HEREDEROS

37. ¿Te enamoraste?

Patricia: lo colocas todo bien ordenadito en mi habitación-murmuró haciéndole la burla mientras movía una de las maletas de Andrea por el pasillo hasta la habitación de Samuel-pero que bicho le habrá picado a este, primero no la quiere y ahora parece que la adora-tiró la maleta enfadada al suelo y la ropa se extendió por el mismo-maldita estúpida-pisó por encima de la ropa-dios le da pan a quien no tiene dientes, ¡esta debía ser mi vida!-saltó encima de la ropa ensuciándola con los pies-llena de lujos, con un marido de infarto y con el mundo postrado a mis pies, pero no reina, ya me debes varias humillaciones.

Patricia acudió al baño con decisión y salió del mismo con unas tijeras en la mano, el orgullo permanecía dibujado en su rostro, entonces cogió la primera prenda y empezó a rasgarla con las tijeras mientras soltaba pequeñas carcajadas satisfecha por su fechoría, continuó con todas las prendas de Andrea hasta hacerle trizas, también estropeo el maquillaje y ciertos accesorios de ella, al terminar lo guardó todo como Samuel le había dicho, ordenadito.

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Irina no podía creer lo que acaba de descubrir, sentía un dolor enorme en su pecho, sus lágrimas ya inundaban su rostro, las palabras de Flavio retumbaban en su mente, ella y Sofía habían compartido el mismo hombre, el dolor la estaba cegando, no la dejaba pensar, subió de prisa a su camioneta quería irse alejarse de todo esto que la estaba lastimando, así que sin dudarlo arranco con desespero.

Todo el trayecto sus lágrimas no cesaron, el dolor por lo que había descubierto la estaba matando lentamente y es que ella lo amaba, amaba a ese hombre con todo su ser ¿por qué juego así con ella? ¿Por qué enamorarla? Si había estado con su hermana, cuando llegó a la hacienda intentó calmarse no quería que sus tíos la vieran así.

Entró por la cocina intentando controlar el llanto, lo único que quería era subir de prisa a su recamara y encerrarse a llorar, no podía con tanto.

Soledad: mira lo que estoy preparando-sonrió cuando la vio entrar, Irina se giró y el rostro de Soledad cambio completamente-¿Qué pasa?-se acercó a Irina preocupada.

Irina: no es nada Soledad-intentó no darle importancia, pero no sirvió de nada la mujer acarició su rostro con ternura.

Soledad: dime por favor ¿Qué te tiene así?-Irina no pudo contenerse más la abrazó rompiendo en llanto-por dios me estás preocupando-la dirigió hasta una silla para que tomará asiento-necesito saber ¿Qué te paso? me estás preocupando

Irina: Soledad yo... -guardo silencio.

Soledad: sabes que puedes confiar en mí-Irina la observó con cierta pena-¡Te enamoraste!-estaba sorprendida-dime ¿de quién te enamoraste?-Estaba ansiosa-por dios Irina ¡dime!-exigió.

Irina: de Flavio...-respondió con pesar, el rostro de Soledad cambio completamente-sé que él y Sofi tuvieron una relación.

Soledad: ¿él te lo dijo?-Irina negó-¿entonces cómo lo sabes?

Irina: escuche a Flavio hablando con Andrea-Soledad frunció el ceño, se levantó de la silla donde estaba sentada al lado de Irina y tomó un vaso para servirse agua-¿lo sabias?-observó a la mujer la cual estaba nerviosa-dime Soledad-se levantó poniéndose enfrente de esa mujer-¿él era el amor prohibido de mi hermana?-Soledad la observó sorprendida-te exijo que me contestes-su tono de voz era un poco alto.

Cayetana: ¿qué pasa?-observó a Soledad al mismo tiempo que a su sobrina-¿Qué es lo que Soledad te debe contestar?-Irina observó a Soledad.

Soledad: no es nada señora Cayetana-intentó darle una sonrisa, Cayetana la miro con cierta rabia.

Cayetana: no me digas que no es nada-observó a su sobrina-mi amor ¿Qué te pasa?-Irina negó, colocó una mano en su frente cuando sintió cómo todo le daba vueltas-¡Mi amor!-se acercó a ella tomando sus manos-mi vida estás helada.