Donde Harry tiene un hijo llamado Luka, y un esposo llamado Louis. A su hijo no le agrada la pareja de su papá, mucho menos cuando se entera de que está embarazado.
La Universidad de Oxford quedaba a unas dos horas distante de Londres; por lo tanto Luka había optado por vivir dentro de la casa de estudios, pero solamente por lo primeros meses de su carrera. Luego alquiló un piso que le quedaba cerca de la Institución, pues sentía que Harry y Louis ya gastaban bastante aún con la beca que había obtenido.
Se había decidido por estudiar Ciencias de la Tierra y de la Atmósfera y a sus veinte años ya cursaba el tercero de cuatro que completaban la carera. Vivió un tiempo con Ivan, pero luego su primo decidió que la Universidad no era un tema que le agradaba demasiado, así que finalmente decidió abandonarla y regresar a Braithwell para comenzar a trabajar en un negocio propio que finalmente heredaría de un hermano de su padre; quien solamente aparecía unas cuantas veces en su vida, por supuesto. Por otra parte, Nico estaba en el quinto año de Medicina, carrera que había decidido estudiar a raíz de lo que sucedió con Finn; su pequeño hermano.
Luka aún mantenía una relación con él; increíblemente ya que no tenía ni idea de cómo es que habían logrado sobrevivir a la distancia y a las discusiones que tenían que enfrentar gracias a que estudiaban en Universidades diferentes; pero todo siempre terminaba bien.
De Elliot y Felicia había obtenido algunas noticias, gracias a que Ivan se encargaba de llamarle y contarle de lo que se enteraba. Elliot se fue a Israel; era voluntario dentro del ejército de Inglaterra. Felicia estaba estudiando Filosofía y Letras en Bristol.
La vida estaba siendo buena para Luka, gracias a que había aprendido a que Harry no estaría siempre para auxiliarlo o para sacarlo de cualquier apuro. Se las había arreglado para vivir solo y para aprender a manejar el dinero que le daban mensualmente. Había tenido la idea de trabajar y estudiar, pero la carrera lo consumía ya bastante y además no había obtenido el permiso de sus padres. Estaba creciendo tanto y cada vez añadía más experiencias a su vida; ya incluso había aprendido a cocinar. Tenía un enfoque más centrado de sus pensamientos y de los anhelos que deseaba cumplir.
De pronto se encontraba pensando en las cosas que Harry había logrado a pesar de haber tenido un hijo a tan temprana edad y Luka lo admiraba bastante por eso; ahora quería llegar a hacer lo mismo que él, o incluso más. Y por más ordinario y cliché que sonara; quería casarse, tener hijos y una casa bonita. Su ejemplo principal eran sus padres y se sentía orgulloso al respecto.
Archie era completamente otro tema. Luka todas las noches se tomaba una pausa de sus deberes para llamar a su hermanito y el pequeño siempre le contaba lo que había hecho en la escuela ese día, le mencionaba cuando iba a pasear y hasta de una mascota que Louis se había encargado de adoptar, un viejo pastor inglés llamado Dexter. Archie había cumplido ya sus primeros cuatro años de edad y era un niño muy respetuoso, amable e inteligente. Luka lo sabía porque aunque lo veía solamente una vez al mes, Archie se comportaba bien con todos y era un poquitín reservado; tenía pocos amiguitos y se interesaba bastante por la historia y la astronomía a tan corta edad.
