Canciones De Aves(Damian x Raven)

C21 - Raven

Me desperté al día siguiente en la cama de su habitación. Nunca había dormido tan plácidamente, ni siquiera en mi cama. Pero me sentía sola y como no hacerlo si mi compañero no estaba a mi lado para abrazarme. Me levante asustada al pensar en lo peor, pero mi miedo desaparecía al escuchar el sonido de la ducha.

Mire el reloj y vi que eran las 6:57 a.m. Damian y yo entrenamos a esta hora pero hoy no deseo hacerlo. Y mucho menos en el estado en que se encuentra. Quise levantarme pero escuche la puerta del baño abrirse y no pude evitar mirarlo. Aun seguía blanco pero sus ojos y cabello habían vuelto a su color original. Pero lo que me extraño es que si bien una toalla cubría desde su cintura para abajo, traía puesto una traje como los que usan los ciclistas para cubrir su pecho y brazos. Se acerco a mi y me dijo bueno días.

-Buenos días Damian. ¿Cómo te sientes?-

-Mejor. Pero aun deseo beber… ya sabes que -

-Estoy segura que el señor. Pennyworth debe de haber dejado mas para ti-

El asintió y se sentó en la cama dándome la espalda. Yo me acerque y lo abrase desde atrás para darle un beso en la mejilla. El me respondió apoyando su cabeza contra la mía mientras su mano se posaba sobre mi cabeza. Estuvimos unos segundos así hasta que decidí hablar.

-Quiero preguntarte algo-

-Imagino que si-

-Si no quieres hablar no tienes que hacerlo-

-No puedo tener secretos contigo, amada. Así que dime… ¿El cazador o mi sed de sangre?-

-Ninguno-

Mi respuesta lo tomo desapercibido.

-¿Entonces?-

-¿Por que usas esto cuando estas en la ducha?-

El suspiro retirando su mano de mi cabeza para enlazarla con su otra mano frente a el.

-No deseo faltarte el respeto-

-¿Por qué piensas eso?-

-Como una vez te dije. Tengo cicatrices desde que tengo memoria. No es algo que tu ni nadie necesite ver-

-Yo soy una hibrido demoniaco Damian. Poseo cuatro ojos y mi piel se torna de color rojo cuando mi verdadera forma se muestra. ¿Cómo podría yo quejarme de tu apariencia?-

-Por que aun en esa forma. Pienso que eres hermosa mas allá de las palabras-

-Tu poesía no te va a hacer ganar esta discusión Damian Wayne-

-No… no lo hará… pero no deja de ser cierto-

Nuevamente tomo mi cabeza, pero esta vez la empujo para besarme en los labios… y como siempre pasa… algo se rompió en la habitación.

-Perdón-

-¿A quien le importa?-

Me volvió a besar mas apasionadamente haciendo mi lengua chocara con la de el… y esta vez el closet exploto. Cubriéndonos con sus ropas.

-¡Por que no puedo expresarte mis sentimientos como una persona normal!-

Dije en un arranque de furia dejando salir mi frustración por mis ojos. El me abrazo mientras yo lloraba en su pecho.

-Es tan injusto… te amo… y no puedo demostrártelo-

-Lo se, amada. Lo se… encontrare una solución-

En eso escuche la puerta de la habitación abrirse. Quise levantarme pero Damian me mantuvo apegada a el sin dejarme ver quien estaba en la entrada.

-¿Esta todo bien amo Damian?-

-Si Pennyworth. Mi amada esta un poco frustrada. ¿Podrías prepararle un te de hiervas y unas galletas? Necesita algo que la anime un poco-

-Por supuesto amo Damian. Por favor deje la habitación tal y como esta. Mas tarde la arreglare-

Escuche al mayordomo cerrar la puerta. Me separe de Damian y lo mire a los ojos.

-Iré a desayunar para dejarte vestirte ¿ok?-

El asintió y me beso en la frente. Yo sonreí y me retire hacia el comedor. El señor Pennyworth me recibió con galletas y te. Además de el estaban Richard, Red Hood y el señor Wayne. Todos me saludaron y yo los salude de regreso.

-¿Cómo estas Raven?-

-Estoy bien Richard. ¿Ustedes como están?-

-Nada que un café y las almendras con miel y mantequilla de Alfred no puedan arreglar-

Escuche al otro hermanastro de Damian hablar. El es a quien fue a ver ese día. Por lo que se, el también ha matado criminales.

-Se que soy hermoso Raven. Pero si necesitas preguntarme algo, solo dilo. De lo contrario si me sigues mirando, el pequeño demonio me va a contar la cabeza con su espada-

Sonreí por su egocéntrica actitud que a la vez solo oculta su personalidad.

-Solo me preguntaba tu nombre. No nos han presentado-

-Mis disculpas señorita Raven. El es el joven Jasón Todd. Es el segundo aprendiz del amo Bruce-

-Y el mas apuesto-

Jasón respondió sonriendo mientras bebía su café. Yo sonreí y dije.

-No eres el mas apuesto. De serlo yo seria tu novia-

Todos rieron incluyendo el señor Wayne. Jasón puso su puño frente a mi y lo choque.

-Tienes razón Alfred. Damian, si tiene un buen gusto en las chicas-

El mayordomo asintió y se retiro a la cocina al ver que Damian había llegado para acompañarnos.
Se saludaron y la mesa quedo en silencio hasta que el señor Wayne hablo.

-¿Cómo te sientes hijo?-

-Estoy mejor, padre. Como puedes ver mi cabello y mis ojos han vuelto a su color original… pero temo que mi piel y mi sed de sangre tardaran mas en desaparecer-

-Bueno… no es como si ya no tuvieras antes una sed de sangre, D-

-Que gracioso Grayson-

-Me alegro que estés mejor hijo-

-Gracias padre-

-Pero Damian… ¿Qué fue esa criatura?-

-Es una larga historia-

-Tengo tiempo-

Todos miraron al señor Wayne. Como si hubiera dicho algo impresionante.

-Wow… ¿Bruce Wayne con tiempo?-

-¿Habías escuchado eso antes, Alfred?-

-Jamás joven Grayson… de lo mas inesperado-

Damian miro a su padre. Luego a todos nosotros y luego a mi.

-Bueno… todo empezo el dia de mi primer año-