29. No te busco

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Samuel: está bien-firmó el cheque-pon la cantidad que consideres necesaria-cogió las escrituras e Ignacio posó la mano sobre la suya.

Ignacio: aunque tengas las escrituras de mis tierras en tu poder nada cambia las cosas-Samuel se levantó ignorando sus palabras y saliendo del despacho.

Irina caminaba por los pasillos del dispensario, por hoy ya había hecho lo suficiente, al menos Andrea tenía un poco de confianza en ella, no pensaba bombardearla con preguntas, con Andrea primero se ganaría su confianza y entonces después empezaría la investigación exhaustiva, cuando salía del lugar sintió como una mano la jalaba, observó sorprendida a Flavio.

Flavio: dijimos que no deberías buscarme-Irina frunció el ceño molesta.

Irina: ¿¡Perdón!?

Flavio: lo que escuchaste, no debes buscarme

Irina: por favor Flavio, ¿Quién te crees? Yo ni loca vengo por ti, yo vine por otros motivos

Flavio: ¿cuáles motivos?

Irina: no tengo porque darte explicaciones-lo miró molesta, Flavio sonrió.

Flavio: no tienes, pero me las vas a dar-Irina negó-claro que sí-acercó sus labios a los de ella-sigues intentando investigar ¿Qué paso con Sofi?-Irina suspiró-por favor...-le acarició el rostro-deja las cosas como están

Irina: ¿por qué Flavio? Dime porque debo dejar el pasado así, yo necesito saber, entender, no me puedes decir que deje las cosas así, sin darme un motivo

Flavio: porque no quiero que sufras, porque no quiero que las personas que amo sufran-Irina frunció el ceño, sorprendida, ante las palabras de Flavio.

Irina: eso quiere decir que ¿me amas?-Flavio la observó, tragó saliva no pensaba responder esa pregunta-no es necesario que contestes-se hizo un lado para continuar con su camino-...y no te preocupes, que si vengo aquí no es por buscarte-se giró para verlo-puedes estar tranquilo-Flavio observó cómo Irina se alejaba de él.

La puerta de la habitación sonó y Samuel miró rápidamente su reloj, respiró aliviado, abrió la puerta y salió del lugar encontrándose de frente con Patricia, ella lo miró raro y se cruzó de brazos.

Patricia: su madre lo espera en la sala.

Samuel: dile que estoy algo ocupado... que mejor venga mañana

Patricia: como quiera...

Patricia abandonó el lugar por el pasillo y desapareció al doblar la esquina, de nuevo entró en la habitación y cuando iba volver a lo que estaba haciendo los golpes en la puerta lo interrumpieron nuevamente, resopló fuertemente y abrió la puerta, saliendo de nuevo, Patricia intrigada miró lo que estaba ocultando en aquella habitación.

Patricia: insiste en verle...

Samuel: está bien...-cerró la puerta con llave misteriosamente y se encaminó a la sala.

José Antonio: hijo ¿Qué tal?-frunció el ceño extrañado.

Samuel: papá ¿tú por aquí?-le dio un abrazo y miró a Patricia-me dijeron que solo había venido mamá-se acercó a su madre y le dio un beso en la mejilla.

Cayetana: el caso es que venimos a visitarte-se mostró muy sonriente y él se olisqueó algo-¿Qué tal todo? ¿Alguna novedad?

Samuel: no mucha... -los miró con suspicacia-aunque me imagino que si vinisteis hasta casa y me hacéis esa pregunta es porque vosotros si sabéis algo-José Antonio soltó una carcajada.

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