Capítulo 21 parte 2

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(Narra Max)

Escuhé mi nombre pero nada de aplausos, todos estaban demasiado sorprendidos como para aplaudir al nuevo jefe. Sin embargo, tomé una respiración profunda y abrí la cortina para salir al escenario, frente a todos y con una luz que me daba justo en el rostro y me impedía ver demasiado. Kevin me estrechó la mano y bajó del escenario para sentarse con su familia. Me quedé ahí, solo, ante todos ellos. Miré hacia la derecha y luego hacia la izquierda: ahí fue cuando la encontré. Sentada, con un vestido negro, el cabello recogido en un moño y los labios pintados de rojo fuerte. Estaba sorprendida, lo noté por su boca abierta y sus ojos abiertos de par en par. ¿Estaría enojada? Probablemente.

-Gracias, Kevin, por tus maravillosas palabras- dije mirando en la dirección del viejo dueño de la editorial. Volví a mirarla a ella-. Como ya dijo Kevin, mi nombre es Maximilian George y soy de Canadá, aunque muchos ya lo saben. Sé que todos están muy cómodos trabajando en esta editorial, sé que aman el trabajo que ha hecho Kevin con éste lugar. Solo les quiero asegurar, que nada de eso cambiará. Quiero que todo siga funcionando como hasta el momento: de maravillas. Mi plan no es cambiar las cosas que ha logrado Kevin, sino continuar con ellas. Todo se quedará como está, solo cambiará el rostro que los represente, o sea el de Kevin por el mío- hice una pausa ya que Samantha había sacado sus ojos de mí y había mirado a Derek en una de las primeras mesas-. Pero sí haré algo que Kevin no ha hecho: abriré una editorial en Canadá, en Vancouver, donde yo vivo. Aquellas personas que quieran un traslado, podrán hacerlo sin problemas- dije con lentitud, mirándola a ella, que se sonrojó y agachó la mirada por unos breves segundos-. No tengo mucho más que decir, simplemente gracias.

Para mi sorpresa, la sala explotó en aplausos. Tal vez les había gustado mi discurso y eso de no cambiar nada de lo que había hecho Kevin antes. O, tal vez, me aplaudían porque ahora estaba al mando y al jefe se le debe mostrar respeto. Kevin subió y me abrazó brevemente. Cuando nos separamos, miré hacia la mesa de Samantha y noté que ella ya no estaba. Mi corazón latió rápidamente y comencé a buscar como loco en el salón para localizarla. Logré verla saliendo por la puerta principal y cerrándola rápidamente detrás de ella. Estaba corriendo. Bajé del escenario sin dudarlo y caminé en dirección a la puerta, pero un mano en mi muñeca me detuvo. Me giré a ver quién era.

-Derek, hablaremos luego- dije fríamente.

-En la terraza- me dijo sin más y me soltó.

-¿Qué?

-Búscala en la terraza. Ahora- se giró y se fue.

Salí del salón bajo la atenta mirada de muchos. No me importó, nada me importaba. Subí al elevador libre y apreté el botón que suponía que correspondía a la terraza: el último. El elevador era rápido pero, en ese momento, me pareció más lento que una tortuga. Además, la típica música de elevador de fondo me estaba volviendo loco. Comencé a golpear la suela de mi zapato contra el piso, el tiempo no se pasaba más. Cuando llegó, haciendo el típico ruido de elevadores, las puertas se abrieron y casi me golpeo con una de ellas de lo rápido que corrí. Atravesé un pasillo que tenía una puerta al fondo y cuando la abrí, estaba en la terraza con una hermosa vista de Nueva York de noche. Ella estaba con sus manos apoyadas en la pared que impedía que las personas de caigan, no era el lugar más seguro del mundo y por un momento me asusté. Pero luego escuché sus sollozos y el miedo que sentía se convirtió en tristeza porque Sam estaba llorando.

-Sam- pronuncie su nombre con cuidado para que no se asustara. Estaba en el límite y si hacia un mal movimiento podía caer-. Sam, mírame. Necesitamos hablar- se dio vuelta bruscamente. Su maquillaje un tanto corrido, sus labios mojados por lágrimas y el viento la estaba desarmando su moño.

-¿¡Por eso regresaste!?- me gritó, sentí el odio en sus palabras- ¡Me encontraste y compraste la maldita editorial! ¿Acaso quieres arruinar me la vida?- gritaba tanto que cualquier persona la podría escuchar. Jamás la había visto así, ni siquiera el día en el que me dejó- ¡No puedes hacerme esto!

Always Together - You and I 2 (Max George)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora