Lo moretones casi habían desaparecido por completo, menos mal solo eran un par en la cara el resto estaban ocultos bajo mi ropa, uno en mi costilla derecha, un par en mi espalda, esos eran los peores, quedaron marcados después de que golpearon la silla contra mí, tuve que estar ausente durante cuatro días, el dolor era insoportable.
Cuando te fuiste al parecer mi mala suerte apareció, resulta ser que aquel cabrón tenía dos amigos mas y entre los tres me dieron la paliza de mi vida, aún con el principal borracho, los otros dos estaban mas sobrios por lo que tomaron en desventaja, ellos no salieron ilesos, también se llevaron sus buenos golpes, pero como la mierda que yo quede peor sin embargo ya me encargue de ellos, al día siguiente tome represalias y ahora se hallaban en el hospital con costillas rotas, sin dientes y puede que necesiten una que otra puntada. ¡Ja!
En mis días ausente parece que me he convertido en la comidilla de los alumnos, no dejo de escuchar rumores sobre mi pelea o sobre mi venganza, sobre como mate a uno y a los otros dos los sigo torturando en mi sótano, cosa rara porque no tengo sótano.
Esperaba que me hablaras pero no lo hiciste, no es algo que fuera necesario pero lo esperaba, aunque ahora viéndote en la cafetería puedo notar por qué, tu novio parece un pulpo contigo, parece no querer soltarte, ese imbécil capitán de fútbol americano que mas bien es un capitán de mierda, debido a que nunca han ganado un juego desde que llego, que por lo que noto quiere succionarte cuando te besa, me han dicho que se entero de la situación y que ahora no te deja ni a sol ni a sombra, aquí es donde me pregunto, ¿Dondé cojones estaba cuando lo necesitabas? entonces me ves, me regalas una sonrisa esperanzada hasta que tu cabrón novio toma tu barbilla forzándote a verlo, antes de que ponga sus labios en los tuyos me mira con suficiencia mostrando sus dientes con arrogancia. ¡Maldito lame-bolas!, que la chica de mis sueños te este besando no significa que me lo tengas que restregar, ¡joder!, desvió la mirada al no soportar ver mas esas estúpidas acciones.
Si tus besos hubieran sido míos, ten por seguro que los hubiera procurado como nadie mas lo hubiese hecho.