Capítulo 27 Bienvenida a la familia

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Narra César:

—¡Brianna, Brianna! —la llamé, pero Nico me detuvo.

—Déjala amigo —me dijo Nico poniéndose en frente de mí.

—Voy con ella —dijo Auri preocupada y yo asentí, Nico me dijo que me sentará pero me negué.

—Yo no quiero hacerle ni que le hagan daño —dije mirando hacia donde estaba ella llorando.

—Lo sé amigo, pero sí que te dejaste cegar de la rabia, que le gritaste de una manera...—interrumpió Auri —No quiere hablar —se sentó a un lado de Max.

Nico se sentó en el brazo del sofá y abrazo a Auri, se distrajeron de esa manera así que me dirigí a donde estaba Brianna y la abrace por la espalda, ella quiso oponerse pero la abrace más fuerte lo que hizo que ella correspondiera al abrazo y cayó una lágrima de ella. Me puse a un costado, alce su rostro tomando su mentón y al mirarme sus ojos estaban invadidos por lagrimas, la atraje a mí y la abracé, este momento fue maravillo para mí, tenerla entre mis brazos, solamente abrazándonos, siento que con sólo tenerla así pegada a mí, nos estábamos satisfaciendo ese sentir de que nos necesitábamos uno al otro.

—Perdóname bebé —le susurré al oído para luego darle un beso en el cuello.

Puso mi rostro entre sus manos me miro para luego plantarme un beso en los labios al principio brusco pero al compas de mis labios lo fuimos suavizando sus manos las colocó en mi cuello y se agarraba con fuerza para terminar trepada en mí y seguir con el este momento de solo los dos. Esta era nuestra mejor manera de sentir lo que el otro sentía, entre besos, acaricias bruscas y la vez suaves, nuestra conexión era mejor, quería que esto siguiera, pero ella se detuvo.

—Per...dóname...tú...—dijo ella agitada muy pegada a mi rostro que podía sentir su aliento y rozo sus labios con los míos.

—Perdóname tú a mí por hacerte pasar este mal trago —dije mientras que tenía mi mano derecha en su mejilla acariciándola.

—Me imagino que no te refieres a este preciso momento —dijo para luego morderse el labio inferior de manera provocadora.

—Claro que no, no a refiero a este momento sino al que te hizo pasar Su...—alcancé a decir cuando ella me dio un beso y me miro.

—No quiero que la nombres —dijo rodando los ojos para después descolgarse de mi cintura.

—No la nombrare —dije poniéndole ambas manos en sus mejillas y darle un beso en sus labios.

—Uy, ¿Será que tendré que hacer esto? ¿Para qué me den besos así de ricos? —dijo separándose un poco

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—Uy, ¿Será que tendré que hacer esto? ¿Para qué me den besos así de ricos? —dijo separándose un poco.

—Golosa —sonreí —No se falta yo los daré el momento que sea —dije y nos abrazamos.

—¿Bien por allá? —pregunto Nico desde la sala.

—¡Sí, ya vamos! —gritó Brianna entre risas —¿vamos? —me pregunto y yo asentí me agarro de la mano y me con ella hasta la sala.

Espero que no se hayan dado cuenta que estuvimos nuestro momento —pensé.

—Por lo que veo ya se arreglaron —dijo Auri sonriente al vernos.

—La adivina pues —dijo entre risas Brianna.

—¡Max! —llamé a mi hermano y este voltea a verme y le hago una seña para que se acercará y él vino está nosotros.

—¿Qué pasa? —pregunto deteniéndose en frente de mí —Apúrate que estoy jugando —se quejo Max cruzándose de brazos.

—Ella es Brianna —le dije atrayendo a Brianna hacia mí y colocándome de la altura de Max —Hola —dijo él saludándola al igual hizo Brianna hacia él —Ella es... —alcance a decir cuando Max me interrumpió: —Sí, es una amiga tuya, ¿Ya puedo ir jugar? —pregunto Max volteando a ver a la televisión mientras que los demás se pusieron a reír incluso Brianna que estaba a mi lado lo cual a mí no me causo nada de gracia —¡No, no aun no! —dije alzando la voz y Max volteo a verme de nuevo —Y ella no es una amiga cualquiera también es mi novia —termine de decir mirando a Brianna y ella me miro sonriente.

—¿Novia? —pregunto Max mirándonos a ambos.

—Sí es mi novia —conteste para luego darle un beso en la frente a Brianna.

—Pero, ¿Su...? —alcanzo a decir Max porque yo esta vez lo interrumpí a él —No, no y nunca lo fue —le dije mirándolo.

—Ah, tá bueno entonces —dijo Max dando la vuelta e irse corriendo a jugar. Todos reímos.

—¡Hey Max! —grité.

—¡Qué!—contesto sin quitar la vista al televisor.

—¿A quién prefieres? —le pregunte y Brianna me miro —¿A la que se fue? —Brianna sonrió —¿O la que se quedo? —Esta vez soltamos la risa todos.

—¡A Brianna! —grito sin perder su juego de vista.

—¿Ves? Hasta mi hermano te prefiere a ti —susurré a Brianna nos tanteé ella me miro, sonrió y nos besamos, Auri y Nico comenzaron a aplaudir lo cual hizo separarnos y sonreír.

—Que suerte tienen ustedes, yo todavía no corono —dijo Nico mirando Auri mientras que ella no más que mirar al suelo.

—No presiones amigo, ya se dará —dije mirándolos a ambos.

Cuando de pronto se escucho una bocina de un auto, yo me dirigí a la ventana a ver si eran mis padres y al asomarme sí, sí efectivamente eran ellos, estacionándose detrás del carro de Nico, abrí la puerta y mi madre venía con unas bolsas colgando de sus manos, se las quite y me dirigí a la cocina.

—Buenos días —dijo mi madre al entrar.

—Buenos días —dijimos unísono y regrese a la sala.

—¿Cómo está señora Williams? —pregunto Nico luego de saludar a mi madre a acercándose a darle un abrazo y un beso en la mejilla.

—Bien bien, pero no tan bien como ustedes, hueles a alcohol —dijo mi madre luego de darle el abrazo a Nico.

—Ay perdón —dijo Nico algo avergonzado.

—Hola madre —le dije saludándola —No te me acerco porque me dirás igual que a Nico —mirándola.

—¿Qué tanto has hecho aquí que no te has cambiado? —dijo madre acercándose a darme un beso en la mejilla y un pequeño golpe en la cabeza.

—No tanto para hacerlo —dije pasándome la mano por la cabeza —Mamá, ella son Brianna y Auri —acercándome a ellas dos.

—Ya te iba a decir que yo a ellas no las conocía —dijo mi madre mirándome y acercándose a nosotros —Hola jovencitas —saludándolas —Hola señora Williams —dijeron las chicas algo nerviosas —Ay, pero no tanta formalidad que me hacen sentir vieja, me pueden llamar Lilibeth —les decía mi madre luego de darles a las dos un beso en la mejilla y ellas asintieron sonrientes. Mi madre se dirigía a las escaleras y la detuve.

—Mamá, ella es Brianna mi... —¡Novia es su novia mamá! —grito interrumpiéndonos Max.

—¡No que jugando Max! —dije alzando la voz.

—¿Eso es verdad César? —me pregunto mi madre mirándonos a los dos seria.

—Así es mamá Brianna es mi novia —dije agarrándole la mano a Brianna y mi madre me miraba aun seria.

—Ah bueno, ¡Bienvenida a la familia! —dijo dándonos un abrazo ambos cambiando la expresión de su rostro aun más amable y sonriente.

—Mamá, pensé ibas a decir lo contrario —dije aliviado abrazando a mi madre.

—A mí también, seño...—mi madre la miro —Lilibeth —termino de decir Brianna y mi madre la abrazo nuevamente.

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