Always Together - You and I 2 (Max George)

Capítulo 5: Ocho años después

MARATÓN 2/3. 

(Narra Max)

-¿No crees que es un tanto apresurado?- preguntó mi madre. 

-No- respondimos Jack y yo a la misma vez.

Mi hermano me apoyaba.

-Estarás solo durante ocho días en Nueva York, Max- dijo mi madre. 

-Mamá, soy lo suficientemente grande como para cuidarme solo- respondí poniendo los ojos en blanco. 

-¿Por qué no puedo ir?- protestó Albert colocando sus cubiertos en la mesa y dejando de comer el almuerzo.

-Porque no puedes ir a Nueva York con tu tío, debes quedarte aquí e ir al colegio- respondió Caroline cansada ya que este tema lo habían discutido desde hacía casi dos semanas. 

-Si Albert va, yo también- dijo Caitlin claramente molesta y celosa. 

-Ninguno de los dos irá- dijo Jack molesto. 

-Bien- respondieron los pequeños al mismo tiempo. Bueno, ya no tan pequeños... Albert ya tenía catorce años. 

El avión salía en solo dos horas y mi familia me había organizado un almuerzo de despedida ya que no volvería hasta el domingo de la semana próxima. No sabía porqué pero quería tomarme una semana de descanso antes de la boda. Nueva York sonaba bien para hacerlo y a la mierda si la ciudad encerraba muchos recuerdos, ya no me importaba. Mi cabeza explotaría si seguía en Vancouver trabajando y con la misma rutina de siempre. 

Una hora después me despedí de todos y Jack me llevó hasta el aeropuerto. 

-Descansa- me dijo. 

-Lo haré- respondí seguro. 

Jack suspiró. Sabía que quería decirme algo, lo notaba, lo conocía. 

-¿Qué?- pregunté finalmente. 

-Ella probablemente ya tenga otra vida- dijo de la nada-. Y tú estás acá, así, sin amor, sin... nada- supe que se refería a Samantha-. Debes olvidarla, hermano. No, necesitas olvidarla. Solo mírate, te ves tan infeliz desde que ella se marchó hace ocho años. Ocho años, ¿quién puede esperar tanto por alguien?- preguntó mirando hacia un punto indefinido como si estuviera hablando consigo mismo- Prométeme que al regresar de Nueva York, lo intentarás. Tienes que empezar de cero antes de que sea demasiado tarde. 

Noté que Jack hablaba sinceramente. En verdad le entristecía la idea de verme tan infeliz. ¿Cómo no lo había pensado antes? Yo estaba lastimando a mi familia con todo lo que hacía. Abracé a mi hermano fuertemente. 

-Lo prometo. 

(Narra Sam)

-No lo sé, Connor, no creo que este vestido sea el indicado- le dije mirándome en el espejo del pequeño lugar en el que estaba. 

-Sal así puedo verte- escuché que levantaba su voz desde afuera para que pudiera oírlo. 

Suspiré pesadamente y me acomodé el quinto vestido que me probaba. La verdad es que todo el asunto de la boda me ponía muy nerviosa. Solo faltaba una semana y tenía que encontrar un vestido sí o sí. Connor ya había elegido un hermoso traje color negro pero yo no sabía qué me pondría y tenía que ir adecuadamente. 

Salí del probador. 

-Mmm, no- dijo mirando el vestido color violeta demasiado apretado y demasiado corto. Era horrible, ¿por qué me lo había probado si no me gustaba?-. Buscaremos otro.