DIAS DESPUÉS
Tras una jornada intensa de trabajo Ignacio entro en su casa, los muebles habían cambiado gracias al dinero que Samuel le había dado, con ese dinero no solo había cambiado el interior de su casa, también había repuesto parte de su ganado, había comprado alguna que otra hectárea para aumentar sus posesiones y finalmente había invertido bastante dinero en algunos negocios para incrementar sus ceros y así pagarle a Samuel todo lo que le debe para recuperar la escritura de sus tierras.
Entró en su despacho dándose cuenta inmediatamente de aquella invasión por parte de su gran enemigo: José Antonio Gallardo, allí estaba con una sonrisa triunfadora, sentado en su silla, con los pies en alto encoma de la mesa y con un puro en su mano, no tramaba nada bueno a juzgar por su rostro, mostraba el orgullo, el cinismo y la mala saña en sus ojos, carraspeo.
Ignacio: ¿Qué te trae por mis tierras?
José Antonio: he notado que has hecho cambios, se nota que... has recibido un buen sustento-sonrió.
Ignacio: bueno, imagino que estarás informado de quien me suministra esa cantidad-tragó saliva temeroso por aquella visita.
José Antonio: si, lo sé todo, que feo Ignacio, aprovecharse de una hija para sacarle dinero al mío-negó con la cabeza levantándose, tocó la mesa del escritorio.
Ignacio: Andrea ama a Samuel y tu hijo por mucho que lo niegue, cayó rendido a los pies de mi hija, no hará nada que me perjudique, eso haría que perdiese a Andrea.
José Antonio: ¿tú crees?-levantó una ceja-pues si... tienes razón el no haría nada, pero por desgracia, tiene un padre demasiado astuto-sacó unas hojas del bolsillo de su chaqueta e Ignacio las reconoció al momento, eran sus escrituras-no me resistí a cogérselas, son una bendita tentación-las besó con ansia-¿y ahora? ¿Qué hacemos Ignacio del Junco?
Ignacio: la deuda es con tu hijo.
José Antonio: no tengo ningún problema en comprarle la deuda y hacerla mía... ¿y bien? ¿Tienes el dinero?
Ignacio: no... pero lo tendré, he invertido y...
José Antonio: nunca tuviste ojos para las inversiones, no creo que tu dinero se multiplique, además... me gustaría tomar posesión de esto, ya mismo ¿no sé si te parezca bien?-Ignacio se quedó blanco-te parece estupendo yo creo
Ignacio se apoyó contra un mueble, estaba blanco como la nieve y apenas daba articulado palabra, cuando le dio las tierras a su yerno jamás imagino que pudiese estar aliado con su padre, a fin de cuentas lo único que Samuel exigía había sido casarse con su hija, porque ahora su enemigo tenía sus tierras, porque reclamarlas con tanta prisa.
Ignacio: yo... ¡el negocio no fue contigo!
José Antonio: yo tengo las escrituras de tus tierras... tú no pagas, yo me quedo con todo-se acercó a él y ambos se encararon-te dije que un día me las ibas a pagar y aquí estoy... 29 años después arrebatándotelo todo cuanto tienes.
Pero el golpe no iba ser solo para Ignacio, esa misma mañana dos demonios se habían puesto de acuerdo para importunar la paz y la tranquilidad de la familia del Junco, empezando por bloquear al rey para finalmente cargarse a su reina.
Cayetana: buenos días querida nuera...-Andrea levantó la vista del papeleo que tenía enfrente y frunció el ceño.
Andrea: buenos días señora-tragó saliva y se levantó-¿puedo ayudarla en algo?
Cayetana: veo que... te va bien con mi hijo ¿no?-ella frunció el ceño nuevamente.
Andrea: sí... ¿vino a preguntarme por su hijo?-apuntó sospechando de que sus segundas intenciones no iban ser buenas.
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HEREDEROS
FanficLa enemistad y el poder entre familias ha logrado marcar las vidas de Andrea y Samuel prácticamente desde su nacimiento, 10 años después, por fin podrán vivir su sueño de estar juntos para toda la eternidad, pero ¿Dejaran las rencillas del pasado y...