— ¿Senador Yusuf Stevenson? Soy Hermione Weasley —Tras saludarse muy cortés y después de explicarle que el ex primer ministro le había dado su número personal, la chica le seguía comentando—. Estamos en una importante investigación, relacionada con los magos y con aquel que está detrás de ellos. Necesitamos, ahora más que nunca, ayuda.
—Ahora mismo estoy muy liado, el consejo se reúne de urgencia pero dime: ¿Qué puedo hacer por ti?
—Se que ha viajado por todo el mundo: ¿es posible que conozca un cuento o leyenda donde aparezca un arlequín vestido con tonalidad roja y por algún motivo indica el número tres con sus dedos?
— ¿Un arlequín? Son muy típicos de Italia —Como le había pillado enterándose a la vez del ataque al norte, de repente le vino un cuento a la cabeza—. Podría tratarse del relato de: El último Emperador y el Arlequín.
— ¿Lo recuerda bien?
—Tengo algún que otro documento, que ido recolectando y uniendo de diversas estrofas en diversos lugares hasta componer la historia al completo.
—Tenemos que encontrar la fuente de la leyenda pues es posible que estuviera basada en un hecho real.
—Viajad a Roma cuanto antes. Debemos vernos allí.
En el Ministerio de Magia en Londres, el preciso día del ataque fallido contra la Atalaya, tras recibir la llamada de Hermione Weasley, el senador Yusuf Stevenson recorría los corredores del edificio principal en dirección a su despacho privado.
Mientras recordaba la conversación, que había mantenido por teléfono, esquivaba a la gente que iba de un lado para el otro buscando información de lo que había pasado al norte. Pero él iba muy centrado en un asunto.
—Senador: el consejo se reunirá en breve en el Alto Tribunal —le informaba uno de los empleados.
—No hay tiempo, consígueme un billete de avión a Roma ahora mismo.
— ¿Se va?
—Es por causa mayor. No te lo puedo explicar.
Una vez en su oficina, el ambiente en aquel lugar era caótico, multitud de estanterías con pergaminos enrollados colocados en estanterías, que podrían crear un mini laberinto alrededor de la mesa central. También allí había una chimenea en los laterales de la estancia, que era su única fuente de calor. Rebuscando entre tanto documento enrollado, iba de un lado para el otro, tratando de localizar el correcto.
Cuando encontró el que buscaba, con él en las manos, se fue hasta su escritorio y sentándose comenzó a desenrollarlo muy despacio a la vez que lo leía.
"Cuenta la leyenda, que en el año 473 DC, tres años antes de la caía del Imperio Romano y el inicio de la Edad Media. El general Flavio Orestes, fuerte candidato para ser nombrado emperador, contemplaba impotente como todo lo que había sido el Imperio Romano Occidental estaba siendo atacado por los bárbaros del norte del continente.
El mentor del general y ahora también mentor de su joven hijo, Flavio Rómulo Augusto, era en realidad un poderoso mago de la época que era el único responsable de que no hubieran perdido el imperio desde hacía ya años. Pero ya era muy mayor como para poder seguir protegiéndolo.
Pecando contra la naturaleza, con la intención de crear alguien tan poderoso como él, con la fuerza suficiente como para seguir controlando a los bárbaros del norte y con la capacidad para volver a hacer grande a Roma; en un primer momento intentó instruir en las artes mágicas al padre y después al hijo, pero era inútil pues ambos eran Muggle.

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Las Cinco Varitas.
Mystery / ThrillerSoplan viento de cambio en el mundo mágico. 19 años han pasado desde que la historia terminó y una nueva aventura está cerca de comenzar. Las cinco varitas han sido creadas. Cinco portadores, cinco historias, cinco leyendas y un misterioso jugador m...