𝑺𝒐𝒇𝒕 ✩ k.seokjin • k.jisoo

s e i s (II)

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Después de un día de clases bastante aburrido Jisoo se dirigía a la salida del campus, con la intención de volver a casa y seguir con sus tareas. Caminaba por los pasillos sin compañía, Jungyeon se había ido hacia un par de minutos debido a que tenia que ir donde su hermana para ir de compras con ella.

La joven se disponía a irse cuando escucho un pequeño estruendo al final del pasillo. Giro la vista encontrándose con una persona que recién parecía haber perdido el equilibrio de una pila de papeles y cajas. Con rapidez la pelinegra se dirigió hasta donde la persona ahora miraba el desastre a sus pies, hasta que Jisoo vio a uno de sus profesores. Sino le fallaba la memoria se trataba del profesor Hyunsuk, que impartía bastantes clases a distintos grados de la universidad. Por su parte ella le conocía de su clase de Gestión estratégica de moda, aunque según contaban los rumores el ya trabajaba con grandes compañías como asesor de imagen y publicista.

— ¡Señor Yang! Déjeme ayudarle — exclamo la pelinegra cuando logro llegar hasta donde el permanecía.

El hombre alzo la vista y se topo con su alumna recogiendo algunas carpetas con prisa mientras sujetaba su propia mochila.

— Jisoo, ¿aun estas aquí? Las clases terminaron hace ya un rato...

Ambos comenzaron a reunir los folios regados por el suelo, procurando no maltratar ningún papel con sus manos. Jisoo le sonrió al profesor mientras se dedicaba a poner todas las carpetas en una pequeña pila.

— Tuve que ir a la biblioteca — explico la joven — ¿Necesita que le ayude a llevar esto? Parece que tiene mucho trabajo

— Si, definitivamente tengo mucho que organizar — murmuro el señor Yang — ¿Estas segura de que no tienes que ir a casa ahora?

Jisoo negó mientras terminaba de reunir el papeleo en sus manos, al igual que el profesor junto a ella. Con un agradecimiento ambos se encargaron de levantar el grupo de folios y algunas cajas que al parecer tenían aun mas documentos dentro. Con cuidado ambos emprendieron camino por el campus hasta que llegaron al estacionamiento, donde el auto del señor Yang permanecía estacionado. A ojos de la pelinegra el auto parecía lujoso, y bastante espacioso para solo un hombre. Cada vez creía mas lo que decían de aquel hombre, que era una gran influencia en la industria aunque por alguna razón se dedicaba a dar clases en aquella universidad.

— Puedes ponerlos aquí — dijo el profesor Yang mientras abría el maletero del auto.

Sin dudar un momento Jisoo obedeció las indicaciones del señor Yang, colocando los papeles en el interior del maletero. Después le ayudo a colocar las cajas restantes y con un suspiro de alivio terminaron su la labor.

— Te lo agradezco, Jisoo — dijo el profesor mientras cerraba la enorme puerta — Habría tenido que ir al menos dos veces por todo ese papeleo.

— No se preocupe, me alegra ayudarle — menciono animada Jisoo.

Ciertamente Jisoo admiraba al profesor, y poder ayudarle aunque fuera en algo tan mínimo como llevar esos papeles la hacía feliz. Con una sonrisa en el rostro Jisoo estaba por despedirse cuando el profesor volvió a llamar su atención.

— ¿Hacia dónde vas? Podría acercarte a tu casa si gustas... Consideralo el pago por ayudarme.

Jisoo negó rápidamente pensando en que eso seria abusar de la amabilidad del profesor, no tenia prisa alguna en llegar a casa y no sabia si el profesor tenia mucho que hacer.