Ella Es Victoria

Capítulo 16.

—Él no habla, no dice nada, ni siquiera sale de su cuarto. Esta así desde que hable con él.

—¿Qué diablos fue lo que le dijiste, Alice?

—Solo le dije la verdad ... Tenía que hacerlo. No podía verlo tan triste ... Sabía que no lo tomaría bien pero ...

—Pero ¿Qué? ... Mira a tu hermano, ¡Por favor, Alice! Habíamos tenido una noche excelente, Gale, él y yo. Por primera vez en meses habíamos tenido al menos por una noche a Daniel.  ¿Ahora qué? No tengo ni idea de cómo acercarme a él. ¿Porque lo hiciste? ¿Porque le dijiste eso?

—¡Maldición! Tenía que hacerlo ... ¿Crees qué es fácil para mí esto? Se que es tu amigo y sé que te importa tanto como a mi, pero también es mi hermano. Me mata ver cómo sus ilusiones de encontrar a Victoria crecen cada día. No puedo dejar que siga creyendo eso cuando yo sé que ella se fue.

—¡Tu no sabes eso! ¿Acaso no la conocías? Amaba a Daniel tanto como él a ella. Ella nunca lo hubiera dañado así.

—¡Claro que lo sé, Jack! ¡Yo la ví! La ví empacando sus cosas la mañana de la boda, ¿Para que? Pues para largarse y abandonarnos a todos aquí, y si eso no te parece suficiente, yo no soy la única que lo dice, todas las investigaciones realizadas apuntan a lo mismo, ella se fue. Victoria se fue sin importarle nada lo que ocurriera después de eso.

—¡Lo sé, Alice! ¡Lo sé! Pero aún después de eso yo confío en Victoria, se que ella no hubiera abandonado todo así sin más. Y más que eso confío en Daniel, él la conocía mejor que nadie y si el está seguro de que Victoria no se marchó por voluntad propia, yo creo en él.

—Solo entra y trata de ayudar a mi hermano, por favor ... Mamá y papá tampoco han podido hacer nada. Simplemente él no reacciona.

—Alice, sabes que una parte de ti cree lo que digo. Victoria era tu amiga, sabes que ella no haría esto.

—Solo entra, Jack ... Por favor ...

...

—Dan ... amigo ... ¿Qué es lo que pasa? Estoy aquí para ti. Tus padres dicen que no has querido que ningún médico entre a verte, de hecho que no quieres ver a nadie pero yo no soy un médico, soy tu amigo ¿Cómo estás? ... ¿No dirás nada? Mira ... Esta bien, yo sé que todo esto es difícil, se que debe dolerte hasta el alma así que si no quieres hablar lo entiendo, pero ten presente que estoy contigo, yo confío en ti. Confío en ella ... Me importas, Dan ... No te voy a dejar solo en esto.

—Gra ... Gracias. De verdad ... De verdad que esto ... Esto significa mucho para mí.