Help Me [Niall Horan]

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-Jamás cambiaste. Eres, fuiste y serás un idiota mujeriego que no tiene sentimientos por nadie. Todavía no sé por qué confié tanto en ti, y por qué te amé tanto, si lo único que haces ahora es lastimarme. Gracias por haber jugado conmigo, Niall. TE LO AGRADEZCO.
-Sabes que eso no es así, ____.
-Claro que es así, detective Horan. Usted jugó conmigo, y si alguna vez prefirió tener un trato distante, me lo hubiera dicho - hice una pausa - ¿Me amas?
-¿Por qué lo preguntas?
-Responde - exigí.
-No, ____... Ya no te amo - suspiró.
-Perfecto - me encaminé a la puerta.
-¿A dónde vas? - preguntó levantándose.
-No le interesa - salí y le cerré la puerta en la cara.

Estaba dolida, yo había confiado en él. Le dí todo de mí, todo lo que tenía. Me subí al ascensor y éste descendía levemente, haciendo que todos mis recuerdos con Niall volvieran a mi mente y que todo me produjera un asqueroso nudo en el estómago. Una vez fuera del hotel empecé a caminar sin rumbo, ni siquiera vi el nombre del hotel, ni donde estaba. Estaba completamente perdida pero no me importaba. Caminé por horas, y luego encontré una linda plaza. Me senté en un banco y comencé a llorar. Mi mundo se desmoronaba. Quien yo creí el amor de mi vida, no me amaba... Me culpé absolutamente de todo. No dejé de culparme ni siquiera un segundo, porque me dí cuenta que yo había causado todo. Él se había hartado de mí, mis lágrimas y mi miedo. Levanté la cabeza, y a lo lejos ví que un chico de remera a rayas corría hacia mí. Divisé que era Niall, así que me levanté y caminé por alrededor de la plaza. No quería tener que cruzármelo. Ya me había dolido todo, y demasiado. Un auto negro paró a mi lado, un hombre con la cara cubierta bajó y me agarró del brazo <<AYÚDAME, NIALL>> grité con todas mis fuerzas y me metieron en el auto, que prontamente arrancó.

*NARRA NIALL*

Se habían llevado a ____ enfrente de mis ojos. Me sentí destruido, no podía moverme. Marqué el número de Ashley y le dije donde me encontraba y la patente del auto, que la había visto cuando arrancó. Me dijeron que intentarían rastrearlo por satélite y que me vaya al hotel por mi seguridad, pero no podía hacer eso. Corrí por donde se había ido el auto, sin rumbo alguno, hasta cansarme. Estaba completamente exhausto y me encontraba en un callejón sin salida. Para completar mi mal día, el mismo auto paró frente a mí. Yo estaba casi desmayado por la deshidratación y el cansancio. No pude resistir mucho. Me llevaron y eso es lo último que recuerdo.

*NARRAS TÚ*

-Ni... Niall - mi voz estaba débil. No veía absolutamente nada. Me encontraba atada a una silla.
-¡____, al fin despiertas, mi amor! - dijo una voz conocida.
-¿Dónde está Niall?
-Él está a unos metros de ti. Tranquila, no te hará más daño, estamos juntos ahora - unos asquerosos brazos me rodearon y yo me moví para evitarlo pero solo logré quedar en el piso y golpearme fuertemente el brazo y la cabeza.
-No intentes resistirte, el destino nos ha unido - dijo a mi oído y quise tirarme de nuevo.
-____ - susurró con voz débil mi ex novio.
-Niall - mi voz recuperó su tono normal - Ayúdame, Niall.
-Perdóname - dijo él aún débil.
-Qué escena tierna - dijo Derek irónicamente.
-Déjanos en paz, Sloan - le grité - Arruinaste mi vida y dices que me amas. ¿Quién te crees que eres?
-Yo te amo, ____, y tú también me amabas. Por cierto, soy Marian Henderson.
-Si eso fuera cierto, lograste que te odie. Porque es lo único que siento ahora. Demuéstrame que me amas. Sácame de aquí. Desátame.
-Sólo si prometes no escapar, porque si escapas, el detective lo pagará.
-Está bien - asentí nerviosa.

Él me desató y pude ver su rostro. Lo miré con desprecio, furia y dolor, pero intenté no demostrarle eso. Me encontraba dentro de un gran galpón con muchos moños rojos tirados en el piso, colgados en las paredes, y adornando la silla en la que me encontraba. Era terrorífico, parecía todo una horrible película de terror que no terminaba nunca. Le pedí un poco de agua y él accedió. Me encaminé hacia Niall.

-¿A dónde vas, mi amor? - preguntó Derek apuntándome con su arma.
-Sólo quiero ver que él esté bien. Después de todo... si no fuera por él no me hubieras encontrado - quería seguir su juego para generarle confianza y luego poder huir con Niall.
-Solo un rato, y no intentes nada.
-Niall - le susurré tomando su cara una vez que me encontré a su lado y Derek, o Marian, no podía escuchar - toma un poco de agua, te hará bien.
-Perdón, te amo - susurró débil y puse la botella en su boca para que pudiera tomar. Él también estaba atado a una silla.
-Está bien, Nialler. Ya vendrán por nosotros. Tienes que estar fuerte para irnos de aquí.
-¿Te hizo daño? - volvió a tomar.
-No, estoy bien. Te amo. Volveré a verte, yo seguiré con su juego. Intenta desatarte, tienes un arma en tu campera - le di un último sorbo y volví a mi silla.

Marian me miraba con ojos perdidos.

-¿Tengo monos en la cara, Marian? - le pregunté.
-No, es que no te recordaba tan hermosa. Creo que estar con Niall te hizo bien - dijo en tono celoso.
-No estés celoso. Actué amar a Niall todo este tiempo porque sabía que tarde o temprano llegarías a buscarme.
-Espero que así sea.

Intentó besarme pero un ruido afuera lo interrumpió. <<No te muevas>> dijo y cargó su arma. De pronto Ashley apareció por detrás nuestro, desató a Niall cuidadosamente y me acerqué a ellos. Desafortunadamente, Derek nos vio.

-Sabía que era una trampa - dijo furioso y apuntó a Niall - Es todo tu culpa, maldito policía.
-Derek, no es culpa de nadie... baja el arma por favor - le dije intentando calmarlo.
-NUNCA - disparó y me abalancé sobre Niall. Repentinamente sentí el peor dolor de mi vida.

*NARRA NIALL*

____ arriesgó su vida por mí. La bala dio en su espalda. Tan pronto como Derek disparó, Ashley hizo lo mismo y un equipo completo de policías entraron al lugar. Alex Burton cargó a ____ en sus brazos y la llevó al helicóptero para llegar al hospital. Yo aún estaba inmóvil. Seguía débil, pero no soportaba la idea de que ____ pudiera morir. Derek estaba más que muerto, porque Ashley le disparó en la cabeza. A penas pude recuperarme un poco, Keppner me llevó en su auto hasta el hospital donde estaría ____. Fue el viaje más largo de mi vida, creo. Pasó demasiado lento. Los nervios, la culpa y el dolor me consumían totalmente.