El jardín de Jazmín

031 Junta de Cleopatra y Mariana

8 de noviembre de 2017
Publicada en 22 de noviembre del 2017

Mariana pensó que había sido un gran suceso que Kadae se diera cuenta que tenía que empezar a realizar sus propias composiciones. No pudo explicarle los planes que tenía para ella, que le financiaría parte de su carrera y su primera producción profesional. Sabía que Kadae necesitaba mejorar en muchos aspectos, sin embargo, se sentía mal de ser ella quien tuviera que decirlo. Aquel desconocido que se encontró con Kadae en el concierto lo había hecho por ella. Ahora sólo restaba continuar trabajando esta idea para que echara raíces en Kadae.
Mariana llegó al local donde se había quedado de ver con Cleopatra . Se trataba de una cafetería Starbucks cercano a su casa.
Después de saludarse y hacer una orden tomaron una mesa del centro y comenzaron a discutir acerca de sus nuevos planes:
— Hemos comenzado a trabajar en los planos del proyecto a largo plazo —dijo Cleopatra con seriedad.
—¿Cuál sería el primer paso a dar? —preguntó Mariana.
—Para nosotros, los fundadores el primer paso deberá ser una simulación de la compañía que estamos planeando.
—Ya habíamos hablado de ello, pero no nos has especificado de qué se trata.
—Vamos a hacer una historia en la cual cada uno de nosotros aparecerá como un personaje, se planteará el tema, un problema y se cuestionará acerca de las formas de resolverlo.
El primer paso lo realizaremos por separado. Ninguno de nosotros permitirá que los demás den opiniones ni se comunicarán.
El siguiente paso es hacer una simulación del mismo problema, esta vez en equipo. Y comparar todos los resultados.
—Todo eso me suena como a tareas de la escuela.
—De eso se trata, pero esta escuela te llevará de la mano a tu futuro. Vamos a apostar mucho a este proyecto, no podemos darnos el lujo de dar pasos en falso.
—¿Eso significa que todavía hay mucho por recorrer antes de comenzar a trabajar con las prendas?
—Primero vamos a reforzar con la práctica y la simulación, la manera de solucionar problemas en equipo con las personas que van a dirigir la empresa.
—Pruebas, no más.
—Mientras nosotros hacemos esto, los chicos asignados por el señor Uriel para hacer un reconocimiento del mercado nos traerán información de campo, el señor Uriel será el encargado de controlar y analizar dicho flujo de información, junto con un pequeño grupo de asesores.
—Eso suena complejo y tedioso.
—¿Esperabas que todo apareciera de la nada? Tenemos que poner bases firmes a nuestra empresa.
—¿Qué hay de nosotros?
—Tenemos que definir cada uno los departamentos, y trabajar en la especialización de nuestros directivos.
—¿Y tú en qué piensas trabajar?
—Estaré asignada al departamento de planeación, como puedes darte cuenta, es lo que estoy haciendo. Además, capacitaré al personal, pero no tengo que ver con los datos brutos. Tenemos que delegar responsabilidades, para que todo funcione de manera correcta.
—¿Quién se encargará de los diseños?
—Despreocúpate por ahora de los diseños, recuerda que las modas cambian cada año, es necesario hacer un estudio del mercado en cada temporada antes de un lanzamiento de nuestros diseños. Por ahora no estamos listos, lo que debemos definir son los productos que vamos utilizar y no  sus diseños.
—Vaya, eso suena interesante. Por lo tanto, vamos a dedicarnos hacer todo, menos los productos que tenemos planeados.
—Es necesario comenzar con la simulación. No podemos darnos el lujo de invertir dinero, sin conocer bien el medio en el que nos estamos metiendo.
—Entonces nos dedicaremos hacer teatro y libros en lugar de ropa.
—Si lo quieres ver desde ese punto de vista, estás en lo cierto.
—¿Qué me dices acerca de el dinero que va aportar tu novio? ¿Qué va pasar si se pelean antes de que arranquemos con la empresa?
—Las cosas seguirán igual, la empresas será independiente de la relación que tenga yo con él.
—Eso dices ahora, pero si te peleas con él no vas a quererlo ver cerca.
—Ya me estoy cansando de que todo el mundo me diga lo mismo, llevaré la propuesta a la junta de mantenerme al margen de la dirección de esta compañía y permitiré que Fabián lo haga si todos están de acuerdo.
—¿Y Fabián qué opina? ¿Cuando menos tiene experiencia?
—No la tiene, pero podemos enseñarle.
—Es mejor que te quedes tú, a él tendríamos que enseñarle todo desde principio.
—Pero ganarían la seguridad de que, aunque haya problemas con nuestra relación, no correrían el peligro de que esto afecte al trabajo.
—Verás que todos votarán por que te quedes.
Mariana dio un sorbo al café que tenía sobre la mesa y dio un giro a la conversación.
—Por cierto, ya estaba contando con el dinero que sacaría de esta empresa para antes de terminar el año.
—Mariana, siento hacer que tus sueños se desmorone, esta empresa no se va a fundar para trabajar un año y y al siguiente echar flojera. Para ponerle buenas bases, es necesario trabajar muy duro los primeros cinco años.
—Qué esperanza, Lo quería para apoyar la carrera de Kadae.
—Deberías preocuparte más por ti misma, y dejar Kadae en paz.