Durante el trayecto que separaba el rancho del junco de su “hogar” estuvo llorando de rabia, como pudieron hacerle eso, tanto su padre como Samuel la habían usado con fines lucrativos y ella como una tonta creyendo que se casaban por amor, soltó varios llantos incontrolables antes de entrar en el rancho, por unos minutos se quedó en el coche tratando de sacar todo el dolor que tenía dentro… lo que venía ahora no iba a ser fácil y menos con su hija en casa… Entró cogiendo una bocanada de aire.
Andrea: hola mi amor-se inclinó sobre su hija y besó su frente.
Esperanza: hola mami-sonrió.
Dorleta: ¿se siente bien señora? Su cara…-Andrea interrumpió.
Andrea: ¿Por qué no vais a montar un poco a caballo? Ya es hora de que esta amazona aprenda un poco-sonrió tratando de contener sus lágrimas y Dorleta entendió a la perfección que quería a la niña lejos de la casa, entonces obedeció sus órdenes.
Espero a ver como Dorleta se iba con la niña al exterior de la casa camino a las caballerizas, sus lágrimas querían traicionarla, pero no podía permitírselo, debía estar firme para lo que venía ahora, caminó decidida, había visto su coche en la entrada del rancho con lo cual estaría ocupado en su despacho, firmemente se paró frente a la puerta, cogió aire varias veces y limpió las lágrimas que planeaban salir de sus ojos, abrió la puerta fuertemente y él la miró.
Se dio cuenta al instante de que su cara era de pocos amigos, algo había pasado y realmente su mujer venía muy enfadada por algo o por alguien, se levantó intrigado por el rostro de ella y ella caminó hasta meterse dentro del despacho y cerrar la puerta.
Samuel: cariño ¿Ocurre algo?
Andrea: ¡Quiero el divorcio!-Samuel soltó una risa nerviosa.
Samuel: pero… que dices…-meneó la cabeza-Andrea no digas tonterías.
Andrea: ¿TONTERIAS?-él se sobresaltó ante aquel grito-¡ME COMPRASTE!-sus lágrimas nuevamente la traicionaron y él pasó una mano por su pelo, el momento que más temía había llegado.
Samuel: Andrea puedo explicártelo...
Andrea: ¡NO QUIERO TUS EXPLICACIONES!-respiró agitadamente-¡ME COMPRASTE COMO SI FUERA UNA PROPIEDAD! ¡ME HUMILLASTE DESPUES DE CASARNOS! ¡HICISTE CONMIGO LO QUE SE TE DIO LA GANA!-Samuel escuchaba sus reclamos atentamente sin poder pronunciar palabra, se lo merecía-¡TE PERDONÉ TUS CANALLADAS! ¿Y ME SALES CON ESTO? ¡¡ERES UN MISERABLE SAMUEL GALLARDO!! ¡TE ODIO!-avanzó como una fiera hacia él y comenzó a golpearlo en el pecho mientras que sus lágrimas se mezclaban con su rabia, él sostuvo sus muñecas tratando de detenerla.
Samuel: ¡Andrea escucha por favor! ¡Yo… fui un imbécil! ¡Me deje llevar por la rabia de no saber quién era el padre de Esperanza!
Andrea: ¡Y POR ESO TE CREES CON DERECHO DE HACERME DAÑO! ¡DE HACERME SUFRIR DE ESTA MANERA! ¡ME TRATASTE PEOR QUE A UN PERRO!
Samuel: Andrea no… mi amor las cosas no son…-trato de defenderse pero a quien quería engañar, no tenía defensa alguna, lo que había hecho, Andrea no se lo merecía.
Andrea: ¡NO ME LLAMES MI AMOR! ¡YO NO SOY TU AMOR! ¡TU NO ME MERECES! DESDE EL PRINCIPIO TRATE DE TENERTE PACIENCIA, COMPRENDER TUS DEMONIOS…
Samuel: ¡ANDREA TE AMO POR DIOS!
Andrea: ¡A BUENAS HORAS ME AMAS! ¡Después de todo lo que me hiciste, no te pienso perdonar! ¡QUIERO EL DIVORCIO!
Samuel: estás en todo tu derecho a no perdonarme-admitió culpable-sé que esto no se le hace a nadie, pero por favor, déjame explicarte…-ella tragó saliva tratando de recuperar el control de sus emociones, dándole así la oportunidad de explicarse-sabes que mis padres me comieron la cabeza, me metieron odio en tu contra… por eso le ofrecí dinero a tu padre a cambio de casarme contigo, solo así nos permitirían casarnos, pero… ¡Siempre te amé! ¡Jamás deje de quererte! Quise luchar contra ese sentimiento pero no pude… no fui capaz… tu ganaste mi corazón-tocó su rostro tratando de hacerla entrar en razón-después mis padres me obligaron a pedirle las escrituras de vuestras tierras a cambio de mas dinero-se dirigió hacia uno de sus cajones del escritorio-yo les dije que no me las diera y aquí las….-vio el cajón vacío-…tengo-tragó saliva.
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HEREDEROS
Fiksi PenggemarLa enemistad y el poder entre familias ha logrado marcar las vidas de Andrea y Samuel prácticamente desde su nacimiento, 10 años después, por fin podrán vivir su sueño de estar juntos para toda la eternidad, pero ¿Dejaran las rencillas del pasado y...