Capítulo 64 parte 2

174 21 1
                                    

Salí del baño confundida, pero feliz. La fiesta seguía en supunto máximo, todos bailando, muchos ebrios y unos pocos sentados en las mesas. Cuando me acerqué a mi mesa para tomar un poco de agua, observé que Will y Derek hablaban fuertemente. Will gritaba y Derek negaba con la cabeza mientras hacía movimientos extraños con sus manos. Will intentó irse, pero Derek lo tomó por la muñeca y le pidió que se tranquilizara. Como si fuera en cámara lenta, observé como Derek se acercaba a Will y lo besaba. Pero no me sorprendí, Max ya me había dicho que Derek era gay, el problema es que no imaginé que él y Will estuvieran juntos.

-¡Aquí estás!- Ryan llegó a mi lado algo sudado y sin saco, había estado bailando- ¿En dónde te habías metido?

-Fui al baño- dije sonriendo como una niña pequeña, mi cabeza aún estaba en Will y Derek. La música se cortó.

-Iré a sentarme con unos conocidos por allí. ¿Nos juntamos en la semana a tomar café? Tenemos mucho de qué hablar...

-Claro, sí, búscame en la editorial de Max el lunes por la tarde. Hablaremos- le aseguré.

Cuando Ryan se fue volvimos a sentarnos en las mesas, al parecer era hora del postre. Miré hacia la mesa de Max en dónde él estaba hablando con un tipo algo viejo, al verme sonrió y me guiñó un ojo, lo que me hizo sonreír. Volví a concentrarme en donde yo estaba, y ahí fue cuando Derek apareció, solo. Se lo notaba triste.

-¿Dónde está Will?- le pregunté.

-Se fue- dijo simplemente. Ni siquiera me miraba, era obvio que su enojo era hacia mí.

-Derek, lo siento... Yo pensé que tú... Bueno, no sé lo que pensé, pero te comportabas tan amable conmigo que tal vez...

-Increíble- por fin me miró-. Soy gay, ¿pensabas que estaba enamorado de ti? Yo solo intentaba ser tu amigo, no tu novio. Además, eso no te daba derecho a besarme, y lo hiciste. Will nos vio y ahora está enojado con ambos.

-¿No le dijiste que fui yo la que te besé a ti?

-Sí, pero no me escuchó. Al parecer no eras la única que pensaba que yo sentía cosas por ti. Maldita sea, ¿no puedo tener amigas?- golpeó la mesa con el puño mirando hacia otro lado y luego volvió a mí- Mira, no voy a negar que cuando comencé a sentir estas cosas me asusté y quería enamorarme de una mujer. Tú estabas ahí, supongo que quería que me gustaras, pero nada pasaba y lo comprendí. Soy gay, no puedo cambiarlo, simplemente sucedió.

-Bueno, lo siento, no sé ni porqué lo hice...

-Te diré porqué lo hiciste- me dijo seriamente-. Porque aunque te quejas de lo celoso y controlador que es Max, tú también eres así. Tal vez no tanto como él, pero lo eres, sino no me habrías besado, habrías dejado que hablara con Susanna en paz.

-Sabes que ella me odia y que es capaz de cualquier cosa para hundirme- dije enfurecida, lo que decía Derek no tenía sentido.

-Entonces eso significa que no confías en Max- contraatacó. Buen punto, debía admitir-. Solucionaré esto con Will, déjalo así.

-Lo siento, enserio, yo no...

-Te dije que lo dejes así- pidió con más frialdad que antes, si es que eso era posible.

Me quedé en silencio, Derek estaba enojado y nunca es bueno hablar con alguien cuando está furioso.

***

Ya nadie quedaba en la fiesta, Max se estaba despidiendo de los últimos tipos que se sentaron con él en la mesa. Todo el salón estaba sucio, con las luces apagadas salvo por unas pocas que lograban iluminar la mesa en la que estaba sentada y el escenario. El piso era un desastre, al igual que las mesas. Cuando Max cerró la puerta me miró y soltó un suspiro, el momento de hablar se acercaba. Caminó hacia mí desabrochando los primeros botones de su camisa y se sentó en la silla de al lado.

-¿Hablaste con Ryan?- preguntó de la nada.

-Sí, me sorprendí al verlo- admití-. Fue una buena visita, nos veremos el lunes para hablar un poco- sonreí incómodamente y él asintió. Momento incómodo, ugh-. La fiesta estuvo genial.

-Sobretodo la parte del baño- dijo y me sonrojé, no podía creer lo que habíamos hecho-. Sam- me llamó ya que yo intentaba esconder mi mirada-, lamento lo que pasó. Todo. Lo de Nina fue estúpido, lo del casamiento fue inapropiado, mi egoísmo es más grande del que parece- admitió, sus palabras eran sinceras.

-Yo también lo siento, mis celos son estúpidos, lo sé, debo controlaros- acepté. Max asintió.

-Entonces, ¿estamos bien?- preguntó como un niño pequeño tomando mis manos entre las suyas.

-Sí, claro. Además ya no soporto dormir en un hotel- Max rió.

-Jamás pensé que llegaríamos a algo así- suspiró-. Debemos irnos, extraño dormir contigo a mi lado. Pasaremos por el hotel a buscar tu ropa antes.

***

-Sam, nena, despierta, llegamos- dijo sacudiéndome. Me había dormido luego de haber buscado la ropa en el hotel y haber pagado lo necesario por todas las noches allí, ya estábamos frente a esa casa tan conocida para mí-. Son casi las siete de la mañana, necesito dormir ahora- dijo saliendo del auto. 

Entre los dos agarramos mis pertenencias y entramos. Dejamos todo a un costado en la habitación, Max se quitó el traje y se tiró en la cama con ropa interior mientras que yo me sacaba el vestido y agarraba una remera de Max para dormir con ella. 

-Amo cuando haces eso- me dijo sonriendo y yo me sonrojé, ¿por qué debía sonrojarme tanto? Entré en la cama y me acerqué a él, rápidamente me abrazó y suspiró-. Al fin. 

-Es bueno estar de vuelta- dije sonriendo. 

-Es bueno tenerte de vuelta- aceptó. 

Me quedé dormida entre sus brazos... Por fin. 

Always Together - You and I 2 (Max George)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora