Quererte es poco | Na Jaemin.

24.

No me contesta, no quiere hablarme y su sirvienta no sirve, literalmente. Se hizo la tonta esa mujer, me dijo que no sabía dónde estaba, sé perfectamente que ella estaba ahí, la vi por la ventana.
Poco a poco me desesperé, estaba algo inquieta, caminaba de un lado otro en la sala de mi casa. Jaemin el cual estaba sentado en uno de los sofás me miraba, me seguía con sus ojos para cada lado que iba mientras en sus manos sostenía su celular, de vez en cuando escribía.

-Si te tropiezas y caes me reiré mucho

bromeo, pero no me hizo gracia, estaba bastante carente de eso que llaman humor.
Se levantó del sofá y me sostuvo de los hombros, me miró a los ojos, y aunque traté de esquivar su mirada intensa, no pude, el encontraban mis ojos fácilmente y sin esfuerzo.
Me dió un pequeño beso, no reaccioné, quiso volver a tocar mis labios con los suyos, pero esta vez, yo lo aparté.

-¿No te das cuenta que has lastimado a EunWoo?

-¿Desde cuándo te importa ella? ¿Me vas a decir que en serio se hicieron amiguitas? No me jodas, Jeon, ¿Tú has sido capas de aceptarla después de no querer escuchar siquiera su voz? ¿No que solo la investigabas?

-Si, ¿Sabes que si? Ella ha sido mi amiga, me di cuenta que realmente es una buena persona con un problema y no, no hay que alejarla, hay que ayudarla, quizás tenga una obsesión contigo, pero yo sé que ella puede superarlo.

-¿Y qué? Por ella tú ya no gustarías de mi? Venga Jeon, los dos nos gustamos de hace tiempo y ninguno va a poder dejar de estar conectado con el otro.

-¿Te das cuenta lo idiota que eres?

-Soy un idiota, que ha estado enamorado de ti mucho tiempo y no, no voy a dejar de decirlo, me gustas, me gustas de tal manera que no puedo dejar de pensar cada momento que compartimos, tus sonrisas, tus miradas, no puedo mirar otra chica sabiendo que tú estás en mi corazón, ¿Cuanto más voy a esperar para estar contigo? No quiero dar más vueltas, estaré esperando que te decidas.

Se fue, dejándome con la cabeza hecha un lío. Me dejé caer de rodillas al piso aún pensando. ¿Cómo puedo decirle que no? Si yo también estoy enamorada de él, pero, cuándo me acuerdo de EunWoo, la pena llega a mi.

El timbre sonó y yo me arrastré hasta la puerta.

-¿Quién es?

-El Playboy internacional.

Reí con lágrimas en los ojos y me levanté para abrir.

-HOL-... a.. ¿Por qué lloras? ¿A quién le pego?

-Ah.. es complicado..

-Cuentame ahora. -me arrastró hasta el sillón y después de abrazarme y tenerme allí entre sus brazos habló otra vez- estoy aquí para tí~

-Bueno..

Básicamente le conté todo lo que pasó, me puse tan mal que comencé a llorar peor, estaba un poco sofocada y admito que cuando eso pasa estoy más sensible y puede que cualquier cosa me rompa fácilmente.

Jungkook estaba en plan "Hermano protector". Decía idioteces como "GOLPEARE A ESE TIPO", "¿Cómo puede decirte eso? Se las verá conmigo" y "DETENME QUE LE PEGO".
Si, la verdad que yo estaba tan muerta de risa que hasta me dolía el estómago, Jungkook me miró y río también, se habrá dado cuenta de su idiotez o quizá le da risa mis carcajadas.

Cuando Kook se fue yo ya no supe que hacer, intentaba no volver a deprimirme, hasta se lo había prometido a él antes de irse de casa, fue imposible. Otra vez estaba tirada en el sillón llena de tristeza, no mentira, levanté mi culo y salí de casa, me dirigí a casa de Mark, ahí estaría Tiffany y como buena madrina debería ir a verla.
Esperé en la puerta, mientras escuchaba unos gritos de Anya.