Episodio 9: My Friend Of Misery.

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Habíamos estado ensayando desde hace unas dos semanas para presentarnos en un pub de la ciudad. Todo había marchado de maravilla en cuanto a nuestros problemas. Estábamos unidos en esto y nos enfocábamos en nuestro trabajo. Habíamos preparado un gran espectáculo que sabíamos le gustaría a la gente, con grandes y extensos sólos de guitarra. James había compuesto algunas canciones y sonaban muy bien. Realmente estábamos poniendo todo nuestro esfuerzo.

Pero el día de nuestro gran espectáculo se vio afectado. Yo no pude ir. Tuve que quedarme en casa debido a que días antes, al volver a casa después de un ensayo, la lluvia cayó intensamente. Según el doctor, la gripe se debía a eso. La temperatura me hacía delirar y ponerle apodos extraños a Dave. Dormía todo el día y mi aspecto se veía peor que el de un muerto.

Dave tenía que ir, insistía mucho en quedarse pero después de rogarle por horas mientras estaba en mi lucidez, aceptó ir.

Pasé el resto de la tarde tratando de valerme por mí mismo. Dave llamó un par de veces antes de que su presentación iniciará. Me dijo que me amaba y colgó. Miré algunas películas de terror pero me quede dormido la mitad de ellas. Despertaba con el grito de alguna chica rubia al ser acechada por algún hombre lobo. Todo parecía ir muy tranquilo, estaba realmente decepcionado de mí, pero sabía que todo estaría bien con Dave ahí.

Pasadas la media noche, decidí ir a dormir, pues su presentación sería tarde y posiblemente llegarían más en la madrugada.

Me acosté sobre la cama tapado con cientos de sábanas y cobijas. Afuera estaba lloviendo torrencialmente. El ruido de las gotas cayendo me ayudaban a caer en un sueño profundo.

[...]

Abrí los ojos difícilmente al escuchar un fuerte estallido que provenía del pasillo. Me quede inmóvil, un poco asustado. No quería salir a ver que era pero me levanté cuidadosamente y me asome por el umbral de la puerta, hacia el pasillo.

Me paralice al mirar a Dave tratando de ponerse de píe.

Corrí hacia él. El olor a alcohol me golpeó de repente y tuve fuertes ganas de llorar. Lo tomé del brazo e hice lo que pude para ayudarle a levantarse. Estaba todo desaliñado. Rápidamente pensé que había estado con una chica, eso me partió el corazón.

— Kirk... — decía arrastrando las letras con dificultad.

No dije nada, lo puse de píe y traté de llevarlo al baño; debía darle una ducha para que toda la borrachera se le bajará. Su olor me revolvía el estómago, quería llorar.

Cuando abrí la puerta del paño, se me fue de las manos; resbaló y caímos juntos ya que él era mucho más pesado que yo.

Me levanté como pude y abrí la pequeña puerta de la regadera, abrí la llave del agua fría y regrese por Dave. Me puse detrás de él, le tomé de las axilas y lo arrastré.

Cuando estuvimos a unos pasos del agua helada, comenzó a vomitar.

— No, cariño — dije llorando e inclinándolo hacia adelante, ya que el inodoro estaba delante de él.

Le aparté los mechones pelirrojos que están pegados a su rostro e hice que vomitara en el inodoro. Sentía la fuerza que hacían sus costillas al tensar el abdomen y me lloré más.

Cuando terminó, seguí con mi camino tomándole de las axilas y arrastrándolo, levantándolo un poco para que no se lastimara con el pequeño borde que había al salir de la regadera.

Lo levanté tomándolo del abdomen e hice que el agua fría le cayera en el rostro.

Hasta este punto ya no podía mantenerse en pie. Me quede abrazándolo por la espalda como un soporte.

— Lo siento, Kirk — dijo susurrando, arrastrando la lengua.— En verdad lo siento...— estaba sollozando.

El agua estaba muy fría pero al menos ya estaba reaccionando. Yo también estaba muy mojado.

Minutos después, lo senté en el suelo y comencé a quitarle la ropa dejándolo sólo en calzoncillos. El agua parecía funcionar, aunque él sólo me miraba sin decir nada.

Mi labio inferior temblaba por el frío que tenía y mis lágrimas se confundían con el agua de la regadera.

— Mira lo que hice — dijo con más dicción. No respondí, cerré la llave del agua y salí por una toalla para ambos.

Volví y se la entregué sin mirarlo directamente.

— Amor — habló nuevamente.— Mirame.

Me enrede en la toalla que llevaba para mí y salí del baño dejándolo ahí. A estas alturas ya podía levantarse solo. Me fui a mi habitación y cerré la puerta, poniendo el seguro. Sabía que entraría a tratar de convencerme de perdonarle.

Me seque el cuerpo y me quité los bóxer mojados. Me tiré a llorar en mi cama sin consuelo alguno.

Escuché pasos y después golpes en mi puerta.

— Kirk, abre — trató de girar la manija. Dio golpes más fuertes a la puerta.— ¡Jorder, abre! — escuché un golpe más, como un patada.— ¡Con una mierda, Lee, abre la puta puerta!

Me quedé inmóvil, estaba temblando, pero ya no era por el frío; estaba iniciando un ataque de ansiedad.

Quería morir.

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BUENAS NOCHES UWU
GRACIAS POR LEER <3 ESPERO QUE ESTE BIEN :33

in the hell; klarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora