para mí establecer una conversación.

Nos habían aceptado a ambos porque teníamos un potencial increíble, según las palabras de Cliff y James. No les molestaba tener dos guitarristas ya que éramos muy buenos y nos podíamos repartir todo el trabajo increíblemente.

Aparte de James y Cliff, había más personas disfrutando de lo que James denominó como "el hallazgo de los Dioses". Era una reunión repleta de cervezas y comida.

Yo sólo comí algunos bocadillos y bebí jugo, igual que Dave. El entorno era agradable a pesar de que todos estaban algo ebrios.

Entonces apareció el chico con cara de mujer que el día anterior me había mirado y sonreído. Lo mire discretamente, nada llamativo porque sabía que Dave era un maldito espía. Nos saludo presentándose.

Su nombre era Lars.

Se sentó junto a mi lado en el sofá. Ni siquiera lo miré pero estaba muy tranquilo hablando con todos los chicos del circulo en el que estábamos.
Estaba en medio de Dave y él.

— Debo ir al baño — me dijo el pelirrojo sonriendo.

Se levantó y lo miré subir por las escaleras, perdiéndose.

La tensión cayó sobre mis hombros una vez que me quedé solo pues sabía que alguien me hablaría y no sabría que hacer. Me quedé tranquilo, sin moverme, tenía mi guitarra entre las piernas. Miré mis uñas y después mis zapatillas desgastadas, estaba muy nervioso no quería que nadie me hablara, pero...

— Hey — escuché la voz de Lars.

Me quede aún más inmóvil, sin saber que hacer. Debía contestar.

— Hola — dije mirándolo rápidamente. Parecía un maldito paranoico.

— Yo soy el baterista — dijo riendo.

— Creo que yo soy el nuevo guitarrista — dije un poco más animado.

— Lo se, te escuché, eres  increíble — sonrió.

— Gracias — sentí calor de sobremanera.

Mire rápidamente hacia las escaleras y divisé a Dave bajando.

Entré en pánico.

—  ¿Estas bien? — me pregunto el castaño preocupado.

— Si — dije tratando de calmarme.

Una chica detuvo a Dave. No sentí celos puesto que ni siquiera le puso atención por mirarme a mí. Pero agradecía que lo hubiese interceptado.

— Uh, parece que tu amigo se va a divertir hoy — dijo James mirándome respecto a lo que estaba pasando con Dave.

Traté de asentir divertido, pero no lo conseguí ni un poco.

Lars seguía mirándome preocupado.

¿En verdad era tan evidente mi ataque de ansiedad?

— Oye, tranquilo — puso su mano en mi pierna.— Respira.

El contacto físico que estableció entre nosotros me alteró más.

"Basta, Kirk, no pasará nada. Dave esta hablando con esa chica, posiblemente no se altere"  pensé tratando de tranquilizarme.

— Podemos ir afuera si te sientes mal, yo se que toda esta gente es molesta...

— No — dije casi de inmediato.

— Bien, sólo calmate — acarició mi muñeca suavemente con la mano.— ¿Quisieras mostrarme como tocar un solo?

Asentí. Debía poner fin al contacto físico lo antes posible.

— Bien — trató de sonreirme.

Me escape de su agarre, saqué mi guitarra de la funda y la apreté.

Él se levantó del sofá y se estiró a tomar la guitarra de James.

— Bien, no se tocar muy bien pero, puedo tocar algunos acordes — dijo riendo.

Reí tratando de relajarme.

Pero, por inercia, volví la mirada hacia Dave. La chica ya no estaba; él sólo estaba de pie, recargado en la pared con los brazos cruzados, mirándome horriblemente.

Joder. Moriré.

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No odien a Dave /u\

in the hell; klarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora