We are back [Miraculous Ladybug]

Treinta y uno

Por algún extraño motivo, ella podía sentir una sensación de ansiedad recorriéndole desde el pecho hasta las puntas de sus pies, tenía miedo, pues de un momento a otro la oscuridad la consumió, sin saber que era lo que en realidad había ocurrido.

Tomo una gran bocanada de aire, sintiendo como sus pulmones se reabastecían de oxígeno, abriendo finalmente sus ojos.

Encontrándose directamente con los de Adrien.

― Ya veo donde Emma heredo lo dormilona ― Comentó, observando de reojo hacia su espalda donde ella se encontraba en brazos de Nino, puesto que aún no había despertado.

― ¿Gòng Gōng? ― Se atrevió a preguntar, intentando reincorporarse, se encontraba totalmente tendida en el suelo, recargada sobre el pecho de Adrien.

― No está ya ― Declaró con una sonrisa que logró que el corazón de ella latiera un poco más de prisa ― Perdiste el conocimiento, al igual que mi madre, pero todo está en orden ― Explicó ― Bueno, casi todo ― Su mirada hizo un recorrido por él lugar, se encontraba completamente en ruinas, empapado además.

Pero el sol había comenzado a salir, claramente no era importante.

Marinette mordió su labio inferior, para después lanzarse sobre él, abrazándolo sobre el cuello.

Unas pequeñas lágrimas traicioneras no dudaron en salir mientras ella se aferraba a él, golpeando levemente su espalda.

― Eres un idiota, un completo idiota ― Bramó, intentando controlar sus emociones ― La próxima vez que quieras hacer algo estúpido por ti solo, me encargaré de patearte tu trasero ―.

Adrien dudo durante unos segundos, pero después correspondió el abrazo, atrayéndola suavemente hacia él.

Era la primera vez en todos esos años que la tenía así de cerca, que la tenía sin sus máscaras de por medio.

― Aun así, soy tu idiota, buginette ― Se defendió, soltando una leve risa. Marinette se tensó al escuchar aquel peculiar nombre.

Ambos escucharon una queja a sus espaldas, era Plagg, quien se encontraba sobrevolando la cabeza de Adrien, acompañado por Tikki.

― Chico, realmente tienes que hacerle caso, solo mira este desastre ― Exclamó el Kwami, dirigiéndose hasta donde se encontraba Trixxy, quien se encontraba descansando en el hombro de Alya ― Tuvieron que llamar al zorro con problemas de identidad ¿Sabes lo grave que es eso? ― Exclamó, señalándolo con sus pequeñas patitas.

Trixxy fruncio el ceño, ignorando por completo al Kwami negro, se sentía lo suficiente agotada como para discutir con él.

Ambos se separaron, observando como Tikki se acercaba a ambos y con sus pequeñas manitas los tomaba de sus mejillas.

― Me alegro que estén de vuelta, juntos ― Comentó ella, logrando que a ambos se les subieran levemente los colores.

― Tikki, no estamos ― Pero Marinette fue interrumpida, Adrien le había callado colocando su dedo índice en sus labios.

― Aun no ― Sentenció, comenzando a ponerse de pie, estirando una mano para poder ayudarle.

Ella la tomó sin dudar, siendo jalada hacia él de manera repentina para poder ponerla de pie de un solo movimiento.

Por su parte, Chloé en cuanto había perdido la transformación de Pollen había corrido hacia donde Christine se encontraba en cuanto despertó, recibiéndola así con un fuerte abrazo.

Gabriel pensaba que, durante muchos años había protegido minuciosamente aquel salón de cualquier cosa, todo por su esposa, y ahora le importaba poco que se encontrara destruido, porque Christine había vuelto y en definitiva ahora nada podría llevársela de nuevo.