Capítulo 28 "El Sepelio"

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La lección que mi abuela me brindo a través de estos niños fue realmente hermosa, yo terminé abrazándolos y compartimos otras historias más acerca de mi querida viejecita.

—Nana Julia nos dijo que a ella le gustaría algún día ser águila, por eso nos reímos, mi hermano dijo que siempre que vea una águila, la honrará porque tal vez sea el espíritu de tu abuela.— Yo lo haré también, conteste después de que Rafael me tradujera.

 Después de un buen rato, salimos a saludar a la gente que estaba instalada cerca del sembrado de gladiolas.

Rafael se fue para ayudarle a sus padres a  servir algunas bebidas, yo vi a don Sebastián cabizbajo a un lado de la fogata y me acerque a él.

—¿Se siente bien don Sebastián?, yo sé que es tonta la pregunta verdad, pero como todos aquí los veo tomar la situación tan natural... — Él si se veía triste, imagino que como amigo cercano le dolía perder a mi abuela.

—Hola Yaretzí,— Me contesto con voz un poco apagada, pero aún así, tenia un extraño brillo en su mirada. —Se me adelanto mi buena amiga Julia, yo siempre creí que moriría yo primero, pero sigo aquí... viviendo mis horas extras.— Y tras decir lo último, esbozo una ligera sonrisa como bromeando.

—Yo los escucho decir y repetir que ella terminó su misión  aquí en la tierra, que todos tenemos un propósito, por esa razón estamos aquí viviendo y aprendiendo, ¿Pero como reconocer nuestra tarea? ¿Cómo saber si estamos haciéndolo bien o mal.— Le pregunte consternada, sabia que sí alguien me podía responder a esas interrogantes, era él.

—Con el tiempo mi querida niña, pues todos venimos aquí con fortalezas y debilidades, tus puntos fuertes son los que te van a ayudar a triunfar sobre tus desafíos, y tus puntos débiles son en los que tienes que trabajar para poder lograrlo, ¿Habrás escuchado a alguien decir, no hay feo sin gracia ni bonito sin defecto?, pues a eso se refiere.— No, pues no entendí nada, por más que puse atención me quede en las mismas.

—¿Me lo puede explicar diferente? Es que a veces no captó muy bien, no importa que utilice figuras o granos de maíz y frijol, el chiste que le entienda, de verdad quiero saber la respuesta a cual es mi misión en esta vida.— Quizás parecí tonta, pero sí algo tenia don Sebastián era paciencia.

—Ok Yaretzí,  ¿Qué pasatiempo es lo que más te apasiona y cual es la profesión que piensas ejercer para vivir? ¿Cuáles son tus planes?— Él me pregunto muy serio y yo conteste sin pensar.

—Mi pasatiempo es el jardín de mi casa, últimamente paso mucho tiempo ahí, con ayuda de mi madre sembré hortalizas empezando la primavera, las riego, también les pongo abono, arrancó la maleza y las cuido de las plagas, todos los días antes de irme a la escuela las voy a ver como crecen y me alegro de ver los nuevos brotes de retoños, creo que tengo pasión por la jardinería.

De hecho, yo seria feliz aquí sembrando gladiolas, también en la otra parcela que no se trabaja, se podrían sembrar hortalizas, es un buen pasatiempo.

—Bien, ¿Y cuales son tus planes a futuro?— Me preguntó don Sebastián mientras quemaba unos bombones en el fuego.

—Voy a estudiar administración de empresas, mis padres tienen varios negocios y me gustaría poder ayudarlos a administrarlos, también me quiero especializar en bienes y raíces, yo veo que las compras y ventas de propiedades dejan buen dinero.— Conteste muy segura de mi misma.

—¿Y que tiene que ver ese con la jardinería?— Exclamó sin entender lo que había dicho.

—Nada, las plantas no son algo de lo que yo pueda vivir, es un pasatiempo para cuando tengo tiempo y ya.— No se que pretendía con esa platica.

LA PROMESADonde viven las historias. Descúbrelo ahora