𝑺𝒐𝒇𝒕 ✩ k.seokjin • k.jisoo

t r e i n t a y n u e v e

Ensimismada, Jisoo no lograba dejar de mirar a Seokjin.

Sentada desde las sillas junto al equipo de asistentes y detrás del fotógrafo, la joven observaba la forma tan natural en que Jin se movía en el espacio sin dejar de mirar la cámara. De vez en cuando daba un vistazo al monitor donde Hyuna y otra persona revisaban las fotografías recién tomadas.

Conocía a Seokjin como un chico sencillo, un mesero que se esforzaba en su trabajo y un muchacho con tantos sueños en los ojos que era difícil no verlo sonreír. Sin darse cuenta, Jisoo le observaba con una expresión llena de orgullo, era difícil de creer que el chico que siempre se sonrojaba cuando le decía lo bien que lucía, estaba frente a una cámara, posando con tanta confianza.

Hyuna le daba ciertas indicaciones, mismas que Seokjin acataba con atención. Era curioso, Jisoo aun podía recordar la primera vez que había visto al chico; el desfile en aquel hotel organizado por la universidad. En ese entonces, Jin había estado tan nervioso que había tenido algo similar a un ataque de pánico, pero eso parecía tan lejano en ese momento.

Fue en ese momento que Jisoo fue consciente del tiempo que había pasado desde que conocía a Seokjin, prácticamente faltaba poco para que los meses se convirtieran en un año de conocerse. Cuando el nuevo semestre comenzara, sería cuestión de días, así como cuando Jisoo lo vio por primera vez en la oficina de la agencia donde trabajaba.

Definitivamente Seokjin había madurado, aun cuando se encerraba con ella en su departamento para ver caricaturas. El pensamiento la hizo sonreír, conocía a Seokjin más que a cualquier amigo de la universidad, incluso más que a Jennie. ¿Era posible ser tan cercano a alguien?

Y es que, Jisoo se había sentido sola tanto tiempo, que contar de esa forma con alguien como Seokjin era muy importante para ella.

— ¡Bien Seokjin, descansa un momento! — indicó Hyuna en voz alta.

El rubio asintió, relajando enseguida su postura y dedicándole una reverencia rápida al fotógrafo. La pequeña comitiva junto a Hyuna y al fotógrafo comenzaron a revisar las fotografías mientras comentaban ciertas cosas; Seokjin se acercó de vuelta a donde los estilistas se encontraban, sonriéndole a Jisoo.

— ¿Qué tal lo hice? — preguntó Seokjin.

— Debo admitirlo, hasta pareces atractivo— comentó ella.

— ¡Ya! ¡Ese no es un cumplido! — rebatió él.

La pelinegra se limitó a reír, mientras una estilista se acercaba a Seokjin con la intención de retocar su maquillaje y cabello. Era curioso, Seokjin tenía que inclinarse un poco para que la chica pudiera alcanzarlo, lo cual hizo que lograra notar el hecho de que Seokjin parecía haber crecido. Su rostro parecía más afilado que antes y su postura era menos desgarbada, como si ahora pudiera estar recto de forma instintiva.