19. "Muñeco voodoo" - Calum Hood

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- ¿Qué tal este?- salí del probador, mostrándole a mi mejor amigo un nuevo vestido. 

- Te queda genial- respondió él observándome de arriba a abajo.

- ¿Quieres dejar de decir eso siempre y ser sincero? No consigo decidirme por ninguno- me quejé.

- Lo soy, te quedan todos genial preciosa- respondió de nuevo, mostrando una de sus irresistibles sonrisas. Me debilitaba cada vez que lo hacía.

Inmediatamente me sonrojé y entré de nuevo al probador. No había prácticamente nadie más en la tienda ya que no quedaba mucho para la hora de cerrar. Pero ahí seguíamos, sin poder decidirme por ninguno.

Cogí el último vestido que quedaba por probarme. Era negro con algún detalle pequeño en blanco en la parte superior. Me llegaba por encima de la rodilla pero no era demasiado corto. Era perfecto. Me lo puse pero no podía abrocharlo ya que la cremallera quedaba en la espalda. 

Salí del probador y llamé a mi mejor amigo, el cual seguía con una sonrisa pícara en su rostro. Intenté no sonrojarme y me puse de espaldas a él en cuanto llegó. Me empujó ligeramente hacia el interior del probador. No entendí muy bien el porqué de su gesto pero no objecté nada y caminé de nuevo hacia el interior.

Posó una de sus manos sobre mi espalda desnuda, cosa que me hizo estremecer. Nunca me había hecho sentir este tipo de cosas hasta hacía unos meses atrás. Nunca pensé que me llegaría a enamorar de él, simplemente por el hecho de que éramos totalmente diferentes. Yo muy reservada, tímida y cabezota. Él en cambio muy atrevido, social y amante de los riesgos y cambios. Amaba sentirse diferente, único, especial. Y lo era.

 Recogí todo mi pelo sobre la mano izquierda y lo dejé caer sobre el mismo hombro para que no le molestase. Sentí como la cremallera poco a poco subía.

- Me han gustado todos los vestidos pero, sin duda, este es mi favorito- susurró sobre mi oído, subiendo la cremallera hasta el final.

El vello de mi nuca se erizó, al igual que un escalofrío recorrió toda mi columna vertebral, repartiéndose por cada maldito hueso de mi cuerpo. Sólo él era capaz de hacerme sentir así. 

Quise contestar pero mi garganta estaba paralizada, como si me hubiese quedado sin voz. Nunca antes me había pasado algo así.

Maldita sea Calum, ¿cómo puedes provocar esto en mí? 

- Tienes un muñeco voodoo de mí, ¿verdad?- preguntó su suave y ronca voz detrás mío, rozando su aliento contra mi nuca-. No puedo controlarme a mí mismo. Quiero hacer que estos sentimientos que me hacen amarte más que un amigo, desaparezcan. Quiero que desaparezcan pero no puedo. Has hecho algún hechizo sobre mí y no puedo alejarme de ti. Y duele, en mi cabeza, en mi corazón, en mi pecho. Duele mucho pequeña. Tengo problemas para controlar la respiración cada vez que apareces y me sonríes. Tu sonrisa... Tu sonrisa me mata- hizo una pequeña pausa y depositó un suave beso sobre mi nuca-. No podía aguantar más las ganas de decirte todo esto. Por que sí, te amo, más que a mi vida. Te amaría hasta la muerte, pequeña.

No podía creer las palabras del moreno. ¿De verdad me amaba? 

Me giré para quedar frente a él y nos miramos a los ojos. Aunque él creyese que eran simplemente marrones, eran preciosos. Cada vez que le miraba, sabía como se sentía realmente. En estos momentos, sus ojos desprendían felicidad y nerviosismo. Probablemente los míos igual.

Cuando iba a decir algo, él se adelantó: - Si no sientes lo mismo no me importa, es sólo que no podía guardármelo más dentro. No quiero que nuestra amistad cambie por es...

No le dejé acabar la frase. Le tomé de la nuca y junté nuestros labios, uniéndolos en un suave y tierno beso. Nuestros labios se separaron pero nuestras frentes seguían unidas. Una sonrisa apareció en nuestros rostros. Una sonrisa de felicidad. Por que sí, era feliz.

- Sí, un mono- respondí riendo.

- ¿Qué?- preguntó, riendo también.

- Mi muñeco voodoo es un mono. Cada noche le abrazo imaginándome que eres tú.

- Ahora no tendrás que abrazarle a él, ya me tienes a mí- respondió Calum, dedicándome una de sus preciosas sonrisas-. Yo soy tu muñeco voodoo.

***

Hooooola amores.

Soy Moni, otra vez. Es mi cuarto imagina y le he cogido el gustito a esto. No es lo mismo escribir una fanfic a unos cortos imaginas. Espero que os guste.

Cómo ya dijimos, próximamente haremos una o dos fanfics, según las que queramos escribir (yo me apunto a todo así que me tendréis comentando los capis, no me odiéis mucho) y os diremos algo, ¿vale? Tened paciencia. 

Ha habido gente que por aquí o tw nos ha dicho que quiere una fanfic de los chicos y nos alegra que la gente nos quiera leer. ¡Sois un amor, en serio! Nos hacéis muy felices a todas con vuestros comentarios y votos.

Estamos llegando casi a los 5k leídas (ahora mismo lo acabo de mirar Y tenemos 4,999 JAJAJAJAJAJAJJA) y tenemos 253 votos. MUCHÍSIMAS GRACIAS, DE VERDAD.

Y nuestras cuentas de Spaussies: @Spaussies en tw, Spaussies en ig y ask.fm/Spaussies

Preguntad, respondemos a todo, no mordemos (casi) JAJAJAJAJJA es bromi:')

Siento alargarme pero es que asndkajcnsaic sois unos cielines.

Os quiiiiiero, 

      Moni xx

5 Seconds of Summer ImaginasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora