Descubrimientos

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Kuroko se encontraba en una ostentosa limosina camino al evento del año cuyo anfitrión resultaba ser el mismísimo padre de Nash, un famoso multimillonario casado con una modelo francesa; parecían un tipo incluyente en la política y resultaba exitoso en los negocios, se dice que su fortuna fue proporcionada por el contrabando de piedras preciosas pero nadie estaba seguro de ese hecho.

Según había escuchado Kuroko, ese poderoso personaje se mantenía enojado con Nash por tener a un desconocido extranjero en su casa quizás pensaba era un interesado que engañaba con artimañas a su hijo o le quitaba el dinero de alguna manera; ciertamente podía deliberar algo así, resultaba lógico si el rubio siempre le daba todo lo que no le pedía desde riquezas hasta joyas u otras cosas materiales las cuales solía rechazar sin embargo cada vez que le decía que "No" se volvía peor, simplemente aceptaba por mera cortesía.

Tetsuya se quedó mirando la ventana, se mostraba pensativo asimismo el mago se mantuvo en silencio hasta llegar a una gran mansión llena de personas, música, medios de comunicación además de automóviles. El chofer abrió la puerta haciendo parte de su trabajo, cuando salió la sombra quedo aturdido por el flash de las cámaras, los micrófonos, el ruido de los periodistas que hablaban todos al mismo tiempo. Kuroko no sabía cómo reaccionar ante ese revuelco, empezaba a entrar pánico, quedándose totalmente paralizado; nunca nadie le ponía mucha atención tan masivamente por eso reaccionaba mal. Por suerte Nash se situó justo al lado derecho de su persona, poniendo una mano en la espalda para darle seguridad - Eres un fantasma, bien podrías desaparecer pero lo mejor es enfrentar directamente a las víboras ¡Debes tener cuidado todo lo que dices puede ser usado en tu contra!

Hubo un tiempo en el cual los periodistas se olvidaban que era parte de la kiseki no sedai y ni siquiera lo entrevistaban aunque en Seirin lo tomaban más en cuenta. No resultaba fácil ser una sombra ¡Su vida debía ser tras bambalinas, detrás del telón de la vida!

Después de murmurar esas palabras en el oído de la sombra como una luz se llevó completa la atención del medio, era increíble la manera en la cual manejaba dicha situación e inclusive cada palabra era certera, precisa y esa simpatía que no vio antes se hacía presente arrasando en un encantamiento mortal, el tipo se convertía en un manipulador de primera casi un seductor nato.

Al terminar esa charla con la prensa estrictamente caminaron directo a la residencia "Gold" así como su nombre, eran las riquezas semejantes al oro en su familia y en las paredes, cada invitado vestía impecable con decir los aposentos eran iguales a los de la misma realeza.

Tetsuya se sentía incómodo, únicamente deseaba salir de allí lo más pronto posible; primero porque no conocía a nadie y segundo porque todos se quedaban mirándole fijamente de pies a cabeza del mismo modo cuchichiaban entre ellos más aun al entrar al recinto. Decidió ignorar a esa gente molesta, contemplo que la mansión estaba llena de cuadros impresionistas, lámparas de diamantes y lujo excesivo hasta unas escaleras de caracol semejantes a las de las películas. Nash lo presento con varias personas, se sentaron al banquete después de aquella introducción era fácil mezclarse, usaba su falta de presencia evadiendo a los extraños burgueses ¡No encajaba con esos sujetos consumistas! A dicha muchedumbre lo único que les importa en la vida era su dinero, trabajo o tal vez la avaricia de tener más sin importar destruir o pisotear a los demás.

¿Acaso no se daban cuenta que la vida es tan corta?

Pasa tan rápido la existencia como las hojas en el otoño, los humanos son efímeros sin embargo se ven atrapados por el mundo terrenal, por cosas materiales en vez de sentimientos concretos y eternos.

Al terminar su vida gris, verían el pasado y sentirían desperdiciaron el tiempo en cosas mundanas ¡Ya no habría marcha atrás, no se puede cambiar el pasado!

La sombra del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora