Help Me [Niall Horan]

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Llegué al hospital con Keppner luego de dos horas de viaje, estaba desesperado, triste, enojado conmigo mismo y no soportaba la idea de haber peleado con ____. Todo esto había sido mi culpa. Entré y me encontré a Alex. Me dijo que estaban operando a ____ y no sabía cuánto tardarían en extraer la bala porque según los médicos había perforado uno de sus pulmones y por ende, no podía ni siquiera respirar. Me senté en la sala de espera y pasaron unas seis horas cuando finalmente el médico salió y no tenía una buena cara. Me temblaban las piernas, pero me paré decididamente. 

-¿Familiares de ____ Payne? – Keppner, Burton y yo nos paramos.

-Soy su novio – dije y se me formó un nudo en el estómago.

-La operación no salió del todo bien… - hizo una pausa y suspiró – Ella está en coma, y no sabemos cuándo despertará. Por otro lado, estaba embarazada, pero ni siquiera lo habíamos notado porque eran las primeras semanas – dijo y sentí como me apuñalaban sus palabras.

-¿QUÉ? ¿Estaba embarazada? – los ojos se me llenaron de lágrimas. 

-Sí… lo lamento mucho – musitó el doctor – Tiene asistencia mecánica para respirar, ya que la bala había perforado su pulmón derecho. Quizás cuando cicatrice del todo, ella despierte, como quizás no. Lo único seguro ahora es que hay que estar preparado para todo. Con permiso, debo ir a hacer algunas cosas y luego vendré cuando puedas pasar a verla – se fue.

Me agarré la cabeza con las manos, me puse contra la pared y me dejé caer rompiendo en lágrimas.

Me sentía un idiota, sentía que no merecía llegar a ser padre. Era el segundo hijo que moría por mi culpa y no tenía más fuerzas para levantarme de aquel lugar.

Marqué el número de Liam en mi celular y le dije que viniera inmediatamente pero no le dije por qué. Recién iba a llegar mañana, porque estaba en España y debía viajar hasta EEUU; Boston para ser más preciso. No podía dejar de pensar en lo que pasaría.

-Ya puedes entrar – dijo el doctor.

-Está bien – me paré con dificultad y entré a la habitación con los ojos aún llenos de lágrimas. 

Ella estaba fría, conectada a mil quinientos aparatos distintos, y pálida. Me senté en una silla junto a ella, y no podía creer lo que veía. El amor de mi vida se había arriesgado por mí y yo había terminado con ella porque no quería que me odiara por subirla a un avión y enviarla a España.

Había sido un inmaduro, un cobarde, un idiota y sólo pude romper en lágrimas junto a ella.

No sabía cuándo despertaría, si en minutos, horas, días, semanas, meses o hasta años, pero estaba dispuesto a serle fiel por sobre todas las cosas y seguir amándola por el resto de mi vida.

- Te amo, ____ - dije tomando su mano, aun llorando - Siempre lo haré - besé su frente y salí.

*SEIS MESES DESPUÉS*

-Sigo sin poder creer lo que pasó – dijo Liam mirando por la ventana del hotel.

-Ya pasaron seis meses y sigue sin despertar – acoté mirando al piso.

-Al menos ya respira por sí sola. O bueno, casi sola. Solo tiene una mascarilla para no ahogarse. Hay que mirar el lado bueno – Pobre Liam… siempre tan optimista.

-Lo sé – suspiré – Es difícil, pero pronto va a despertar, lo presiento. ¿Crees que hay que decirle lo del bebé cuando despierte?

-No sé si en el mismo momento, pero un tiempo después habrá que hacerlo.

-La amo, Liam. El último “te amo" que le dije mientras ella estaba consciente y bien, ella cree que fue por lástima… Discutí con ella, corté nuestra relación… 

-Tranquilo, Niall. Ella te ama. Siempre va a amarte – me dijo Liam.

Partimos al hospital. Nos estábamos hospedando en el hotel de mi hermana, ya que solo nos quedaba a 20 minutos del hospital. En el viaje fuimos escuchando la radio y pasaron "Sad Song", de "We The Kings". No me contuve y dejé salir todas las lágrimas mientras Liam manejaba. Esa canción me identificaba demasiado en ese momento.

Llegamos al hospital y nos dirigimos a la sala de la cual el médico salía con una sonrisa en el mismo momento que íbamos a entrar. 

-Está desesperada preguntando por ustedes – nos sonrió el médico y me abalancé al cuarto.

La ví ahí con una sonrisa mirándome a los ojos, acariciando su pelo, sin el respirador, iluminada por la cálida luz que provenía de la ventana.

Estaba más que feliz. Mi respiración comenzó a acelerarse, parecía un sueño.

- Hola - me dijo con una mirada tierna.

- Hola - dije aún agitado. Liam entró detrás de mí y las lágrimas no tardaron en salir de sus ojos y corrió hacia ella. Yo aún estaba helado y sorprendido.

-Te extrañé tanto, pequeña – le dijo Liam abrazándola – Jamás vuelvas a asustarme así.

-No lo haré – sonrió. Su sonrisa iluminaba mi vida

– Niall – me miró.

-Los dejo solos – Liam salió de la habitación, no sin antes besar la mejilla de su hermana.

-¡Prométeme que jamás volveras a hacer eso, ____! – la abracé con sumo cuidado pero con mucho amor – Nunca vuelvas a hacerlo, estuviste seis meses sin despertar.

-¿Seis meses? Parecieron horas… 

-Te amo, nunca vuelvas a asustarme así, fueron los peores seis meses de mi vida.

-No digas que me amas si no lo sientes – sonrió triste y levemente – Está bien, enserio.

-¿Que no lo siento? ____ te amo más que a nada en el mundo. Eres todo lo que necesito, esas cosas las dije porque quería que fueras a España con Liam. Quería cuidarte y en realidad casi pierdes tu vida por mí. 

-¿De verdad me amas? – sus ojos se llenaron de lágrimas.

-Más que a nada.

La besé tiernamente, pero fue un beso corto. Aún no respiraba del todo bien y quería que se cuidara.

Liam volvió a la habitación y yo fui por un poco de agua para los dos. ____ aún no podía tomar nada. Fui por todo el hospital con una sonrisa.

Cuando volví hablamos de cómo habían sido estos seis meses y concordamos en que apenas esto pasara, iríamos a vivir los tres a Irlanda.

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Bueno, esto va llegando al final. Gracias por todo ♡