Capítulo 6

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Hoy parecía ser un gran día, el cielo tenía unas nubes hermosas y el sol tan radiante que te hacía sonreír con sólo sentir el calor sobre la piel. Colgaba mi amada cámara en mi cuello, y tomaba mi bicicleta para salir con Mike. Habiamos pensando que además de pasear y fotografiar, podríamos llevar algunas cosas para hacer un pequeño picnic al aire libre, asi que tomé una canasta, y la llené con bocadillos y algunos jugos naturales que preparó Ana hace un par de días.

Se veía tan feliz pedaleando a mi lado junto con la brisa que azotaba su largo cabello castaño. Era primera vez que haciamos un picnic juntos y Mike adoraba comer, estaba encantado.

Nos detuvimos cerca de un largo con bastantes areas verdes, parecía no ser visitado recurrentemente pero era perfecto para fotografiar sin interrupciones. Dejamos nuestras bicicletas cerca de un árbol y Mike salió a explorar el área buscando cosas que le llamasen la atención, mientras yo me encargaba de instalar el mantel sobre el cesped y todo lo que mi castaño amigo iba a devorar.

-El día está hermoso- soltó Mike, observando el lugar con sus manos en las caderas-. No pudimos elegir un mejor momento.
-Tenía una amiga que decía que nada pasa por casualidad- respondí.
-Tiene razón- me sonrió.

Me senté sobre el mantel seguido de Mike, observando que cosa de las tantas que había traido seria la primera en atacar. Tomé un par de vasos para llenarlos con el jugo de arándanos que preparó Ana, y le entregué uno a Mike.

Bebimos en silencio contemplando una vez mas el lago en total calma, era un lugar especial para venir a reflexionar y pensar a solas.

-Recuerdas la vez que mi cámara cayó al agua- mencionó Mike, sin quitar su vista al lago.
-Claro- respondí.
-Ese día me sentí horrible, como si mi sueño se hundieran tal y como mi pequeña cámarita- dijo pensativo-. Luego pensé que las cosas materiales no deberian tener tanta importancia como solemos darle asi decidí superarlo, pero apareciste en mi cumpleaños con una nueva- soltando una risa al recordarlo.
-Creo que merecías tener otra.
-Y te lo agradezco, pero creo que necesitaba perderla para aprender algo importante.
-¿Qué cosa?- pregunté confundida.

Mike soltó su vaso y se giró para hablarme directamente a los ojos.

-El talento no se basa en tener cosas costosas, ni siquiera se basa en tenerlas- respondió-. De hecho, entendí que siempre tuve la mejor cámara conmigo- apuntando a sus ojos. Lo miré sin entender a lo que quería llegar.
-¿Tus ojos?- pregunté.
-Caro.. -suspiró-. Ese día me sentí un estúpido por subir a ese árbol, yo quería tomar una foto de ti pero me distraje y se soltó de mis manos.
-Lo siento- respondí dudosa.

Suspiró nuevamente y se acercó tomando mis manos entre las suyas.

-Ese día te veías tan linda contemplando el lago, con tu cabello suelto que se lo llevaba el viento, flameando como tu vestido de lunares.
-¿Cómo te acuerdas de eso?- reí.
-Porque no necesite una cámara para eso, todo quedó en mi memoria. Así como las miles de fotos que he tomado con mis ojos cuando te distraes y eres tú misma- sonreía sin soltar mis manos.

Mike era experto en hacerme sonrojar con sus palabras cursis. Sonreía mientras se marcaban los hoyuelos de sus mejillas y a su vez, acariciaba con ternura mis pequeñas manos.

-Caro, me gustas- soltó sin más.

Mi mente se bloqueó al instante, me rehusaba a aceptar que Mike se estaba declarando sin tirubear.

-¿Cómo asi?- pregunté negando con mi cabeza aún sin reaccionar. -¿Qué te gusta, mis ojos? A todos les gustan mis ojos.
-No Caro, hablo de ti. Me gustas en serio- reiteró.

Solté mis manos de las suyas con brusquedad, sabía que este día llegaría pero creí que sería tan pronto. Los chicos tenían razón.

-Michael.. -solté en voz baja alejándome.
-Créeme que esto no ha sido fácil para mi. No quiero presionarte ni perderte.
-Es que.. creí que sólo eramos amigos- dije afligida-. Creí que me tratabas lindo como a todo el mundo.
-No Caro, jamás te he tratado como a los demás. Yo estoy enamorado de ti- tomando mis manos nuevamente.
-No quiero romper tu corazón Mike, no quiero ser yo quien lo haga.
-Lo sé, sabía que no sentías lo mismo-dijo con tristeza, evadiendo la mirada.
-Es que no lo sé Mike, estoy confundida- respondí cruzándome de brazos con tristeza.
-¿Es por Agustín? -preguntó con seguridad.
-¿Agus? -reí-. Pero si apenas lo conozco.

Mike rodó los ojos con indiferencia, apostaría a que sentía como si mi amistad con Agus fuese una amenaza a lo nuestro. Lo odiaba.

—Pero yo te conozco a ti, sé cuando alguien te interesa— respondió.
—Claro, y así como me conoces tanto deberias saber que nunca he estado en una relación porque no sirvo para el amor, no lo conozco.
—¿Cómo no conoces el amor si tú misma me lo enseñaste?— mirándome a los ojos con ternura—. Esa calidez al hablar, esa luz al ayudar y esa sonrisa que podría calmar a un bebé. Cada vez que la veía sabía que quería verte feliz siempre, conmigo. .

Mi corazón se derretía en cada palabra y me preguntaba cómo pude cegarme durante todo un año y no ver algo tan obvio. Y es que Mike siempre había sido un buen chico, amable y cariñoso con todo el mundo; creía que todo ese amor era algo normal.

Sus palabras rondaban en mi mente distrayendome por completo, sin notar como una varoniles manos tomaban mi rostro con ternura, acercándome cada vez mas a su rostro. En un abrir y cerrar de ojos ya habia plantado sus labios en los míos, y yo parecía disfrutarlo.
Cerré mis ojos sientiendo el propio sabor del arándano en mi boca, esto no era lo mismo, no se sentía como mi primer y último beso.
Comencé a pesar fugazmente en los recuerdos de mi infancia, seguido por mi primer encuentro con Mike y todo los lindos recuerdos que pasábamos juntos, y no sentía nada. Sólo sentía esa culpabilidad de dejarme llevar por la emoción y sólo estar besándolo para no herir su corazón con un cruel rechazo, esto estaba mal.

Me separé con brusquedad y le mire a los ojos totalmente agitada.
—Lo siento.. yo- balbuceaba—. No puedo Mike, no puedo hacerte esto.
—¿Hacer qué? ¿Qué pasó?— preguntaba confundido.
—Mike— suspiré. —No puedo obligarme a sentir algo por ti.

Sus comisuras cayeron fruncidas tanto como sus hombros al escuchar mis palabras, su mirada afligida me rompía el corazón pero debía hacerlo. No podía mentirle.

—Te quiero pero, prefiero que mantengamos nuestra amistad— agregué con tristeza. —Lo siento tanto.

Me levanté rápidamente y tomé mi bicicleta, necesitaba escapar tan pronto como pudiese. Ni siquiera podía voltear para mirar el rostro de Mike, que probablemente sería el más crudo que vería jamás.

Pedaleaba tan rápido como podían mis piernas, mientras tragaba pesadamente sintiéndome la peor persona del mundo.
sabía que esto pasaría; quería llorar, queria gritar y pisar algunas estúpidas flores de tanta ira conmigo misma, había roto el corazón de la persona que mas amaba en este planeta.

Frené de golpe frente a la casa de Ana y Jorge, para luego golpear la puerta mil veces hasta que se abriera. Necesitaba un abrazo.

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Yo sé que me van a odiar asi que no diré nada respecto al capítulo jajs
muchas gracias como siempre.

Quería mencionar algo respecto a los flashback que causaron un tanto de confusión; aqui les explico:
- No lo mencioné explícitamente porque era intencional ese poquito de confusión, quería que ustedes mismas notaran el cambio entre los tiempos.
- No son flashback en plan "recuerdos" que se le vienen a la cabeza, sino mas bien parte de la historia en sí para que entiendan cosas que pasaran en el futuro.
- Corregí ese punto asi que ahora todos los capítulos de "flashback" tendran como subtitulo "flashback" para evitar próximas confusiones.

Eso es todo, cualquier otro punto o sugerencia no duden en avisar, les quiero 💕

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