W I T C H. /KaiSoo|SooKai

8

"Usualmente no logran tener sentimientos"

-¿Es cierto que duermes en el ático? –pero el chico no contesto sólo se limito a asentir. – ¿Me estas ignorando? –Jongin preguntó siguiendo a Kyungsoo.

Pasó unos días ignorando de forma olímpica a Mrs. Popular después del incidente de la cafetería. Kim buscaba a Do para darle una disculpa por su comportamiento pero, sorprendentemente, el pelinegro lo ignoraba o tomaba sus cosas y se iba dejando al pobre de Jongin con la palabra en la boca, después de unos momentos de pensarlo decidió que si quería que Kyungsoo lo perdonara por ser un bocatas entonces tendrá que seguirlo a todos lados hasta que lo perdone.

Debía dejar de juntarse con Suho.

-Si. –contesto secamente.

Están fuera del colegio a la hora de la salida, Jongin sigue a Kyungsoo para que aceptara sus disculpas pero este parece inmune a todo incluso si el alto le haya hecho un puchero o sonriendo de esa forma que hace que todas se derritiesen. Pero nada, totalmente inmune.

-¿Me odias? –volvió a preguntar.

-¿Por qué me sigues? –preguntó de vuelta.

-Porque no me perdonas. –respondió, iba a dos pasos detrás de él. –Por cierto, ¿tú hermano usualmente no te viene a ver?

-Comenzó sus clases en la universidad. –respondió y luego giró a verlo con el ceño fruncido. –Un momento, ¿Cómo sabes que mi hermano me lleva y me trae?

-Eunbee. –contesto con simpleza. Kim Eunbee también era inmune a todo lo que él hacia pero lo trataba como un amigo de la infancia, tan amable y educada que le hacía pensar que los rumores de las yakuzas era eso, un simple rumor pero joder el verla entrar a una camioneta negra sin placa lo hacía pensar que en realidad el rumor si era cierto. Kyungsoo rodó los ojos con molestia. –No te enojes con la pobre, yo la presione para que me diga. –Mentira.

-No creo que la hayas presionado. –hablo y dejo de mirarlo para seguir caminando hacía su casa. –Ella es muy boca suelta y si se lo pides de buena manera, te responderá.

-Bueno, tal vez me lo haya dicho sin tener que presionarle pero no te enojes con ella. Por favor –pidió. Ella era la única chica que lo veía como un chico normal y no como un dios griego. El pelinegro lo observo con una ceja alzada. -¿Qué sucede?

-Hablas como si te gustase. –recién se percataba que ambos ahora estaban en la misma distancia.

-Ella no me gusta, es mi mejor amiga y todo. –dijo.

-Entonces supongo que nadie te gusta. –murmuró. Era la primera vez que hablaban por tanto tiempo y sin ningún insulto de por medio.

-Mmmm... por ahora te puedo decir que estoy como interesado en alguien. –rasco detrás de su nuca. Estaba nervioso. –No sé como explicarlo.

-Un momento. –Kyungsoo se detuvo y Jongin lo imito. –Te pusiste nervioso. –los ojos del alto se abrieron en grande por la sorpresa. –Pensé que nunca te ponías nervioso. Que eras algo así como una persona perfecta que no tenía imperfecciones.

-Me pongo nervioso cuando estoy con la persona que... -se cayó de repente.

-¿Qué te cae mal? –cuestiono esperando la respuesta pero nunca llegó. –Si, lo supuse.

Kyungsoo volvió a caminar y Jongin lo siguió, faltaba dos casas para llegar a la suya y no quería que ningún acosador supiera donde quedaba su casa. En todo ese corto camino Jongin comenzó a hablar sobre como conoció a Suho y de que el chico es su mejor amigo aunque eso le intereso, porque ahora podía hacer un plan para Suho, nunca lo iba a confesar. Mientras que Jongin parloteaba, Kyungsoo observaba las flores en su camino, estaban a punto de morirse entonces deicidio pasar sus manos sutilmente por la superficie de estos y tan pronto como finalizó ese movimiento: las flores volvieron a recuperarse como si nunca la falta de agua y cuidado se hubiesen aparecido. Sonrió. Al alzar la vista pudo darse cuenta como Jongin lo miraba y hace rato habían llegado al portal de la casa de los Do.