Me rehuso a identificarme con alguna mierda dentro del mundo de las preferencias sexuales.
Pasé muchos días vagando y muchas noches resignada a pegar la cabeza a la almohada hasta tener una idea clara, ¿Qué ocurrió? Me di por vencida. No puedo etiquetarme y no siento la necesidad de hacerlo. Hay días en los que despierto y pienso: "Soy jodidamente heterosexual hoy". Otros a diferencia, pienso: "Si alguien me pregunta si soy lesbiana, respondería que definitivamente lo soy". Luego están las tardes tranquilas, aquellas donde me susurró internamente: "Ambos sexos son tan bellos, no me importa en lo más mínimo cuál consiga obtener mi interés en la calle hoy".
Dejé de preocuparme. No lo necesité realmente, supongo que me gustan ambos sexos y no tengo problema con ello. Un mundito tan pequeñito que mis conocidos se contaban con los dedos de mis manos, y todos se mantenían tan completamente neutrales con lo que dijese, nada importaba, todo era correcto.
Escuchaba las noticias, las historias de personas que tanto batallaron para aceptarse, para que sus amigos lo hicieran... no comprendía. Si no dependes de aquellas personas, no debes temer, ¿qué si a tus amigos no les parece lo que seas? No interesa un carajo.
¿Se escucha bien, cierto? Vivir tu vida y ser quien eres.
Valentía, joder, valentía. Respétate, quiérete. Defiéndete.
En las tardes regreso a la escuela a deporte, todos esperamos afuera y jugamos o reímos. Una amiga de otro grupo iba saliendo de su clase, se despide de mí y ya, es todo.
"Es lesbiana, ¿no?"
El comentario de una de mis amigas de ahí fue inesperado, en serio no me preparé para eso. La respuesta a su pregunta era: No, es bisexual.
"No..." ¿Los puntos suspensivos a qué van? A una interrupción, a eso van.
"Claro que sí, ES LESBIANÍSIMA. Y ahora más, como que se hizo más lesbiana en esta escuela" Gracias, amigo, gracias por tu comentario, en serio. Mierdero.
"No, es bisexual." Con gracia, con gracia hay que decirlo. Ignorar mis nervios, pero, ¿por qué nervios? ¿Por qué carajos?
"Es lo mismo, un bisexual es una puta lesbiana. Es. Una. Lesbiana." Gracias por tu aportación de nuevo, amigo.
"Exacto." Mi amiga lo secunda, bueno, era más una compañera.
"Pero igual le gustan los hombres." Insisto porque algo me obliga a hacerlo. Mis principios. ¿La estoy explicando a ella o a mí misma?
"Ya, da lo mismo. Es una lesbiana." Sí, ésa sí era mi amiga amiga. Sí, ésa sí me dolió un poco más.
Mi mejor amigo llegó por alguna razón del destino, se quedó escuchando lo que decía mi compañera, ¿qué dijo? Esto:
"No sé, pero no entiendo a los bisexuales. Se me hace algo bien estúpido..." estúpido. "Digo, ¿hombres y mujeres? ¿Los dos? Qué idiota, en serio, gente tonta." No sé qué me duele más; si lo que dice, que todos los demás estén de acuerdo y secunden su argumento, o la mirada tan seria e incómoda que me dio mi mejor amigo cuando yo nada más asentí y torcí los labios. ¿Cedí? ¿Acaso no era bueno defenderse? ¿Qué sucedió entonces? Anda, dime que yo no lo sé. Mi pecho se sentía acumulado por algodón, montones y montones de algodón siendo empujado por mi garganta hasta mi estómago, ardor en los ojos, cosquilleo porque todos me miraron dos segundos cuando mi mejor amigo me codeó y me miró mal, como diciendo: "¿No vas a decirles algo? ¿En serio?".
Y no hice nada.
No hice absolutamente nada al respecto.
Me llamaron estúpida, me dijeron tonta, únicamente porque los hombres se me hacen igual de bellos que las mujeres.
Debo aceptar que tenía temor, sé cómo es la gente. Tengo amigas mujeres, necesito confiar en ellas para hablar libremente de mis gustos, ¿por qué? Porque conozco sus sensaciones, dices que te atraen las mujeres y automáticamente se alejan, ya no te abrazan, ya no se ríen cerca de ti, no bromean con casarse o te dicen "te amo" de forma casual, porque creen que lo vas a confundir con un "te amo" de pareja.
No es así.
No está ni cerca de serlo.
Mis amigas son mis amigas y soy tan capaz de bromear con ellas como si fuese heterosexual.
¿Qué una chica no bromea con hombres? ¿No abraza a sus amigos sin necesidad de frotarse con sus vergas?
Y tuve desconfianza en contárselo a mi grupo más cercano de amigos, en comentarlo de forma casual para así poder sentirme más libre.
Pero ahora parte de los que pensaba podrían entender y mantener el mismo trato, piensan que es estúpido, que es tonto y le hacen caras de asco a una simple preferencia sexual.
Me sentí acobardada.
Con un pie fuera del clóset y otro adentro.
Sé que igual y es algo torpe hacer tantas palabras de algo tan pequeño que me ocurrió... pero por alguna razón me afectó, me dolió.
