Sábado 23 de septiembre del 2017
Mariana se encontraba de regreso de un viaje de vacaciones y a su retorno se encontró con su ciudad deshecha por acción de un fuerte terremoto, la ciudad de México estaba de luto. Miró las noticias en la televisión y las cotejó con YouTube, todo el mundo pedía ayuda a través de los medíos, esto había transformado cualquier intento de sumarse a los esfuerzos en innecesario en ciertos puntos mientras ptros no eran atendidos correctamente. Como a muchos otros se le ocurrió mandar un mensaje a México a través de una canción dedicada a las víctimas del temblor, aunque, después de pensarlo bien llegó a la conclusión de que era demasiado pronto para ello, la gente en las redes sociales no estaba dispuesta a distraerse con cualquier material que no estuviera relacionado con ayuda a los afectados por el temblor. Decidió guardarse la idea para después, cuando la ciudad comenzara a andar de nuevo.
Habían estado corriendo rumores de que habría otros desastres en el mes y una alineación de planetas en la constelación de virgo. Era un momento muy intenso y Mariana se sentía triste y abrumada.
—Es hora de ponerse a ensayar esas canciones. No hay tiempo que perder, en un par de días habrá una presentación y luego debemos comenzar a hacer planes para los nuevos proyectos. Lo del cortometraje suena interesante, aunque en estos momentos me interesa terminar primero lo que tengo pendiente. Después se verá si continuamos con los vídeos. Debo hacer una cosa a la vez, sino todos terminamos locos.
Mamita estaba parada en la puerta observando a Mariana, no había pronunciado una sola palabra.
—Pero, ¿qué es lo que estás haciendo aquí? —preguntó Mariana sobresaltada al ver a Mamita.
—Estaba esperándote, me habló Jiménez, dice que acaba de llegar de una exploración de terreno en Kansas, tú sabes, a Jiménez, le gusta jugar a Dora la Exploradora.
—Y, ¿dónde está Jiménez?
—Están revisando los ultimo detalles de la exploración. Siempre queda algo por preguntar, alguna cosa que no se toma en cuenta. Una vez que termine de hacer el estudio de mercadeo, regresará con nosotros y nos pondremos manos a la obra en el proyecto de tu segundo volumen.
—¿Que llevas en las manos?
—¿Esto?, es un libro que me ha recomendado un amigo.
—¿Ahora te dedicas a leer novelas rosa?
—No es una novela rosa, se trata de un libro de neurología.
—¿Desde cuando lees esas cosas, para que te puede servir a ti?
—No se trata del uso que pueda dar a esta información, sino del placer en sí mismo de la lectura.
—¿Placer en leer un libro de neurología?
—El libro es del autor Oliver Sacks, escrito en lenguaje sencillo, más que datos técnicos, incluye la descripción de varios casos de personas que experimentaron alucinaciones, cuales eran sus posibles causas y los tratamientos y cuidados que se le dieron durante su recuperación.
—Suena interesante, te recomiendo que le lleves el libro a Jazmín, con eso que ahora le hablan los pajaritos.
—¿Y quién se acuerda en estos momentos de Jazmín? La pobre no sale de su jardín. Ya le dije que necesita dar la vuelta, que le de el aire, por eso tiene alucinaciones. Si le das un libro como este lo único que ocasionarás es que se aísle más y que encuentre que tiene todas las enfermedades descritas en el libro.
—Tienes razón respondió Mariana.
—Oye, Mamita, tienes alguna idea para ir agregando a la agenda de proyectos.
—Pues, hay algo que se me ha ocurrido, puede sonare extraño, de cualquier modo, te lo describiré.
—Adelante.
—Hace tiempo conocí a un chico, es mezclador de música y me mostró un cd creado por un desconocido que había logrado crear un sonido muy distinto a todo lo que hemos escuchado.
—¿A qué te refieres con distinto?
—Para empezar, hizo una mezcla de su propia música con la de otros artistas, pero no era algo para bailar, sino música de diferentes estilos, con preludios, interludios y variaciones de sonatas de autores clásicos, mezclados con canciones románticas, poemas y música folclórica y guitarras roqueras y flautas peruanas. Todo lo mezcló con canciones de coros épicos, almohadas orquestales, sonidos de lluvia, viento, fuego y grillos, así como todo tipo de pajaritos y voces humanas que representaban ambientes como una casa con niños, un restaurante lleno, un hospital y las ambulancias, y todo concordaba con lo que estabas escuchando en las letras de las canciones.
—¿Y para que tanta información en un solo proyecto? Eso se debe escuchar saturado y, por ende, horrible.
—Si lo hubieses escuchado te darías cuenta de que era un excelente trabajo.
—Pues a mí no me convences.
—Para que puedas entenderme el tipo de sonido que alcanzaba dicho proyecto deberías escuchar a el disco The cross of changes de Enigma, en él hay elementos contrastantes como guitarras eléctricas, flautas japonesas, voces indias, sonidos de delfines y aves, el mar, voces distorsionadas con eco, piezas de piano con poemas y canciones susurradas.
—Otra locura.
—Tienes que abrir aún más tu mente. Eso permitirá a tus seguidores tener más opciones y crearás un nuevo camino para todos.
—¿Para qué trabajar mucho más y arriesgar tanto, si podemos hacer algo más sencillo?—Solo por la satisfacción de hacerlo, querida.
—Dime si puedes localizar al chico que dices.
—No es posible, dicen que solo hizo un par de discos con una computadora casera y después se dedicó a la ingeniería.
—Buena opción, dejar la música por ir detrás de la manada.
—Para él no fue así. Solo estaba buscando la forma de procurarse el pan. Recuerda que no todos tienen la misma suerte que tú.
—O que tú, porque a ti tampoco te ha ido nada mal. Por favor, déjame una descripción por escrito de tu propuesta para analizarla, pero quiero que me entregues algo concreto, no ideas abstractas, algo así como:
Sonata para piano Nº 1 en fa menor Opus 2 Nº 1, Beethoven
Pic Nic – Amanecer.
etc.
—A la orden señorita. Solo espera unos días, porque no tengo bien materializada la idea.
—Está bien, aún tenemos tiempo. Ahora déjame descansar, porque tengo que ensayar al rato por la noche.
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El jardín de Jazmín
DiversosLa historia de Jazmín, su jardín y los animalitos que le rodean.