Capítulo 08.

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Harry estaba algo desesperado

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Harry estaba algo desesperado.

Sus pantalones apretados no ayudaron mucho cuando quizo salir desprevenidamente de aquel sanitario, pues atraía la mirada de algunas personas, mayoritariamente de mujeres.

Ahora estaba irritado, Louis lo había olvidado ahí dentro y él no entendía porqué. Había esperado alrededor de siete minutos y se le acabó la paciencia, aunque quizo usar sus manos para solucionar el problema, alguien tocó la puerta y él abrió con la excusa de que se había quedado atorada.
Cuando observó a su esposo sentado y comiendo de todo lo que había pedido, hablando con alguien amenamente, apretó los labios.

Harry no era del tipo celoso, bueno. Si lo era, un poco. O mucho cuando alguien se acercaba y miraba a Louis por mucho tiempo. El tipo frente a él, tenía varios tatuajes y los ojos color miel, miró a Harry con una sonrisa y éste levantó las cejas esperando una respuesta de parte de su pareja.

Louis sonrió también con la boca llena, en modo de disculpa y el de ojos verdes tomó asiento a su lado aún sin pronunciar nada.

— ¿Se te perdió algo? — le preguntó bruscamente al moreno ocupando la silla del frente.

Zayn se rió. A Harry no le pareció tan gracioso, así que puso los ojos en blanco.

— Soy Zayn Malik, es un gusto conocerte por fin.

— Amor, él era mi mejor amigo en preparatoria, no seas grosero.

— ¿Qué clase de amigo?

Louis pateó la pierna de Harry por debajo de la mesa y éste se quejó.

— Ya sabes, los que se la pasan juntos y se besan de vez en cuando, nada del otro mundo.

Harry casi se paraba de la mesa para golpear a Zayn, pero Louis comenzó a reír y le tomó la mano, cuando hizo que sus dedos se entrelazaran, se sintió un poco más tranquilo.

— Relájate, es un pésimo comediante — le aclaró.

— Es broma, tío, en serio... Louis siempre ha sido como un hermano.

— Más te vale.

Pronunció entre dientes y Zayn sonrió dando un sorbo a su malteada de vainilla.

— Ya me han dado la noticia — mencionó. — Te felicito, por tus bebés.

Louis acomodó su cabeza en el hombro de Harry y éste le besó el cabello. Se relajó aún más y finalmente le dio una sonrisa ladina a Zayn.

— Gracias, no puedo estar mas emocionado.

Zayn suspiró y de su chaqueta sacó un bolígrafo de tinta azul. Anotó rápidamente y con mala caligrafía una secuencia de números en una servilleta de papel. Se la tendió a Louis.

— Llámenme cuando ocupen una noche divertida. Un trío o algo así.

Harry y Louis rieron ante su horroroso chiste.

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