Capítulo 35.

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En el edificio de los Aurores había gran actividad, no había un segundo que perder, tenían que hacer un recuento exhaustivo de todo lo acontecido durante el primer día del año. Había que averiguar que presos se había desmemorizado y a cuántos de ellos no tuvieron más remedio que eliminar durante el altercado. Las organizaciones oscuras, entre ellos los Mortífagos, que se habían ocultado de las autoridades, ahora estaban en paradero desconocido y tenían que dar con ellos. Por último conocer quiénes eran los presos de la unidad de psiquiatría fugados, que habían sido reunidos en la prisión de Azkaban antes de que esta se desintegrase.

Tanto el mundo mágico, como el no mágico, celebraron la desaparición de una de las tres amenazas, que hacían peligrar la estabilidad del mundo, pero nadie supo cómo desapareció llevándose consigo toda prueba de lo ocurrido. Se inició una investigación internacional para esclarecer lo ocurrido pero nada se encontró; al final se archivó el caso y quedó como un misterio sin resolver.

Los dos enemigos estaban localizados pero, de los tres que quedaban al inicio del año, esos dos eran los más peligrosos al ser inmunes a la magia y a multitud de cosas más. Por mucho que la coalición internacional intentara negociar con ellos, en el caso de William seguía en su bunker inaccesible aguardando. En el de Igor no había manera de adentrarse en la complicada orografía de la península escandinava, repleta de multitud de especies de dragones, pues eran uno de sus lugares favoritos de anidación.

Por parte de los gobiernos muggles se sugirió un gran ataque nuclear para acabar con semejante amenaza pero, las autoridades mágicas, descartaron esa opción pues no había garantía de que pudiesen eliminar al brujo. A demás del hecho de que si hacían daño a los dragones no solo sería nefasto para esa especie, sino que la respuesta del mago de varita verde podría ser igual en proporción o muy superior.

La comunidad mágica se cuidó muy bien de no permitir que los muggles, al tener tanta fe en sus armas de destrucción, actuaran por cuenta propia y desencadenaran un Armagedón por su inconsciencia. Los diferentes Ministerios internacionales no solo tenían que ocuparse de los brujos de varita de cristal y gobiernos ordinarios, también debían de seguir manteniendo la barrera que evitaba que ambos mundos se conocieran, pues el poder de la Inquisición podría hacerse fuerte otra vez y sería nefasto para todos los bandos.

Muy pocos sabían que el poder de este órgano había desaparecido, pero se utilizaba como arma de fogueo o elemento disuasorio para que los magos oscuros, habidos de dominación sobre el mundo, se extralimitasen en sus aspiraciones hasta que todo se normalizara en el planeta.

Nadie sabía donde se ocultaban las diferentes facciones oscuras, entre ellos los Mortífagos, aunque William Wood les había ordenado que permanecieran a la espera, pese a su increíble poder, no tenía la autoridad suficiente como para controlar a sus futuros subordinados. La caída de tres de sus compañeros le hacía parecer menos todopoderoso de lo que aparentaba al darse a conocer.

Pequeñas escaramuzas se comenzaron a producir por diferentes países del globo con la intención de desestabilizarlos y provocar su caída. Intento de derrocar gobiernos para instaurar dictaduras, en las que los magos dominaran con una falsa careta de líder carismático que venía a salvar al país.

Lo más terrible era que lo peor de la comunidad mágica se estaba organizando con lo peor de la sociedad, bandas criminales de toda índole, dictadores, guerrilleros, etc. Esto estaba provocando una sobrecarga de trabajo para los aliados que podría superarlos con creces.

En Londres, Harry Potter y tras dar las órdenes pertinentes, salía del bastión de las fuerzas del orden del Ministerio de Magia, junto con Ronald Weasley. En el interior del edificio de los Aurores había un caos tremendo. Todo el mundo iba de un lado para el otro, buscando información entre otras cosas, destacamentos completos salían en masa cuando recibían un aviso de una posible guarida de enemigos y partían a su detención.

Las Cinco Varitas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora